Las Fiestas Trienales de El Paso celebraron este sábado su día grande con La Bajada en Romería de la Virgen del Pino desde la ermita del monte hasta el casco urbano del municipio, donde permanecerá hasta el 1 de septiembre. La jornada estuvo marcada por la emoción y devoción de los pasenses, así como de los miles de romeros provenientes de toda la isla y otros puntos del archipiélago.
“Hemos vivido una Romería muy emocionante, más de 35 mil personas se han congregado en El Paso, formando una marea de fe y tradición que ha inundado nuestras calles. La participación y el fervor con el que hemos recibido a nuestra Virgen del Pino demuestran una vez más la grandeza de nuestro pueblo y el profundo vínculo que compartimos con nuestra Bajada”, destaca el alcalde de El Paso, Eloy Martín.
El evento comenzó al mediodía con la misa de romeros oficiada por el párroco Domingo Guerra, a la que asistió la Corporación de El Paso, encabezada por el primer edil, junto con otras autoridades insulares, entre las que se encontraba el presidente del Cabildo y exalcalde del municipio, Sergio Rodríguez. Como es tradicional, tras el repique de campanas se sucedía la ofrenda musical y de baile por parte de la Agrupación Folclórica Cumbre Nueva, para a continuación acompañar a la Sagrada Imagen durante el recorrido.
El trayecto, más de cinco kilómetros engalanados para la ocasión, fue un reflejo del ambiente festivo, con la alegría y hospitalidad característica de los vecinos y parrandas que mostraron a los visitantes lo mejor de la música y gastronomía de la tierra. Este año se alcanzó un total de 207 carrozas, carros y carretas inscritos, una prueba más de la alta participación. A pesar del intenso calor, el entusiasmo por celebrar y compartir no se vio afectado.
La llegada de Nuestra Señora del Pino al casco urbano y a la Iglesia de Nuestra Señora de Bonanza fue un momento especialmente emotivo, donde una multitud de fieles la esperaba entre aplausos y vivas a la Virgen.
“Sin lugar a dudas, este día quedará grabado en nuestros corazones. Ha sido un verdadero éxito colectivo, que ha superado todas las previsiones, fruto del trabajo, el cariño e implicación de todos. Quiero agradecer de manera especial la labor de los cuerpos de seguridad, emergencias y sanitarios, de todas las concejalías y personal del Ayuntamiento, del dispositivo de limpieza, así como a tantos voluntarios, colectivos y agrupaciones, vecinos, barrios y parroquia, que con su dedicación y esfuerzo han contribuido a que esta Romería vuelva a ser una de las más aclamadas y concurridas de Canarias”, concluye el alcalde.
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Antes ponían: “casi 36,000 personas”. Ahora ya afirman que hubo 35,000 personas. Yo fui y más de media isla estaba allí. Es un acto impresionante que reúne a palmeros residentes y no residentes en La Palma.
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