Las ayudas de Breña Baja para rehabilitación de viviendas inyectan más de 600.000 euros en tres años y benefician a 125 familias y particulares

El Ayuntamiento de Breña Baja ha ayudado directamente a 125 familias y particulares  del municipio a llevar adelante la rehabilitación de su vivienda en los últimos tres años, de la mano del Programa Regional para Combatir la Despoblación en el Medio Rural del Plan de Vivienda de Canarias 2020-2025, derivado del convenio de cooperación entre la FECAM y el Instituto Canario de la Vivienda.

El programa ha crecido en cada una de las ediciones publicadas entre 2021 y 2023. No en vano, de 33 beneficiarios en su primera edición, se pasó a 40 en la segunda y 52 en la tercera, para un total de 125 familias y particulares beneficiados.  También la inversión ha crecido, pasando de 156.527’89 el primer año, a 271.618,97 en la edición ejecutada el pasado año.

“Nuestra responsabilidad en materia de vivienda está fuera de duda. Trabajamos sin descanso en diversas líneas. Por un lado, la ayuda directa, como en el caso de la rehabilitación de viviendas. Pero también de forma indirecta, poniendo todo nuestro esfuerzo en facilitar suelo a quienes tienen competencia para crear nuevas viviendas, nueva oferta. Esto lo hemos explicado días atrás en relación con la construcción de las 11 VPO de El Zumacal ahora en marcha o la compra con fondos propios de una parcela en San José, por valor de 260.000 euros, en la que se prevé la construcción de nuevas viviendas de protección oficial en coordinación con el Gobierno de Canarias o la la puesta a disposición de suelo municipal para su compra por parte del Cabildo de La Palma”, explica Borja Pérez, alcalde de Breña Baja.

Nueva convocatoria de ayudas a la rehabilitación 

En próximas fechas se abrirá una nueva convocatoria de las ayudas para la rehabilitación de viviendas. Entre las actuaciones subvencionables en viviendas individuales se encuentran: obras de rehabilitación en viviendas aisladas o interior de viviendas en edificios, reformas para adaptar la vivienda a personas con diversidad funcional y movilidad reducida, instalaciones domóticas que mejoren la accesibilidad y autonomía de personas con discapacidad funcional y movilidad reducida; reformas de cocina, baños y aseos; instalaciones eléctricas de baja tensión, fontanería y saneamiento; conservación de cubiertas, azoteas, fachadas y medianerías; procesos de desamiantado, carpintería exterior, así como refuerzo o sustitución parcial de los elementos estructurales.

También las intervenciones en zonas comunes de edificios residenciales pueden ser objetivo de inversión. Es el caso de enlaces de electricidad, fontanería, red de evacuación de aguas, conservación de cubiertas, azoteas, fachadas y medianerías, desamiantado, carpintería exterior, refuerzo o sustitución parcial de los elementos estructurales y obras de accesibilidad. 

En todos los casos, las viviendas deben constituir el domicilio habitual y permanente de los propietarios o arrendatarios en el momento de la solicitud, y tener una antigüedad al menos, veinte años. En el caso de los edificios de viviendas de tipología residencial estos deben acreditar haber sido finalizados antes de 1996. Finalmente, la obra o reforma para la que se solicita la ayuda no podrá haberse iniciado antes de la presentación de la solicitud.

“El trabajo del Ayuntamiento ha sido fantástico. A través de la Agencia de Desarrollo Local, en la captación de subvenciones, y de nuestros Servicios Sociales en la detección y valoración de situaciones de vulnerabilidad ha permitido un fantástico resultado de esta línea de ayudas directas. ”, señala Fran Martin, concejal de Servicios Sociales. 

“A la hora de ofrecer ayudas directas a nuestras vecinas y vecinos, el Ayuntamiento opta por esta linea de subvención y no por otra, porque conocemos la importancia y las dificultades que tienen nuestros vecinos para adaptar, rehabilitar o reformar su vivienda.”, añade Abel Pérez, concejal de Desarrollo Local en Breña Baja.