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Los Llanos de Aridane

El Pleno aprueba el Plan de ajuste que no contempla recortes sociales ni despidos

  • El gratis para todos y para siempre se ha acabado en el municipio

Pleno de Los Llanos de Aridane.

El Pleno del Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane aprobó hoy el Plan de ajuste económico que debe presentar al Ministerio de Hacienda antes del 30 de marzo, tras haberse acogido al plan de pago a proveedores puesto en marcha por el Estado. El documento, cuyo horizonte queda fijado en el 2022, prevé la optimización del gasto corriente, la mejora de los ingresos y garantiza la estabilidad presupuestaria de las arcas municipales sin recortes sociales ni despidos de personal.

En lo que a los servicios sociales se refiere el concejal de Hacienda, Mariano Hernández Zapata, explicó que "los técnicos de recaudación y tesorería han realizado un trabajo extraordinario para evitar que tengamos que tocar ni un solo euro en esta área porque en tiempos de crisis no le vamos a dar la espalda a las familias que peor lo están pasando".

Respecto a la plantilla laboral anunció que se elaborará una Relación de Puestos de Trabajo (RPT), actualmente inexistente, para reorganizar el personal de la corporación y optimizar los recursos humanos. Además, explicó que las vacantes generadas bien por jubilación, baja definitiva o fallecimiento y salvo en aquellos casos que sea estrictamente necesario reemplazo para cubrir servicios básicos, serán asumidas por el personal existente.

Incentivar las jubilaciones anticipadas o parciales y ajustar la contratación de personal a través de convenios con otras administraciones públicas en función de la financiación obtenida, son otras de las actuaciones contempladas en el Plan, en el capítulo de gastos de personal.

Recortar gastos

La externalización de los servicios municipales deficitarios como el agua, que anualmente genera un déficit de 510.000 euros o la basura, con una cantidad de 240.000 euros, la suscripción de contratos de suministro y servicios anuales o plurianuales para lograr economías de escala en la gestión de las compras a precios más bajos, el control del gasto en actividades lúdicas y festivas apostando por la cofinanciación o autofinanciación de las mismas, la búsqueda de locales o almacenes a costes más económicos y potenciar inversiones que se traduzcan en ahorro de gastos en bienes corrientes, son algunas de las principales alternativas recogidas en el documento para reducir el gasto corriente y de funcionamiento.

En este punto, el edil responsable de Hacienda expuso que "lo que no puede ni debe hacer un Ayuntamiento es gastar lo que no tiene, o al menos ese es el principio que guía la política de trabajo de este nuevo Grupo de Gobierno" y agregó que "lo que resulta evidente es que si hay servicios que son deficitarios y su explotación puede ser encomendada a una empresa privada, creemos que lo mejor es que el Ayuntamiento los externalice porque así garantizamos que se mejorará la gestión y la calidad de los mismos y generará empleo".

En lo que a transferencias corrientes se refiere, el edil afirmó que en años sucesivos se procederá a un decremento porcentual del 5% anual permitiendo que la institución se adapte progresivamente a la nueva situación. Respecto al gasto en inversión, Hernández Zapata expuso que en el presente ejercicio la corporación ya ha asumido una reducción con cargo a fondos propios. Una tendencia que se mantendrá en 2013 hasta alcanzar en el ejercicio 2016 la cifra de 600 mil euros principalmente para contemplar la reposición de las infraestructuras.

La medida explicó el concejal "exige cambiar de planteamiento y trabajar para buscar financiación supramunicipal porque de nada sirve anunciar macroproyectos que no llegan a ejecutarse u obras faraónicas que al final quedan a medio ejecutar con el perjuicio que ello genera a este municipio" y agregó que "de forma paralela tenemos que aprovechar los mecanismos existentes para desbloquear el desarrollo municipal y convertir nuestro municipio en un referente para atraer inversión privada".

Mejorar ingresos

A la hora de explicar las medidas a adoptar para cumplir con la máxima de mejorar los ingresos de la corporación municipal, Mariano Hernández recordó que la cara dulce del Decreto es que ofrece a los Ayuntamientos la posibilidad de abonar las deudas pendientes a los proveedores que llevan varios años sin cobrar pero que obliga a la corporación a realizar un duro plan de ajuste con la penalización de retener la participación en los ingresos tributarios del Estado a la administración local que incumpla los acuerdos recogidos en el mismo.

Ello implica, matizó el edil de Hacienda, que dotemos al Ayuntamiento de los ingresos corrientes suficientes para financiar los gastos que genera la gestión municipal y la amortización de las operaciones de endeudamiento, incluída la que se realice para el pago a proveedores y representa "la cara amarga porque conllleva la implantación de medidas difíciles e impopulares que no se aplican por capricho de este Grupo de Gobierno sino porque obviarlas sólo conduciría a nuestro Ayuntamiento a la quiebra más absoluta y les garantizo que a día de hoy, ya tenemos un pie fuera del abismo".

Las mejoras recaudatorias adoptadas hasta el momento, explicó Mariano Hernández, han permitido que el Ayuntamiento mejore los ratios en cuatro puntos porcentuales "lo que en los primeros siete meses de gobierno nos han permitido superar todos los filtros exigidos por la auditoría canaria y recuperar los máximos contemplados en el Fondo Regional de Financiación para 2012". Además, valoró el resultado cosechado con el envío de notificaciones a todos los deudores del Ayuntamiento y los cobros por vía de apremio.

Entre las reformas estructurales recogidas en el Plan de ajuste municipal, se incluye una profunda revisión de impuestos que según el edil llevan más de una década estancados con el consecuente desfase recaudatorio que ello genera. La revisión catastral, sobre todo teniendo en cuenta que la última se realizó hace doce años, el alta en el padrón municipal de inmuebles no registrados y el incremento del 10% establecido por el estado en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) que se hará efectivo para 2013.

Asimismo, Mariano Hernández anunció modificaciones en los impuestos sobre vehículos de tracción mecánica o actividades económicas destacando que los tipos impositivos de la corporación llanense aún con las modificaciones actuales y a diferencia de otros ayuntamientos y municipios de la Isla se encuentra por debajo de los máximos permitidos.

La aprobación de nuevas ordenanzas que permitan mejorar la financiación y garantizar la calidad de los servicios que presta la corporación en óptimas condiciones, además de sus sostenibilidad económica es otro de los puntos recogidos en el Plan. Esto se traduce, según el concejal de Hacienda, en la aplicación de nuevas tasas municipales aplicables a la servicios sociales como la asistencia a domicilio o centro de Día, actividades culturales o deportivas, Escuela Municipal o urbanismo revisando las concesiones municipales, licencias y ocupación del suelo público, entre otras actuaciones.

"No podemos olvidar, añadió el edil, que hay ciudadanos de nuestro municipio que viven en riesgo de exclusión social, bajo el umbral de la pobreza o con rentas mínimas, frente a otros que a pesar de su patrimonio y de su elevada renta se benefician por igual de unos servicios municipales que a día de hoy son igual de gratis para todos y eso es lo que hay que cambiar, porque hace muchos años que era evidente que se trataba de una situación insostenible y que lejos de favorecer a todos, marcaba una discriminación social positiva hacia los que más tienen".

Finalmente, el concejal de Hacienda añadió que es necesario apostar por criterios presupuestarios como la austeridad y la eficiencia que garantice la igualdad de oportunidades y el cumplimiento de las obligaciones en el pago de impuestos con criterios objetivos y sin tratos de favor aunque ello implique el copago de pequeñas tasas al alcance del bolsillo de los ciudadanos que, primero estén en situación económica y laboral para asumirlos, y segundo disfrutan de unos servicios públicos de calidad pero que tienen un coste de mantenimiento inviable en el marco de esta crisis económica actual y necesitan de un empuje suplementario para poder seguir perpetuando el estado del bienestar creado durante las etapas de bonanza económica.

 

 

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