“Mosqueo” de algunos ciudadanos por la puesta en funcionamiento de los parquímetros en la capital

En esta isla, nos conocemos todos, escarabajo, cuando hablo de centro, no me refiero a que esto sea una gran ciudad, que ya sé que no lo es. En esta isla no hay ninguna ciudad como tal, solo pueblos, unos más grandes, en extensión y/o habitantes, que otros, y otros más pequeños, solo eso. Al referirme a centro, me refiero a aparcar el coche enfrente mismo de la tienda que es lo que pretenden muchos. Aquí, caminar está mal visto, sin embargo cuando nos vamos fuera, no nos importa aparcar en el quinto carajo y caminar lo que haga falta y encima, cuando regresamos, nos vanagloriamos de ello. Aquí, las cosas funcionan distinto, preferimos sacar el coche para recorrer 150 metros, pretendemos tener aparcamientos gratuitos pero queremos pagar por su mantenimiento, queremos vivir donde nos sale de las narices, pero queremos que nos den todos los servicios by the face, está claro que esta isla es diferente, una, porque los políticos son como son, pero dos y no menos importante, porque nosostros, tampoco estamos a la altura. Esta mañana, sin ir más lejos, las zonas de aparcamientos que están en el campo del mensajero, las de la barriada de los pescadores e incluso, la zona más alta de la portada, a la altura de la escalera que comunica con la avenida de los indianos, TODAS, con aparcamientos gratuitos libres, en las zonas azules, gente queriendo aparcar y haciendo colas en las maquinitas, ¿no lo ves claro?, pues entonces, habrá que comprarse gafas. Me reafirmo en lo dicho, mucha boquita para hablar y quejarse, pero solo para engañarse a si mismos porque la realidad es bien diferente.