Breña Alta alcanza por primera vez la negra cifra de los mil parados

Entiendo su planteamiento Sr. Edu y obedece a datos que supongo correctos. Pero ese no es el problema.

Cuando se ha trabajado en la planificación económica de la empresa, y en la viabilidad de las inversiones, se da uno cuenta que la dificultad principal no viene dada por, si es posible o no, la implantación de una determinada actividad sino de la "oportunidad" de la misma. Me refiero a si es o no oportuna la inversión, comparada con otras alternativas, pues los dueños del dinero normalmente son muy desconfiados y pretenden tener las mayores garantías de que habrá retorno, o sea una cuenta de resultados con un margen de beneficios suficiente para no solo cubrir gastos sino recobrar el desembolso a un ritmo superior al coste financiero del mismo.

Que pasa con el turismo en la Palma. Pues que como para poder comercializar un producto en un mercado competitivo hay que tener por lo menos algunas "diferenciales" que hagan que el producto tenga suficiente mercado, ha resultado que desde su implantación como destino turístico, ya sea por la razón que sea (falta de suficiente perfil propio, falta de calidad o variedad en los establecimientos, oferta limitada y demasiado atomizada etc) La Plalma ha sufrido siempre de demasiados altibajos en la demanda.

Como tanto el negocio de alojamientos turísticos, como de tour operadores es un tipo de sector bastante particular, con un producto muy efímero por naturaleza. Me explico: En otros sectores se cuenta con un stock, en turismo el producto que Vd. no venda hoy, desaparece, pues no pude guardarlo para mañana, por lo tanto si hablamos de una temporada turística de seis meses y dado que los márgenes de beneficio por unidad de mercado son bajos, ha de contar con una alta rotación para disponer de un beneficio al final de la temporada.

Digamos, si un T.O. contrata en La Palma 500 camas hoteleras y programa suficientes plazas de avión para tener las mismas ocupadas, necesita vender seguro que el 90 % de su producto programado para cubrir costos, dada la altísima competencia que existe en este sector, basta que tenga dos o tres altibajos de algunas semanas durante estos seis meses, para que pierda dinero. Lo mismo le pasa al negocio de alojamientos, que se parte de un coste fijo demasiado alto, que normalmente representa un porcentaje de ocupación de 70 o 80 %, pues es un negocio con un alto coste de estructura de base.

Por lo tanto y concluyendo, el turismo de la Palma es posible en las condiciones actuales pero siempre va a ser minoritario y de clientes que buscan otra cosa que lo que le ofrecen los grandes destinos.

Por lo pronto y a mano, lo que nos queda es la agricultura que en cuanto aumente en un 30 o 40 %, tiene un efecto dinamizador del resto de la economía. Es así como funciona, basta que aumente el flujo del dinero para que actúe de inductor dentro de lo que cabe.

Perdone el largo comentario que a Vd. le podrá sonar a rollo marinero, pero créame que en lo que le he expresado llevo razón. Se preguntará que como me tomo la molestia de extenderme tanto para explicar una cosa tan sencilla, pero le diré que lo primero, me sobra tiempo por que estoy jubilado y lo segundo parece más fácil de lo que es en realidad.

De todos modos espero le haya servido para algo, no es mi pretensión establecer ninguna lesión magistral.

Los sitios pequeños como La Palma han de aprovechar todos los recursos a mano para teniendo una economía mixta, tratar de salir adelante. Una oportunidad desperdiciada es ser casi autosuficiente en producción de energía eléctrica. El que tenga dudas que vaya con calma a Madeira y estudie el asunto sobre el terreno, pero eso por lo pronto no le interesa al Sr. Soria, él sabrá porqué.