El fútbol y la identidad

Estimada sra Taganana, tanto tiempo… ¡Qué etapa aquella! Agradezco sus amables palabras, así como la felicitación por el ascenso de la UD Las Palmas al fútbol de élite, en la Primera División. También me alegro de volver a leerle, con el deseo que se encuentre bien. Sus comentarios, nunca pasaron desapercibidos, aunque como es públicamente conocido, tuviéramos algunos disensos. Lógicos por otra parte. Cierto que ni Pedri ni Moleiro, jugaran en el CD Tenerife, quizá al iniciar esa parte de mi anterior comentario aludiendo críticamente, a la desidia que el TT ha tenido históricamente con su cantera, y luego nombrar a Ayoze Pérez, le haya inducido a pensar que nombrara a los tres como ex jugadores del TT; como bien dice, nunca lo fueron, salvo Ayoze Pérez. Debí haber escrito, “la cantera de Tenerife”. Como siempre, no se le escapa un detalle. Y como diría Jonathan Viera, me parece bien.

Como es bien sabido, siempre he sido seguidor de la UD como del Barcelona, aunque no por ello he dejado de ser crítico en determinados momentos, con ambos clubes, aunque me costará algunos mal entendidos (me llegaron hasta a teñir de blanco jajaja), y cierta incomprensión. En verdad, solo se critica lo que se quiere. Lo otro es mera indiferencia.
A mi me gusta el fútbol de posición, pero también vertical y con circulación rápida de la pelota, siempre que las circunstancias del juego lo aconsejen.
Comparto igualmente su opinión acerca de la dificultad de poder mantenerse la UD en Primera División, en donde -como bien sabe-, con un ritmo mayor, y con delanteros de más calidad, salvo algunas excepciones como la del delantero del Eibar, Stoickov. Ahora mismo vamos de pobres, y habrá que hilar fino para fichar jugadores con proyección e ilusión, que se puedan adaptar al estilo de juego de la UD, de 2ª División, como algún descarte o cesión de Primera, para potenciar la plantilla. Mucha suerte al TT y ojalá fructifique ese cambio en la política deportiva que promueve su actual presidente.

Aprovecho para recordar y saludar a todos los intervinientes de aquel memorable blog, coordinado con sapiencia, sabiduría y hasta con la paciencia de Job, por nuestro gran Ibrahím, a quien, en mi humilde opinión, tanto debe este medio.

El fútbol es muchas veces complicado de explicar, y como la vida, atraviesa por ciclos, da vueltas como las norias. Acabamos de asistir al ascenso, o mejor dicho a su regreso -ya tocaba- de la UD Las Palmas a la Primera División del fútbol español, tras una primera vuelta del campeonato brillante y una segunda que ha dejado muchas dudas, sobre todo a quienes no nos consideramos resultadistas y nos centramos más en los planteamientos cuando se juegan los partidos, más allá que las plantillas, generalmente obedecen a un sistema de juego que luego habrán de interpretar los jugadores. De ahí, la forma de entenderlo. Y hasta de criticarlo.
La comparación que estableces, Luis, entre el Real Madrid y el Barcelona para semejar la forma de jugar de ambos equipos, no está muy alejada de la realidad. Claro que el TT no cuenta con Vinicius ni con Benzema, por ejemplo, ni la UD con Pedri (que lo fue de la UD), ni tampoco con Lewandowsky, aunque para ello, García Pimienta debería utilizar más las bandas. He aquí un factor diferencial con el Barça actual, y circular el balón con mayor rapidez, cuando la ocasión lo requiera.
Y decíamos que da vueltas porque ¿Cómo explicar el signo de la balanza en esta concluida temporada en ambos equipos? ¿Por la cantidad de jugadores lesionados que tuvo el TT a comienzos de temporada donde se dejó muchos puntos? ¿Por qué su jugador más técnico, Sam Shashoua, arrastrase muchas lesiones y no diera el rendimiento adecuado? ¿Por qué otro jugador clave en el medio campo como Alex Corredera, le pasara tres tantos de lo mismo, y Aitor Sanz, ya no esté para tantos trotes? ¿Por qué algunos de los fichajes no le rindieron como sucedió con Andone o Vitolo en la UD, quien llegó lesionado y se fichó como supuesto reclamo para agitar la campaña de abonados?
Dos estilos de juego bien diferentes, el uno, de jugar más en torno a la pelota, agrupar gente por dentro y buscar un desmarque de ruptura o cambiarla hacia la banda para sorprender nuevamente por dentro con la segunda línea; el otro, de esperarte atrás para atacarte el espacio con pases largos o desbordarte por las bandas para que Enric Gallego haga el resto, con la ayuda de la llegada de los mediocampistas.
La cantera del CD Tenerife, ha contado desde siempre con jugadores de la tierra valiosísimos, baste nombrar a muchos de los que conformaron el equipo que dejó a la UD en el segundo puesto de la clasificación de Primera División en los pasados años sesenta. Y más recientemente a Ayoze Pérez, a los Pedro y Pedri, y al mismísimo Alberto Moleiro a quien varios equipos punteros de 1º división le tienen en el punto de mira. Y quizá esta sea una de las claves que señalen la diferencia entre ambos equipos y el arraigo que tienen en la sociedad canaria. Tras el acceso cantado de Paulino Rivero a la presidencia del club, habló entre otras cosas, de orientar una política deportiva de mayor atención a su gran cantera, como se ha podido constatar, pero en el equipo de la isla de enfrente. Ojalá que ambos puedan encontrarse en la Primera División, para competir noblemente, así como favorecer el mayor desarrollo de la economía en ambas islas y en general en toda Canarias, en lugar de convertirse en el foco de atención de determinados políticos de horizontes estrechos e ideas trasnochadas en la noche de los tiempos, como caldo de cultivo para uso y consumo de las masas cretinizadas. Será tarea complicada, mantenerlos en la élite; los clubes son en esencia de los aficionados, pero en la práctica, empresas con dueños, nombres y apellidos. Las cláusulas de retención pasaron hace mucho tiempo a la historia. Y el vil metal, corrompe el sentimiento que conlleva la camiseta. El fútbol, no lo olvidemos, es no solo un deporte, sino un gran negocio. Amigos, saludos para todos. Y disculpas por la extensión del comentario.