Historia
En 1959 el matrimonio formado por María Eugenia Martín Concepción y Hermenegildo Martín, naturales de Gallegos, viajan a Cuba desde Venezuela para visitar a sus familia y otras amistades. Allí, y tras visitar el santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, proyectan traer para su tierra natal una imagen de la patrona del pueblo cubano. Para que esto fuera posible se realizó una colecta entre la emigración canaria, mayoritariamente galleguera y palmera, que de manera entusiasta colaboró para adquirir la imagen. La talla se compró en la calle Reina, esquina con Carlos III, cerca de la Iglesia de El Carmen, en una tienda de objetos religiosos en La Habana.
Entre junio y julio de ese mismo año, la imagen es traída a las Islas Canarias a bordo del barco Santa María, por María Eugenia y Hermenegildo.
El domingo 23 de agosto de 1959, apenas unas horas después de haber sido bendecida en el Real Santuario de Las Nieves, la Sagrada Imagen hace su entrada en el pago de Gallegos para ser recibida, con alegría y devoción, por un pueblo campesino que la llevó en procesión por los lomos de La Crucita, La Cancela, La Fuente y Los Castros.
Esa noche la Virgen no durmió en la Iglesia de la Santa Cruz. A pesar de que el templo parroquial fue fundado en 1944 sobre unos terrenos que había donado el matrimonio formado por Marcial Martín Ortega y Eugenia Concepción Hernández, padres de María Eugenia, no se terminó de edificar hasta finales de los años setenta del siglo pasado. Durante un largo periodo de tiempo la imagen permaneció custodiada por Margarita Martín Ortega en un cuarto de la casa que habitaba, propiedad de su hermano Luis Martín Ortega emigrante en Venezuela. En ese sencillo espacio tenía lugar la celebración eucarística.
En la actualidad la talla de la Santísima Virgen de la Caridad del Cobre está expuesta en el presbiterio de la nave principal de la Iglesia de la Santa Cruz.
Imagen
La escultura de la Caridad del Cobre, popularmente conocida como la Virgen del Cobre, es de escayola y no de grandes dimensiones pues todo el conjunto mide alrededor de 140 cm. La Virgen sostiene al Niño Jesús sobre su brazo izquierdo. Ambos rostros son hermosos. A su vez el Niño bendice con su mano derecha mientras sostiene con la izquierda el globo terráqueo. A los pies de la imagen hay un cielo con querubines y en la base un barco con los tres pescadores –dos indios, Juan y Rodrigo de Hoyos, y un esclavo negro, Juan Moreno-, dos remando y uno en el centro orando, quienes la encontraron flotando en aguas del Caribe, tal y como recoge el origen de la devoción.
La Virgen viste un traje dorado con dibujos florales, imitando tela de brocado y damasco, el manto es de color azul de cobalto oscuro con un remate ancho, haciendo juego con la tela del vestido, el interior del manto en un azul más claro.
Del cielo salen por los extremos dos puntas doradas que imitan a la media luna, que en otras iconografías acompañan a la Virgen, así como las dos coronas, la grande con doce estrellas como reina de cielo y tierra.
Restauraciones
Tras sufrir cierto deterioro, la escultura fue restaurada, por primera vez, en 1989 por la Licenciada en Bellas Artes María Milagros Cabrera Martín. Esta especialista llevó a cabo una restauración popular orientando la intervención y restauración hacia la conservación y procurando mantener la unidad estética de las lagunas del color por levantamiento de la pintura.
Posteriormente, en el año 2010, intervino en la restauración de la policromía el restaurador Domingo José Cabrera Benítez, colaborador del Taller de Pintura y Escultura del Cabildo Insular de La Palma, que consistió en una consolidación y asentamiento de la película pictórica y del oro, limpieza y eliminación de repintes y purpurina, estucado de las lagunas de reparación, reintegración de las pérdidas de policromía y dorado y matización de las carnaciones.
Procesión
La Virgen del Cobre sale dos veces en el año en procesión -3 de mayo, Día de la Cruz y 23 de agosto, festividad de su llegada-, como manifestación de fe y devoción, portada a hombros por los vecinos de Gallegos, que se van turnando durante un recorrido de poco más de dos kilómetros, de hora y media de duración. En el recorrido se hacen dos descansos ante las cruces centenarias que se encuentran elegantemente ataviadas en los lomos de La Fuente y Los Castros, y es donde el párroco dirige unas sentidas palabras a la feligresía. En todo el trayecto la Virgen del Cobre va acompañada por la imagen de la Santa Cruz que las mujeres cargan en andas.
Las familias, personas devotas y visitantes escoltan la imagen a lo largo del camino mientras cae la tarde templada de agosto. La cumbre, los barrancos, los acantilados costeros y el Atlántico son envueltos mágicamente por los colores cálidos del atardecer, creando un espectáculo visual sin igual. A lo largo de todo el itinerario la Virgen y la Naturaleza se funden en un abrazo constante, mientras la sonoridad del repertorio musical de la banda municipal Tabladitos llega a cada lomo de este rincón geográfico de la Isla de La Palma.
AGRADECIMIENTOS
A María Milagros Cabrera Martín, Isabel Concepción Rodríguez (Taller de Pintura y Escultura del Cabildo Insular de La Palma), Carmen Isabel Rodríguez Magdalena y Montse García Martín.
BIBLIOGRAFÍA
López, M. y Hernández, I. (2001). Nta. Sra. de la Caridad del Cobre. Gallegos, un barrio al norte de la Isla de La Palma (pp. 133-145). CajaCanarias, Ayto. de Barlovento y Excmo. Cabildo Insular de La Palma.
Carmen García Martín
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