Mitzy Capriles recaba apoyos en La Palma para la liberación de presos políticos en Venezuela

La canaria presa en Venezuela inicia una huelga de hambre para exigir su libertad

Presa Política Andrea González Inicia Huelga de Hambre

Andrea González está acusada del intento de asesinato de la hija del diputado Diosdado Cabello

La tinerfeña Andrea González de León, acusada de terrorismo junto a su pareja, Dany Abreu Abreu, por supuestamente haber participado en el intento de asesinato a la hija del diputado Diosdado Cabello, iniciará una huelga de hambre para exigir su liberación tras casi seis meses en prisión.

Así lo aseguró la hermana de la detenida, Alejandra González, que reside en San Juan de La Rambla, y quien explica que Andrea "ya no puede más". "Aún no se termina de creer todo lo que está pasando. Ya no le quedan más opciones que ponerse en huelga de hambre", reconoce González, quien añadió que, aunque su hermana ya le comunicó su intención de llevar a cabo esta protesta "aún no me ha dicho cuando la empezará".

La reivindicación de Andrea surge tras la decisión de la Justicia venezolana de llevar su caso hasta los Tribunales. "Ayer terminaron las audiencias preliminares y determinaron que la causa iba a juicio" detalla González. La hermana de la presa apunta que "estamos pendientes de conocer la fecha del mismo pero no creemos que sea pronto, ya que han tardado más de seis meses en celebrar las audiencias cambiando las fechas una y otra vez".

González considera que su hermana debía haber quedado libre "al no haber pruebas para su acusación". Y es que, hasta el momento, la única prueba que posee el Servicio de Inteligencia Nacional contra la pareja es un vídeo en el que el venezolano José Rafael Pérez Venta asegura que Andrea cuenta con imágenes en las que se puede ver el lugar exacto de la residencia de Diosdado Cabello y afirma la intención de matar a la hija.

Por: Elena Hernández
Fuente: La Provincia Diario de las Palmas

Los gobernantes venezolanos son de la escuela de los hermanos Castros, no tienen compasión de nadie y no les importa imputar a quien sea con tal de desviar la atención de los grandes males que hay en el pais que fuera de Bolívar y hoy del comunismo internacional, cuanta injusticia visible y cuanta sin saberse, Venezuela es uno de los peores países del mundo donde se puede vivir, y son muchos de nuestros hermanos que mal habitan allí.
Son crueles los que escriben que esto es política, esto que solicita la esposa de Ledezma es pedir justicia para su marido y para los muchos mas que han sido encarcelados y torturados por los amigos de Podemos, y pongan sus barbas de remojo.

Preso de conciencia en cárcel venezolana

Lleva ya dos años aislado, en una celda con poca luz de apenas 2x2mts, se dice fácil… 720 días de injusticia, humillaciones, maltratos, alejados de sus familiares, sufriendo por sus hijos, su esposa y sus padres. Por haber dicho en voz alta, lo que todo el mundo murmuraba en voz baja.

Nadie puede calcular el valor de los años de vida pasados encerrado, ni medir el tamaño de la soledad, el peso del atropello o la dimensión de la ausencia de los seres queridos. Lo que si se es que el hombre que saldrá de la celda, no será el mismo, es posible que su alma tendrá surcos producto de las situaciones vividas y la impotencia, pero “visto lo visto”, estamos seguros que saldrá engrandecido para seguir luchando por Venezuela.
Leopoldo se ha convertido en el símbolo de la resistencia, inculpado por la injusticia venezolana por los delitos de instigación a la violencia y asociación para delinquir, el Gobierno de Maduro se venga de él, por convocar una marcha pacífica en febrero de 2014 y condenado a 13 años, 9 meses, 7 días y 12 horas por la infame juez Susana Barreiros en un juicio pleno de vicios procesales, que incluyó hasta pruebas falsas, tal como lo denunció el fiscal que llevo el caso.
El valiente dirigente encarna las violaciones contra los Derechos Humanos, que el régimen ha cometido contra cientos de ciudadanos, políticos, policías, estudiantes, empresarios, columnistas, periodistas, tuiteros, campesinos, sindicalistas, defensores de derechos humanos… quienes han sido perseguidos arbitrariamente.
Hay que tener una gran dosis de cinismo, como la que habita la humanidad de Diosdado Cabello, para afirmar que en Venezuela no habrá reconciliación ni amnistía. Indignante declaración cuando se conocen las revelaciones del fiscal Franklin Nieves, quien huyó del país, después de denunciar la conspiración del gobierno de Maduro contra Leopoldo López, para acusarlo, detenerlo y condenarlo sin pruebas.
Nieves abundó en detalles antes de escaparse, señalando que sus jefes en la fiscalía le instruyeron para que ordenara la detención del líder opositor y dejó claro que fue un juicio político que debería ser anulado, porque se violaron los derechos humanos de López al negarle la presentación de testigos y las pruebas que solicitó.
Junto a él se encuentran los estudiantes Marco Coello, Christian Holdack, Demian Martín y Ángel González. Antes y después fueron entre otros: Simonovis, Vivas, Forero y los policías acusados de atentar contra la seguridad del Estado, la juez María Afiuni, los Guevara, Daniel Ceballos, alcalde de San Cristóbal y Antonio Ledezma, alcalde de Caracas.
Tantas víctimas de la justicia rojita que de la mano de especímenes como Nieves, Aponte Aponte, Velázquez, Barreiros, Sanabria u Ortega y coronados por la fiscal general, Luisa Ortega, del Defensor del Pueblo, Tarek William Saab y la nueva Sala Constitucional bolivariana, representan lo más degradante del régimen chavista.
Venezolanos inocentes a quienes esta banda de violadores de derechos humanos, les han arrancado su libertad, que han sido vejados, torturados y humillados, por el delito de aspirar y luchar por una patria mejor. Un drama humano en el que se encuentran sumidas familias enteras.
Sería injusto no recordar en estos momentos algunos de aquellos que no volverán jamás, como Franklin Brito, Antonio López Castillo, Luis Manuel Díaz, Génesis Carmona, Geraldine Moreno o el horrible crimen de Kluiverth Roa, estudiante de 14 años, quien suplicara clemencia al policía que le arrebató la vida. Nombres que denunciaran para siempre, la podredumbre que nos ha gobernado estos últimos 16 años.
Leopoldo López corre peligro, los venezolanos sabemos que aquí no existe el Estado de Derecho, los documentos y videos recién develados sobre la acusación del juicio por el homicidio de Bassil Dacosta y de Juancho Montoya, revelan las conexiones existentes entre grupos de colectivos armados promovidos por el Gobierno y funcionarios de inteligencia de la policía política, allí figuran los verdaderos ejecutores de los hechos que desencadenaron los sucesos del 12F y que culminaron con la detención de Leopoldo López. Demás está aclarar que dentro de nuestra realidad bolivariana, ninguno fue imputado ni investigado.
El gobierno teme a un Leopoldo libre y con pleno ejercicio de sus derechos civiles y políticos, por ello la persecución en su contra, antes ya lo habían inhabilitado, a través de la Contraloría y la manipulación política de la judicatura, en un vano intento de neutralizarlo como líder. Una vez más se evidencia como la justicia Bolivariana solo sirve para procurar la impunidad de los miembros del gobierno, pranes y colectivos, y para amenazar, enjuiciar, perseguir y atropellar a cualquier opositor.
Los venezolanos estamos conscientes que el socialismo del Siglo XXI se encuentra en fase terminal, lo que los hace peligrosos, saben que tendrán que rendir cuentas, buscan salvarse a como dé lugar. Es probable que prefieran destruir todo a su paso antes de renunciar, si han sido capaces de eliminar por conveniencia a sus propios compañeros, que les cuesta mentir, violar leyes y los derechos humanos, para culpar a inocentes o hacer tabla rasa antes de irse.
Es el momento para que los gobiernos del mundo presionen a Maduro y le exija garantizar la integridad física de Leopoldo López… un preso de conciencia. Tanto Amnistía Internacional como la ONU han solicitado su libertad, Presidentes y expresidentes, parlamentos, la euro-cámara, organismos de derechos humanos, premios Nobel, han expresado sus protestas por la condena del líder de Voluntad Popular.
Su condena no es más que un atropello jurídico, lo que no sorprende en un país que no tenía independencia de poderes, hasta la reciente victoria electoral de la oposición en las elecciones legislativas. Elecciones que el ejecutivo pretende desconocer a través de un Poder Judicial oficialista, nombrado de manera fraudulenta por Maduro y Diosdado.
Hay gente que nace predestinada, la lucha por la libertad de Leopoldo es la misma de todos los presos políticos, es tambien la de nosotros mismos, la de Venezuela que no merece ser convertido en el país con mayor cantidad de presos políticos, perseguidos y exiliados del mundo occidental.
Es nuestra lucha por salvaguardar lo que nos queda de democracia, una larga batalla para conseguir un cambio de modelo de país por uno eficiente, donde podamos vivir en paz, se respete la propiedad, las libertades individuales y el estado de derecho.
Es también la oportunidad para rescatar los valores propios de una sociedad civilizada, donde se acaba la impunidad, al abuso de poder, la corrupción, la manipulación de los débiles y los necesitados, los narco-soles y los narco-sobrinos, la injerencia extranjera en los asuntos del estado, las sentencias judiciales amañadas… donde los jueces sepan que si violan las leyes responderán por sus actos.
Como dignamente le dijo Leopoldo a la mujer aquella que lo condenó: “Si me condena le va a dar más miedo a usted leer la sentencia que a mi recibirla, porque usted sabe que soy inocente”.

Nelson Castellano-Hernández
Ex Cónsul de Venezuela en París
Presidente de Venezuela-Futura, Francia
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