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Los problemas del frente marítimo de Tazacorte y la búsqueda de soluciones

No podemos seguir ignorando la situación del frente marítimo de El Puerto de Tazacorte. El Barrio se encuentra en la desembocadura del barranco de las Angustias, pero debemos diferenciar entre la zona costera de playas y la zona del barranco.

En los años setenta, el Ayuntamiento construyó una poceta en la desembocadura del barranco de las Angustias para que las personas pudieran bañarse en verano. Imagínense, la playa de El Puerto era de canto rodado y dificultaba el baño. Pero una vez que se construyó el actual Muelle, la playa del Roque desapareció, la única que tenía arena en ciertas temporadas.

Se propuso la construcción de unas piscinas en una parcela del frente marítimo, que anteriormente había sido utilizada como campo de fútbol, asentamiento de chabolas y espacio logístico para la construcción de los muelles. En 1993, se iniciaron obras en el frente marítimo debido a los problemas que presentaba el muelle con la acumulación de áridos en su bocana. Se construyó un espigón al norte de la desembocadura del barranco de las Angustias para almacenar la arena extraída de la bocana del muelle y se construyó otro espigón en el actual muelle orientado al oeste para evitar futuras acumulaciones de áridos.

En 1996, el Ayuntamiento encargó un proyecto para el frente marítimo que incluía la construcción de un paseo, mejoras en las piscinas y refuerzo del espigón del antiguo muelle de La Punta de Juan Graje. En 1998, la Dirección General de Costas anunció la licitación de las obras. Con la construcción del paseo, se aportó más arena de la playa de los Tarajales a la playa del frente de las piscinas.

Gracias a las diferentes obras realizadas a lo largo de los 1.150 metros de litoral, se han ganado 65.300 m² de playas de arena. Cabe destacar que, en cuatro ocasiones, se ha extraído arena de la playa de los Tarajales para otras playas de la isla, dos veces para la playa de Los Cancajos, una para Puerto Naos y otra para Puerto Espíndola.

En 2006, la Dirección de Costas encargó un proyecto para las zonas de las piscinas, que incluía la construcción de un paseo en forma de medialuna, un aparcamiento subterráneo, piscinas de spa y una gran plaza con sombras para eventos. Pero, lamentablemente, este proyecto nunca se llevó a cabo. No podemos seguir esperando, es hora de actuar y hacer realidad este proyecto para mejorar nuestro frente marítimo.

En el año 2018, el Ayuntamiento dejó en manos del Cabildo la redacción de un nuevo proyecto para el frente marítimo. La intención era financiarlo con fondos del FDCAN. Sin embargo, cuando asumimos el gobierno en junio de 2019, nos dimos cuenta de que el proyecto aún no estaba terminado. Después de varios intentos, finalmente lo recibimos tres meses más tarde. Durante ese tiempo, nos pusimos en contacto con el director de Costas en Tenerife y utilizamos como referencia el proyecto del año 2006 para llegar a acuerdos. Sin embargo, el Cabildo decidió imponer su propio proyecto de manera arbitraria, sin tener en cuenta al Ayuntamiento. Este proyecto consistía en la demolición del paseo, las piscinas y la retracción de la playa en 50 metros.

Después de estos acontecimientos, mantuvimos conversaciones con el presidente del Cabildo, Mariano Zapata. Le dejamos claro que estábamos dispuestos a llegar a un acuerdo, pero no a ceder en la retracción de 50 metros. Además, insistimos en que hay que diferenciar entre la zona costera y la zona del barranco, ya que no tiene sentido ampliar la playa en 11.000 m² en una zona que nunca lo fue.

Además de negociar con Costas, encargamos diversos estudios y proyectos para garantizar la seguridad y utilidad del frente marítimo de El Puerto de Tazacorte. Uno de ellos fue una propuesta de defensa del frente marítimo y costero de la playa del Puerto, que consiste en la ampliación de los diques del barranco y el muelle viejo, apoyados en un dique sumergido. También se realizó un estudio sobre la posibilidad de instalar una planta de energía undimotriz en el dique del muelle viejo.

Incluso los geógrafos de la ULPGC proponen una solución para renaturalizar la playa de Tazacorte, derribando el paseo y permitiendo que la playa vuelva a ser de callados en ciertas zonas. Esto no solo sería más económico, sino que también garantizaría la seguridad de la zona en caso de subida del nivel del mar debido al cambio climático. Otros países, como Holanda, sin embargo, toman medidas para ampliar los diques y generar energías limpias

Nos atrevemos a decir que existen soluciones alternativas que no implican la retracción del paseo en 50 metros y la ampliación de la playa en zonas que nunca lo fueron. Un ejemplo de ello es lo que se hizo en Santa Cruz de La Palma, donde se creó una playa de arena en una zona que antes era una escombrera y se reforzaron los diques para garantizar la seguridad del malecón y el paseo marítimo.

Es importante tener en cuenta que cada obra marítima es única y lo que funciona en un lugar puede no ser adecuado para otro. Por eso, creemos que, con la ampliación de los diques actuales, la aportación de más arena y la construcción de un dique sumergido, se mejorará la estabilización de la playa y se garantizará su seguridad. No hay que limitarse a una única solución, sino explorar todas las opciones para encontrar la mejor para nuestro municipio.

 

*Juan Miguel Rodríguez Acosta es portavoz de Nueva Canarias en el Ayuntamiento de Tazacorte.

 

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