La Guardia Civil investiga a dos personas que fueron pilladas infraganti realizando pesca furtiva en la costa de Fuencaliente

Agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Destacamento de Protección de la Naturaleza de la Caldera de Taburiente, investigan a dos varones de 31 y 39 años, acusados de delitos contra la fauna.

El Servicio de Inspección Pesquera del Gobierno de Canarias alertó a los Agentes de la Guardia Civil, sobre la presencia de una embarcación neumática sospechosa de estar realizando actividades de pesca ilegal en la costa de Fuencaliente, concretamente en la zona marítima frente a la Playa del Río.

A bordo de la embarcación recreativa se encontraban dos personas que estaban pescando de forma furtiva, utilizando técnicas de pesca submarina y marisqueo en una zona no autorizada. 

La actuación conjunta permitió establecer un dispositivo de vigilancia terrestre y aérea, con apoyo de un DRON, para seguir los movimientos de los sospechosos y documentar gráficamente las presuntas infracciones.

Finalmente, las dos personas fueron interceptadas cuando transportaban la embarcación en un vehículo todoterreno. En el interior del vehículo se hallaron casi 25 kilogramos de pulpos y 5 kilogramos de lapas, junto con equipos de pesca submarina y marisqueo, utilizados para la captura ilegal de las especies.

Los acusados no cuentan con licencia de pesca recreativa y tampoco para la práctica del marisqueo.

La zona en la que se realizaron las capturas, no está habilitada para la pesca submarina, según lo establecido en la orden de 22 de febrero de 1988. Además, la recolección de lapas se encuentra actualmente prohibida por encontrarse en periodo de veda, para proteger el ciclo reproductivo de estas especies. 

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— elapuron.com (@elapuron) April 18, 2025

Los hechos podrían constituir infracción penal por delitos contra la fauna, recogido en el artículo 335 del Código Penal con la pena de multa de ocho a doce meses, inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de cazar o pescar por tiempo de dos a cinco años y privación del derecho para la tenencia y porte de armas por el mismo periodo y con la pena de multa de cuatro a ocho meses e inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de cazar, pescar o realizar actividades de marisqueo por tiempo de uno a tres años y privación del derecho para la tenencia y porte de armas por el mismo periodo, además de las correspondientes infracciones administrativas. 

Las diligencias instruidas han sido remitidas al Juzgado Decano de Los Llanos de Aridane.