La ya ex concejal del PP y ahora concejal no adscrita en el Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma, Alicia García, manifestó ayer, tras concluir el pleno en el que se tomó conocimiento de su pase al grupo de no adscritos, que se siente "defraudada" con el Partido Popular porque "a mí no me han suspendido cautelarmente de militancia como se ha dicho, a mí ya me han expulsado y no me han dejado defenderme".
La expulsión, según informó, se produjo a mediados de septiembre debido a las desavenencias que ha mantenido con el grupo municipal, y especialmente con Juan José Cabrera Guelmes, después de la ruptura del pacto de gobierno con CC, decisión que ella desaprobó y a partir de la cual empezó a desmarcarse de la línea oficial del partido y a hacer comentarios en facebook que, según ella, no han gustado y que también han sido utilizados como argumento para echarla. Sin embargo, pese a este distanciamiento, Alicia García, se siente dolida por su expulsión porque "han sido quince años trabajando sin pedir nada a cambio cuando aquí hay concejales que han llegado y querían un despacho. Mi despacho ha sido el maletero de mi coche durante quince años. Nunca he pedido nada, así que no me lo explico", dijo.
Alicía García defendió su actuación durante esta legislatura y dijo que en todo momento ha sido fiel "al PP que yo conocía, no a las personas de ahora y al partido de ahora" y explicó que si votó diferente a su grupo en un pleno (lo cierto es que fue más de uno) es porque tenía razones de peso para ello "como ya lo explique en su día".
La concejal negó que el PP le haya solicitado que devuelva el acta pero que tampoco tiene intención de hacerlo porque "yo tengo un compromiso con los ciudadanos y esos votos son míos, así que no la entrego porque no veo ningún motivo". "Yo seguiré luchando por Santa Cruz de La Palma hasta que acabe la legislatura porque ese es mi compromiso".
De cara al futuro, no tiene claro si va a continuar en política o no porque "llevo quince años en el ayuntamiento y estoy un poco cansada". Pero dejó caer que ya le han hecho algún ofrecimiento aunque "no quiso decir de quién". "De momento lo he dejado pasar porque he estado centrada en otras cosas y en resolver mi situación con el partido", explicó. Una relación que ha acabado mal, tanto es así que en el pleno de ayer jueves ni ella le dirigió la palabra a sus antiguos compañeros porque, espetó, "yo no saludo a quien me ha dado la puñalada", ni ellos tampoco la saludaron.
Con el pase de Alicia García al grupo de no adscritos, el PP se queda con cuatro concejales. A partir ahora la concejal, en su condición de no adscrita, podrá participar con voz y voto en las Comisiones de Urbanismo y Hacienda, que fueron las que ella solicitó, y en el resto podrá estar presente aunque no podrá votar.
