La presidenta promete cambios en la política turística que el PP califica como “desastrosa”

Pese a que el grupo de Gobierno del Cabildo, integrado por CC y PSOE, rechazó este viernes en un pleno extraordinario una moción del PP en la que consideraba desastrosa la gestión turística insular y pedía un cambio de rumbo en la misma, la presidenta, Guadalupe González Taño, reconoció que hay cosas que no están funcionando y que se corregirán para que den mejores resultados porque el turismo es una prioridad y un sector económico muy importante para la Isla.

El consejero popular Raúl Camacho criticó en su intervención al sinrazón de la gestión política del área turística en la que "no se nos ha tendido ninguna mano" pese a las propuestas reiteradas de trabajar de forma consensuada. Camacho no quiso entrar en los datos de la llegadas de turistas pero sí advirtió de que el descenso de visitantes supone la destrucción de empleos en la Isla al tiempo que mostró su preocupación porque nada se sabe de las previsiones para el próximo invierno, también se refirió a las cancelaciones continuadas de nuevos mercados haciendo especial referencia a los vuelos de Polonia cancelados y que estaban previstos para este mes de junio, la nula promoción en la Península y en Canarias, la pérdida día a día de la conectividad, o mercados principales en total abandono como el alemán o el inglés, que está haciendo que la entrada de pasajeros en algunos casos se sitúe en niveles por debajo del año 99.

Los planes fantasmas o un Patronato de Turismo que no cumple su función, también fueron objeto de las criticas de Raúl Camacho, que habló de una gestión desacertada y con muchas dudas. "No podemos permanecer impasibles, la Isla requiere de nuevos impulsos, nuevas ideas, nuevas iniciativas, la definición de un modelo innovador porque aliviar la conciencia con el temido recurso a la situación de crisis que vivimos es mala coartada y el peor ejemplo para un responsable político que no advierte y corrige lo evidente".

La presidenta, por su parte, le reconoció que hay algunas cuestiones que se tienen que replantear porque no están dando el resultado esperado y dijo que por eso todas las políticas deben estar en constante evolución. "Vamos a proceder a una evaluación de las políticas turísticas del Cabildo para modificar las que no estén dando buenos resultados", y anunció además que van a solicitar la implicación formal y económica del Gobierno de Canarias y que al ministro de Turismo le van a plantear también los retos turísticos de la Isla para contar con su apoyo. En cuanto al vuelo con Polonia, la presidenta indicó que el presidente de la compañía quiere tener vuelos con La Palma y que el Cabildo lo apoya porque "si un touroperador está interesado en la Isla no lo vamos a decir que no". Según dijo, la compañía espera mantener el resto de vuelos programados pese a las dificultades para vender los primeros.

Raúl Camacho agradeció lo que calificó como "un cambio de actitud" de la presidenta porque "llevamos dos años de promesas incumplidas y "esperamos que ahora sea de verdad", pero eso sí indicando que la gota que ha colmado el vaso fue la última reunión de la Permanente, donde se votaron convenios sin entregar la documentación correspondiente. Dejando claro que si votaron en contra fue por eso, algo que la presidenta reconoció que no estuvo bien, que fue un error por el que se pidió disculpas. "Por eso digo que hay cosas mejorables y vamos a trabajar para cambiarlas", indicó la presidenta.

En la moción rechazada, además de mostrar su total desacuerdo con la gestión política del área turística insular, el PP planteaba la necesidad de lograr un consenso permanente sobre las acciones que se pretendan ejecutar, revisar todas las acciones que se hayan podido ejecutar evaluando su mayor, menor o nula eficacia, marcar una nueva hoja de ruta en torno a un modelo turístico y de promoción de la Isla definido por los mejores profesionales, proceder al examen y análisis, cada treinta días, del devenir turístico valorando la situación y las medidas a adoptar, y establecer de manera inmediata una campaña intensa en Canarias y Península con una dotación económica adecuada a la importancia que se le debe dar a la misma porque "aunque consideremos que es tarde, el intento debe ser obligado y necesario". El Gobierno rechazó la propuesta por el punto primero, que el PP se negó a suprimir.

El consejero de Turismo no estuvo en el pleno por motivos de salud.