Los bomberos estallan y afirman que nunca antes habían sentido tanto "desapego y falta de interés" por parte del Cabildo

Los miembros de la Asociación de Bomberos Voluntarios Emerpal, integrantes de la plantilla del Servicio Insular Contra Incendios y Salvamento Urbano de La Palma (Bomberos La Palma), han emitido un duro comunicado para dar a conocer la realidad de su situación ante “la falta de compromiso firme por parte del Cabildo Insular de dotarlos de los medios mínimos necesarios para poder ofrecer la seguridad que los ciudadanos se merecen”, y con el que, dicen, “nos reafirmarnos en lo que ya dijimos en nuestro escrito en registro de entrada del 6/3/2016 respecto a que nunca, en todos los años que llevamos cubriendo el Servicio Insular Contra Incendios y Salvamento Urbano de la Isla de La Palma, habíamos sentido este desapego y falta de interés por parte del equipo dirigente del Cabildo”.

Además, indican que “si en un breve periodo de tiempo no se nos cita para buscar soluciones, continuaremos con otro tipo de acciones ante diferentes escenarios”. Hace unos días comunicaban a través de Facebook que solo iban a acudir a los servicios de “extrema necesidad” porque que se habían visto obligados a restringir el consumo de combustible por motivos económicos.

Asimismo han querido detallar las carencias más significativas que padecen pese a prestar un servicio fundamental para la sociedad. Esas carencias son las siguientes:

Parque Móvil: Una flota de vehículos muy envejecida, la mayoría son de los años 1994-95 y el último vehículo que compró el Cabildo para el servicio de bomberos fue en el año 2002.

Falta de 1 vehículo de trabajos en altura, de al menos 30 metros, tanto para extinción como para salvamento de personas que puedan quedar atrapadas en pisos superiores. El brazo articulado que teníamos nos lo había donado el Ayto. de Santa Cruz de Tenerife en el año 2002, y lo mantuvimos en servicio hasta el año 2015. Hubo que darle de baja porque a causa de su antigüedad ya no se encontraban repuestos en el mercado.

El Furgón de Rescate Sub-acuático del Parque de Los Sauces, está de baja temporal desde hace 2 meses por no pasar la revisión de la ITV.

La Bomba Urbana Pesada (B-113) del Parque La Grama, tiene la bomba averiada.

La Bomba Rural Ligera (B-121) del Parque Laguna está de baja porque le cayó un desprendimiento encima, en el incendio forestal del pasado mes de agosto de 2016 y tampoco hay fondos para su reparación.

Vestuario: Renovación del E.P.I. de intervención en incendios urbanos para 1/3 de la plantilla (Chaquetón, cubre pantalón. Verdugo, botas y guantes).

Material de Extinción: Estamos bajo mínimos. Las últimas mangueras se compraron hace 8 años, lo que hace una media de antigüedad de 12 años, al igual que pasa con las lanzas, bifurcadores, reducciones, etc.

Equipos de intervención en accidentes de tráfico: Motor, cizalla, separador, cilindro. El último se compró hace 7 años. Los demás tienen más de 16 años de uso.

Además de todo lo expuesto, también indican que están precarios en equipos de comunicación, iluminación, cámara térmica, detector de gases, alarma personal, etc.

Edificios: Puerta cocheras La Grama (3 años averiada), colchones con 12 años, cocina, etc.

Respecto al presupuesto, recuerdan que el Cuerpo de Bomberos Voluntarios se fundó en Santa Cruz de La Palma en el año 1990 y “dependíamos de la ayuda del Ayuntamiento. En el año 1995 se crea el Servicio Insular y pasamos a depender del Cabildo. En ese mismo año se aprueban unos presupuestos repartidos en diferentes partidas (Edificios, Parque Móvil, Combustibles, Material de Extinción y Salvamento, Vestuario, Transmisiones, Formación), todas gestionadas por el Cabildo, y luego otra partida titulada “Gastos de Funcionamiento” que era a la que se nos transfería todos los meses y que gestionábamos nosotros para gastos de personal, seguridad social, seguros de accidentes, y otros pequeños gastos”.

“Esto fue así, indican, hasta el año 2013 que el Cabildo decide, de manera unilateral, unificar todas estas partidas y pasarlas a “Gastos de Mantenimiento”, y que seamos nosotros los que gestionemos todos los gastos del Servicio, dándose la circunstancia de que la cantidad total de esta partida es bastante inferior a la suma de todas las partidas de años anteriores”.

Los bomberos mostraron su rechazo total a este sistema y “entonces acordamos hacer una prueba, y si el costo real del Servicio era mayor, que entregáramos las facturas justificativas y se nos abonaría la diferencia”.

El resultado de todo esto es que “aún estamos esperando a que se nos abonen esas diferencias anuales entre las cantidades que se nos han abonado y los gastos reales del Servicio, de los años 2013, 2014, 2015, 2016, y lo que llevamos de 2017”.

Así las cosas, indican que “que hemos tenido que pedir un préstamo de 40.000,00 euros, más una póliza de 20.000,00 euros, más otros préstamos de personas particulares, el último de 10.000,00 euros que nos hicieron el pasado mes para evitar devolver el recibo de la seguridad social, que fue de 11.031,61 euros, que en caso de no pagarlo ese día tendríamos un recargo del 20% como ya nos ha pasado en algunas ocasiones”.

“Pensamos -dicen desde la asociación- que todo lo expuesto son motivos más que suficientes para hacer pública esta situación, ya que llevamos casi 2 años solicitando sentarnos con las personas que tengan poder de decisión y buscar la mejor solución, y la realidad es que sólo hemos recibido bonitas palabras, promesas incumplidas, y ver cómo intentan sacarse las culpas pasándose la pelota unos a otros”.

Por último, solicitan al presidente del Cabildo de La Palma que “nos cite a la mayor brevedad posible, junto con los técnicos que tengan relación con nuestra situación, para entre todos buscar la mejor solución a este problema que consideramos muy grave, tanto para los habitantes de nuestra isla, como para los que nos visitan”.