El Cabildo Insular de La Palma, a través de la Consejería de Asuntos Sociales ha otorgado a la Asociación AFA La Palma el premio Obispo Bernardo Álvarez por su labor durante 14 años con los familiares de enfermos de alzheimer y otras demencias en La Palma.
La consejera de Asuntos Sociales, Jovita Monterrey, ha destacado que "con este premio queremos reconocer a AFA La Palma su labor relevante y destacada en pro de los afectados por el alzheimer y otras demencias y cuyo proyecto pretende mejorar su calidad de vida y la de su familia".
El Concurso a la Solidaridad Obispo Bernardo Álvarez, es un certamen que busca premiar a la entidad benéfico-social que trabaje a favor de los sectores más necesitados de nuestra Isla para satisfacer las carencias básicas de las persona y de las familias mediante acciones sociales, culturales, económicas, técnicas o de defensa de derechos humanos.
Este año se han presentado cuatro organizaciones y entidades sin ánimo de lucro que realizan su labor con espíritu altruista o que trabajan en la sensibilización de sus habitantes a favor de un aumento del sentimiento solidario de nuestra gente.
La finalidad de AFA La Palma, que cuenta con 126 personas asociadas, es mejorar la calidad de vida del colectivo afectado por algún tipo de demencia en la Isla, a través de la atención especializada ofrecida desde sus servicios, que cubren tanto las necesidades de las personas diagnosticadas con alzheimer o algún tipo de demencia, como de sus familiares y cuidadores, además de las acciones a desarrollar tanto a nivel de política social (insular y municipal) y política sanitaria que de forma integral beneficie al total del colectivo afectado.
Esta asociación se fundó en 1999 ante el sentimiento de abandono de las familias que convivían con una persona afectada por demencia y con el transcurso de los años la entidad modifica su ámbito, pasando a ser insular, y a la modificación de su nombre, como Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer y otras Demencias de La Palma.
Batu
No entiendo cómo una institución pública puede llevar el nombre de un premio el de un obispo.
Si el dinero al menos lo diese la iglesia o el mencionado obispo estuviese a la altura de la madre Teresa de Calcuta, yo y algunos más lo entenderíamos!!!
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