La mujer asesinada en Tenerife acudió el año pasado al Hospital General de La Palma con lesiones que atribuyó a su pareja

La mujer que fue asesinada ayer en Ofra, Tenerife, presuntamente por su sobrino y pareja acudió el 8 de julio del año pasado al Hospital General de La Palma a recibir asistencia médica por unas lesiones que le había causado su pareja, si bien no quiso presentar denuncia ante la Guardia Civil, según ha informado hoy la Delegación del Gobierno. No se ha podido confirmar ningún otro tipo de relación con la Isla Bonita, solo que acudió al hospital donde le dijo a una doctora que las lesiones que presentaba se las había causado su pareja, se avisó al 1-1-2 y acudió la Guardia Civil pero no quiso presentar denuncia.

La delegada del Gobierno en Canarias, Elena Máñez, no ha duado en afirmar este mediodía que hay indicios suficientes para considerar que Rosa María Concepción Hernández, de 60 años, fue asesinada por su sobrino y pareja sentimental, un hombre de 58 años.

Fue ayer domingo, 3 de febrero, cuando se encontró el cadáver de Rosa María Concepción Hernández en una vivienda del barrio de Ofra, en Santa Cruz de Tenerife. Posteriormente se procedió a la detención de un hombre de 58 años de edad que mantenía una relación sentimental con la víctima y con el que además le unía una relación de tía y sobrino. Por esa última relación de parentesco consta en el año 2014 una denuncia por violencia doméstica y a él se le impusieron medidas como una orden de alejamiento hasta 2015 y prohición de portar armas hasta 2017. Este hecho se registró entonces como violencia doméstica porque no se tuvo constancia de que había un vínculo emocional de otro tipo más allá del familiar y de convivencia. En una segunda ocasión, el 8 de julio del pasado año, la víctima le dijo a una doctora en el hospital de La Palma que las lesiones que presentaba se las había provocado su pareja pero ella no quiso presentar denuncia. La Investigación sigue en curso.

En el día de hoy se ha guardado un minuto de silencio en las sedes de la Delegación del Gobierno en Canarias, Subdelegación en Santa Cruz de Tenerife y Direcciones Insulares, por la “última víctima de violencia de género en Santa Cruz de Tenerife”, como así decía la convocatoria remitida a los medios.