Carlos Camacho y Pereda de Castro, en la Avenida de El Emigrante, donde se exponen algunas de las esculturas del artista.
El pasado fin de semana fue inaugurada la exposición itinerante de Escultura Urbana, que cuenta con numerosas obras realizadas por el escultor Pereda de Castro, y que bajo el título Itinerartciones se exponen en la Avenida El Emigrante del Puerto de Tazacorte.
Su creador, Pereda de Castro, lleva desde el 2008 mostrándose en diferentes ciudades de la geografía nacional. Iniciando su andadura en casa de Vacas, espacio museístico del Parque del Retiro (Madrid); para continuar en el Parque Las Salinas, Fundación Gabarrón (Medina del Campo); en los Jardines de Piquío (Santander); Ayuntamiento de la Villa de Noja y en la Rivera del Ebro (Reinosa); etc. Y de vuelta en los municipios de Los Llanos de Aridane, Tijarafe, Fuencaliente, Breña Baja y Puntagorda.
La exposición fue presentada por el escultor, junto con el primer teniente de alcalde y concejal de Cultura, Empleo y Desarrollo Local, Carlos Camacho Acosta, para quien "es una oportunidad única de poder disfrutar de auténticas maravillas en el mejor entorno".
El propósito de esta muestra, explicó el Pereda de Castro, es integrar el sentimiento artístico mediante la expresión abstracta con los espacios públicos, acercando de esta manera el arte a la calle y a sus gentes. La obra está realizada en acero cortén patinado al óxido y acero pintado con pintura industrial.
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Estuve discutiendo con una señora que me aseguraba que esas esculturas llevan ahí varios años y lo que hicieron fue pintarlas, yo diciéndole que no, que a mí me parece que hace un par de meses no estaban allí, la señora me contesta, "vienes tú a decirme a mí que esas esculturas no lleva ahí varios años, cuando yo estoy cansada de verlas ahí desde hace varios años".
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No me gusta nada a la altura que están algunos filos cortantes de las esculturas, por si no se han dado cuenta las autoridades. Como alguien vaya paseando distraído o, peor aún, corriendo (un niño, por ejemplo) se puede abrir la cabeza, sacar un ojo o cortar el cuello. Y no es exageración. Pasen por allí y compruébenlo.
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