El Cabildo Insular de La Palma pondrá en marcha en el mes de agosto la décima edición del programa Verano sin barreras con el que se propicia la integración social, los beneficios de las terapias rehabilitadoras y el acercamiento y disfrute del mar a las personas con discapacidad; y, paralelamente, se ofrece la oportunidad de respiro a los familiares cuidadores, transformando la playa en un espacio adaptado que contará con un equipo de profesionales responsables de prestar una atención individualizada.
El programa está dirigido a personas con discapacidad mayores de 21 años, que presentan situaciones que exigen una atención de alto requerimiento en el domicilio y la presencia de un familiar cuidador para la realización de las actividades de la vida diaria, y cuyas dificultades de movilidad le limitan el acceso a la playa por sus propios medios.
La consejera insular Ángeles Fernández pone en valor “un servicio que apuesta por la integración social en igualdad de las personas con discapacidad de nuestra isla, ofreciéndoles la oportunidad de disfrutar de un verano con cuidados y servicios de rehabilitación junto al mar, a la vez que se permite el descanso de sus familias y cuidadores habituales”.
El ámbito de la actividad es insular. Se ofertan un total de 26 plazas cada día, distribuidas entre la playa de Bajamar, en el municipio de Breña Alta y en la playa de Puerto Naos, en Los Llanos de Aridane. El programa se llevará a cabo de lunes a viernes en horario de 9:00 a 13:00 horas durante el mes de agosto.
Verano sin barreras es un programa del Área de Servicios Sociales del Cabildo Insular de La Palma gestionado por Cruz Roja Española. Para su desarrollo se cuenta con la colaboración de los ayuntamientos de ambos municipios, que permiten la utilización de las instalaciones en el litoral, así como con los servicios de socorristas de cada playa, además de con el permiso del Servicio Provincial de Costas, que autoriza la realización de las actividades en ambas zonas de playa.
Los profesionales con los que se cuenta en cada playa son: 4 monitores de ocio y tiempo libre, un fisioterapeuta y un enfermero, además de con un coordinador que supervisa el desarrollo del programa. Las actividades son básicamente lúdicas, tanto en la zona de arena como en el mar, donde se centran en el acceso al mismo con silla anfibia. Por último, también se oferta transporte adaptado que facilita el acceso de los usuarios desde sus domicilios.
Las personas interesadas en tomar parte en Verano sin barreras pueden hacerlo descargando el formulario disponible en la página web del Cabildo y presentándolo en cualquiera de los registros de la institución antes del 19 de julio
