En cifras, al menos el 25 % de los internos de las cárceles españolas padece una enfermedad mental. Los datos oficiales indican que, de media, el 46% de los ingresos en las enfermerías de los centros penitenciarios están motivados por una patología psiquiátrica. Los estudios muestran que la prevalencia de padecer un problema de salud mental en la población reclusa es de un 45,9 %.
En este contexto, la Asociación Salud Mental La Palma retomará la atención en el Centro Penitenciario de Santa Cruz de La Palma en el mes de enero próximo con la presencia de una trabajadora social que acudirá dos días a la semana.
El objetivo de este servicio es reducir los factores de riesgo asociados a las enfermedades mentales y favorecer los factores protectores de estos trastornos en personas ingresadas en prisión; además de potenciar la capacidad de las personas para responsabilizarse de su salud y apoyarles para que sean capaces de desarrollar las habilidades individuales protectoras de la salud mental y evitar los factores de riesgo de padecer trastornos mentales en prisión.
