Machín defiende que su vacunación no fue fruto de una demanda personal sino de una decisión estrictamente sanitaria

La consejera de Sanidad, Susana Machín, ha manifestado hoy que su vacunación en el grupo del Hospital Nuestra Señora de Dolores no fue fruto de una demanda personal y que “en ningún caso he pretendido colarme, como se ha calificado mi conducta”. “Fue, dijo, una decisión estrictamente sanitaria, que nace del responsable de los servicios médicos del Hospital de Dolores y que fue comunicada y aceptada por al Servicio Canario de Salud, por tanto, por los responsables de la vacunación”. En este sentido añadió  que “de no haber sido así, no se me habría puesto la vacuna”.

Machín, que compareció por primera vez ante los medios acompañada del vicepresidente del Cabildo y portavoz del grupo socialista tras la polémica surgida con su vacunación, recordó que se vacunó al conjunto de las personas que realizan su labor en el hospital y que “no son personal sanitario o sociosanitario” como “los trabajadores de peluquería, seguridad, mantenimiento, administrativo”. Según indicó, fue una decisión adoptada “pensando siempre en el bien de nuestros pacientes y que se trasladó al personal del Servicio Canario de Salud que se desplazó al centro para poner las vacunas, como también ha aclarado el responsable médico de Dolores en su informe”.

La consejera subrayó que su vacunación, “como ha explicado el director médico en su informe, no contraviene la Estrategia de Vacunación frente al Covid-19” y recordó que desarrolla la mayor parte de su labor como consejera en las instalaciones del Hospital de Dolores. “Es mi principal centro de trabajo, donde más horas a la semana paso, solo interrumpido por las reuniones, comisiones o plenos que se celebran en la sede principal del Cabildo, o las gestiones en los departamentos de Educación y Artesanía, que realizo en la sede de la Casa Rosada. En el Hospital de Dolores interactúo a diario con su personal, pacientes y también familiares, manteniendo siempre, como el conjunto de los trabajadores del centro y de forma estricta, los protocolos de seguridad contra la Covid-19.”

Una presencia el hospital que dijo haber incrementado desde que se declaró la pandemia “por responsabilidad ante la difícil situación que estamos viviendo y que gracias al enorme trabajo del equipo de profesionales que conforma esta casa, que es todo un símbolo de la atención sociosanitaria en La Palma, se ha logrado mantener libre del coronavirus”. “Creo que el esfuerzo colectivo que se ha realizado por parte de todo el personal que trabaja en el Hospital de Dolores, por responsabilidad y porque así lo ha prescrito el facultativo del centro, se debía mantener también en el proceso de vacunación por la salud de nuestros pacientes. Vacunar a todos los que trabajamos en el Hospital de Dolores no ha sido un privilegio sino un acto de responsabilidad hacia los pacientes”.

La consejera subrayó que “ha sido un proceso que se ha llevado con absoluta transparencia” y que no se ha querido ocultar ningún extremo. “El hecho de que mi nombre no haya aparecido en el listado del Servicio Canario de Salud no responde a un afán de encubrir ninguna acción, sino a que finalmente pertenecía a una relación que se incluyó tras el listado inicial que se pasó a la Consejería, en la que faltaba personal que se estimó que debía también vacunarse por las razones antes expresadas”.

“Lamento profundamente, dijo, la polémica que se ha formado en torno a mi vacunación” y que “mi inclusión en este proceso haya podido ser interpretado como un privilegio por mi condición de consejera. Lejos de ese extremo, la decisión del Hospital de Dolores ha sido adoptada con la única intención de fortalecer aún más la protección y el cuidado de nuestros pacientes. Esa es nuestra finalidad y al servicio de ellos seguiremos trabajando”.

Machín también consideró “injusto” que “se hayan obviado los criterios médicos y sanitarios expuestos en sendos informes realizados desde el Hospital de Dolores, en los que “se justificaba con absoluta claridad que el proceso se realizó siguiendo estrictamente la Estrategia de Vacunación Nacional. No compartimos que se haya incumplido el protocolo con mi vacunación como sostiene el Servicio Canario de Salud, que fue quien autorizó, reitero, que se me vacunara, y vamos a defender la legitimidad del proceso de vacunación que se llevó a cabo en Dolores donde sea preciso”.

En este sentido reiteró que no va a presentar su dimisión como responsable del área de Sanidad en el Cabildo de La Palma y que defenderá también ante su partido, el PSOE, la “legitimidad de este proceso de vacunación. Soy y me siento socialista y el PSOE es el partido donde están reflejados  mis valores, los que he defendido y promovido en cada una de las tareas que he desempeñado como cargo público y seguiré haciéndolo”.