El día ha amanecido en la isla bonita sin novedades en el volcán, que mantiene su fuerza y que durante la noche registró una intensa actividad, con un gran aporte de lava que hizo que las coladas se “desparramaran” al menos inicialmente, según apuntó Involcan. De momento, el frente de la colada que avanza hacia al mar aún no ha alcanzado el acantilado de Tazacorte, se encuentra a unos 150 metros, y no se descartan nuevos confinamientos de los barrios más cercanos por seguridad.
El director del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, explicó ayer que cuando la lava entre en contacto con el agua del mar se producirán pequeñas explosiones y desprendimientos de ácido clorhídrico, por lo que antes de que esto ocurra se aplicarán medidas de protección civil, como puede ser el confinamiento de los vecinos de la zona.
Los seísmos asociados a la erupción continuaron durante la noche, siendo el de mayor magnitud el de 4.6 localizado a las 23:57:36, hora canaria, y a 36 km de profundidad en Mazo (SW Villa de Mazo) con intensidad IV. Unos temblores, localizados en Mazo y Fuencaliente, que pese a que los científicos afirman que son normales en el proceso eruptivo en marcha generan preocupación en los ciudadanos, que al miedo suman ya el cansancio de tantos días de erupción, mañana martes se cumple un mes, que no dejan descansar a los vecinos afectados por la emergencia (El Paso, Los Llanos y Tazacorte) ni al resto de la isla. Un volcán “urbano”, o monstruo negro para muchos, que en 29 días de erupción deja de momento 7.000 evacuados, más de 700 hectáreas afectadas por la lava y más de 1.800 edificaciones/construcciones destruidas.
Más información
Últimas noticias
Lo último en blogs