El volcán manda y contra este fenómeno de la naturaleza no se puede hacer nada salvo esperar que se pare cuanto antes para que no siga provocando más dolor y desolación. Precisamente para que cese su actividad que tanta devastación está dejando en la isla bonita, mañana martes, justo cuando se cumple un mes del inicio de la erupción, el obispo de la diócesis Nivariense, Bernardo Álvarez, volverá a La Palma para desarrollar distintos encuentros, entre ellos con el voluntariado y los profesionales de Cáritas que trabajan en esta emergencia, así como con el clero de las distintas comunidades parroquiales.
Además, se ha convocado a los fieles a las 18.30 horas para la celebración de una rogativa en distintos santuarios, concretamente en los de las Nieves, las Angustias y el Pino.
El prelado presidirá la eucaristía que tendrá lugar en el santuario insular de la virgen de Las Nieves. En las iglesias habrá misas seguidas de una procesión alrededor de los templos con las imágenes marianas respectivas y con el rezo del Santo Rosario.
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Y por qué no las sacaron inmediatamente después de la erupción? Nos hubiéramos evitado tantas desgracias.
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