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400 palmeros perdieron la vida como consecuencia de la Guerra Civil

  • Alfredo Mederos presenta su nueva obra sobre esta etapa de la historia

Presentación del nuevo libro de Alfredo Mederos.

400 palmeros perdieron la vida como consecuencia de la Guerra Civil. Una cifra global que el investigador Alfredo Mederos ha sacado a la luz en su última obra, Víctimas de la guerra y de la represión franquista en La Palma, que el historiador Salvador González Vázquez, en la presentación celebrada en la Casa Salazar este jueves, señaló que podría tener como subtítulo "historia del sufrimiento".

"El levantamiento de julio 1936 abrió una Caja de Pandora, de la que salió sufrimiento, miedo, dolor y mucha hambre", señaló González Vázquez. Una realidad que muchas veces cae en el olvido por parte de los historiadores, pero que conviene traer al presente como lección para la realidad actual, donde se viven procesos de cambio que calificó como una "segunda transición".

El historiador de Tazacorte indicó que asistimos a una etapa de cambio, como ocurrió en la II República y preguntó: "¿Es que cada vez que haya una etapa de cambio en España no va haber otra salida? ¿Siempre va a haber gente con poder tentada a hacer ésto?. ¿Una Guerra civil, amenazar con la violencia, sin tener en cuenta el dolor que puede causar a grandes masas de la población? Estas son reflexiones que tenemos que hacernos a raíz de la lectura de este libro".

González Vázquez indica que incluso en los fríos documentos administrativos que se recogen en esta obra "permiten traslucir el dolor que está sufriendo la población en La Palma en aquella época y nos obliga a pensar que si queremos hacer un cambio, ¿no es bueno que estudiemos el pasado para orientarnos mejor de cara al futuro?".

"Apoyar la victoria en 500.000 muertos, cerca de medio millón de exiliados, en casi 300.000 personas en las cárceles (…) no estoy seguro que ninguna victoria merezca ese precio porque además el dolor se prolonga y llega hasta nuestros días".

De ahí que destacara la utilidad del libro de Alfredo Mederos, no solo por el contenido histórico y la información que contiene sobre este tramo tan dramático de la historia de España, sino porque invita a reflexionar desde el presente. "Un libro de historia que creo que va a hacer historia", añadió.

Alfredo Mederos, por su parte, agradeció al Centro de la Cultura Popular Canaria, así como al Cabildo y a los 14 ayuntamientos de La Palma que contribuyeran a la publicación de esta obra, en la que subrayó que "todas las fuerzas políticas democráticas que gobiernan apoyan este libro".

Asimismo, destacó el carácter complementario que tiene la obra con las dos anteriores (La represión franquista en La Palma y La conspiración contra la República en La Palma) e indicó que en la primera parte trata de las víctimas entre los soldados movilizados para la guerra y la segunda de las víctimas directas e indirectas de la represión franquista. En el frente o como consecuencia directa de la guerra murieron alrededor de 300 palmeros, movilizados la mayoría de ellos de forma obligatoria, mientras que un centenar lo hicieron como víctimas de la represión franquista.

Mederos destacó que "La Palma fue la única isla donde no triunfó el golpe de Estado". Un hecho, a su juicio, que "no ocurre por casualidad, sino consecuencia de la herencia histórica de la Isla" y que achacó a la tradición liberal y democrática de La Palma. Un pluralismo político y sindical que "cayó como consecuencia de aquel desgraciado golpe de Estado de 1936 que sumió a la Isla en una parálisis que costó mucho trabajo recuperar".

Asimismo destacó que el sector conservador en La Palma, dividido en moderados y liberales, "estaban dispuestos a pactar y no enfrentarse entre sí. El enfrentamiento fue impuesto desde fuera". En este sentido, apuntó que el hecho de enviar a José Miguel Pérez (secretario general de Partido Comunista) a Tenerife para ser fusilado dos días después fue una imposición del grupo militar ultraconservador, que se impuso con el golpe de Estado, no por el deseo de la inmensa mayoría de la derecha palmera".

El presidente del Cabildo, Anselmo Pestana, condujo el acto de presentación, en el que el poeta Manuel González Plata Bejeque recitó un poema de Francisco Viña y otro de su propio cosecha. Mientras que la diputada y autora del prólogo de la obra, María Victoria Hernández, anunció que una de las primeras iniciativas del PSOE en septiembre está dirigida a retomar la Ley de la Memoria Histórica. La parlamentaria palmera está ligada a este proceso estrechamente ya que ha sido la abogada de las dos causas de exhumación de las fosas de víctimas de la represión encontradas en la Isla.

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