Unas 600 personas se manifiestan en la capital porque "La Palma también tiene un límite"

Alrededor de 600 personas se han manifestado en La Palma a lo largo de la Calle Real de la capital de la isla al ritmo de tambores canarios, chácaras y bucios mientras exigían una solución a la emergencia habitacional insular, agravada por la erupción del Tajogaite en septiembre de 2021.

En el recorrido se han coreado lemas a favor de la defensa del territorio insular y por un nuevo modelo turístico y de desarrollo para las islas, advirtiendo a “empresarios especuladores y gobernantes” que la isla de La Palma “es bonita, no boba”.

Durante la lectura del manifiesto, frente a la sede del Cabildo de La Palma, han reivindicado como histórica esta jornada frente a las declaraciones del presidente insular, Sergio Rodríguez, calificando con el mismo término la luchada celebrada ayer sábado en Madrid.

Además han reclamado que “se ponga fin al atentado medioambiental que se está produciendo por las excavaciones de áridos en el entorno del Riachuelo” y han advertido que no permitirán “que la masificación turística que afecta a las islas hermanas se extienda por La Palma”.

“No olviden que La Palma hace años que dijo que no quería campos de golf, por lo que no entendemos que los representantes públicos vuelven a poner sobre la mesa proyectos turísticos desechados y anulados en los tribunales hace muchos años”, han declarado.

Tanto manifestantes como conductores han mostrado su molestia ante la nula presencia de agentes del orden público en una manifestación autorizada que, en ciertos tramos, debía cruzar la carretera y cortar el tráfico momentáneamente, con especial énfasis ante la aglomeración producida frente al Cabildo insular.

Alrededor de las 12:30 horas, tras la lectura del manifiesto, la concentración comenzó a dispersarse no sin antes recordar la convocatoria para el siguiente acto de protesta, el próximo viernes 23 de mayo en el entorno del Riachuelo, en El Paso.