"Los excesos de velocidad nos ponen en peligro a todos. No los permitas. Denúncialos"

En la isla de La Palma, las carreteras sinuosas, los desniveles pronunciados y los cambios repentinos en el clima convierten la conducción en un reto constante. Estas vías requieren especial atención y prudencia para evitar accidentes que pueden tener consecuencias graves.

Promover la seguridad vial es una de las apuestas del Cabildo de La Palma, a través del proyecto San Bernardo, donde el exceso de velocidad es uno de los factores que más incrementa el riesgo en la isla. Las curvas cerradas, frecuentes en las zonas rurales y de montaña, no permiten margen de error. Cada kilómetro por hora de más puede ser el último. Respeta los límites. Frena a tiempo. Conduce seguro. La precaución no es solo una recomendación: es una necesidad vital.

Una parte significativa de los siniestros viales pueden evitarse con una conducción más responsable. Adaptar la velocidad al entorno, especialmente en tramos complicados o con baja visibilidad, es clave para salvaguardar vidas.

La sensibilización ciudadana es fundamental. Recordar que “Los excesos de velocidad nos ponen en peligro a todos. No los permitas. Denúncialos” no es un simple eslogan, sino un llamado urgente a la acción colectiva. Cuidar de la seguridad vial es responsabilidad de cada conductor.

En definitiva, conducir en La Palma exige respeto absoluto por las normas y por las características únicas de sus carreteras. La prudencia salva vidas y garantiza que todos podamos disfrutar de la isla sin poner en riesgo nuestra integridad ni la de los demás.