La Cámara apuesta por la denominación de orígen del "Plátano Canario Pequeña Enana"

Ante la crisis por la que está atravesando el sector platanero y la oportunidad que representa la cumbre que celebrará el sector el próximo martes en la isla de La Palma, la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Santa Cruz de Tenerife, a través de su Delegación en La Palma, ha vuelto a poner sobre la mesa la apuesta que viene realizando desde hace años para que se constituya la Denominación de Origen "Plátano Canario Pequeña Enana", que permitirá fortalecer en el mercado un producto de reconocida calidad como es el plátano de Canarias. El plátno pequeña enana acapara el 40% de la producción platanera de la Isla.

De hecho, el presidente de la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara de Comercio, Mauro Fernández Felipe, ha transmitido al Cabildo de La Palma, institución que ha promovido esta cumbre del sector platanero, la importancia de que se aborde esta iniciativa en el marco del encuentro dado que supone "una fórmula para garantizar el futuro desarrollo y la competitividad de la producción platanera insular y la del resto del Archipiélago".

No obstante, desde la Cámara de Comercio se plantea también que se estudie como alternativa a la Denominación de Origen la figura de la "Indicación Geográfica Protegida", creada para productos que tienen un origen geográfico concreto y poseen cualidades, características o una reputación derivadas principalmente de su lugar de origen. El nombre de una región o un lugar determinado que sirve para designar un producto agrícola o un producto alimenticio ha de cumplir alguno de los siguientes requisitos: Ser originario de dicha región o lugar determinado o de dicho país; que posea una cualidad determinada, una reputación u otra característica que pueda atribuirse a dicho origen geográfico, y cuya producción, transformación o elaboración se realicen en la zona geográfica delimitada.

Entre los argumentos que plantea la institución cameral para demandar la puesta en marcha de esta medida, el presidente de la Delegación palmera de la Camára Castro Hernández destaca las ventajas que supondrían para los productores palmeros contar con una fórmula que, como la Denominación de Origen o la Indicación Geográfica Protegida, el consumidor la asimila  a un conjunto de valores que acompañan a la calidad de un producto y le ayudan a presentarse en sociedad y certifica tanto su origen como las singularidades del mismo, así como su reglamentación y la aplicación de mecanismos rigurosos para controlar la producción.

Para el presidente de la Delegación palmera, la importancia del sector platanero en La Palma, y por extensión en el conjunto del Archipiélago, que va incluso más allá de su valor económico por su vinculación al paisaje y la cultura del Archipiélago, obliga a buscar las fórmulas que garanticen su pervivencia, mediante una apuesta decidida por "una producción platanera donde prime la calidad como estrategia de competitividad y futuro desarrollo".

Castro Hernández destaca la importancia de acometer iniciativas que certifiquen la producción en origen y aglutinen los intereses tanto de los agricultores como de los responsables de la comercialización y distribución del plátano, garantizando la procedencia, calidad y prestigio del mismo.

Asimismo, el responsable de la Delegación en la isla añade que "si queremos adaptarnos con éxito a las nuevas tendencias del mercado y a las demandas  de los consumidores, que exigen productos de calidad demostrable, la Denominación de Origen es, en si misma, una carta de presentación, tanto para el consumidor como para el productor y el distribuidor, lo que contribuye a reducir los costes promocionales y a incrementar la rentabilidad de un producto clave en nuestra economía".