Los cazadores de la Isla, integrados en la Federación Insular de Caza de La Palma, se quejan de las incidencias y advertencias realizadas por los agentes del del Seprona de la Guardia Civil y la Guardería de Caza en las primeras jornadas de caza de la temporada.
La Federación Insular interpreta que dichas incidencias y advertencias dificultan la práctica de la caza y responden a una interpretación no literal y poco objetiva de la Orden de 25 de junio de 2010, publicada en el B.O.C. Nº 126 de 29 de junio de 2010, por la que se establecen las épocas hábiles de caza para 2010, en concreto en lo expuesto en su artículo 11.E.
También se quiere hacer constar que en ningún caso este tipo de comportamiento responden a instrucciones o interpretaciones realizadas desde esta Federación Insular, siendo esta interpretación y su procedencia realizada desde organismos ajenos a esta Federación.
Desde esta Federación, dicen, "tenemos que alegar y hacer constar que en ningún punto de la Ley Canaria de caza ni de su reglamento, ni de la propia Orden de Caza para 2010, se indica que los perros con los que cualquier cazador practique la caza tendrán que ser de su titularidad, es más, pueden ser propios, prestados o alquilados".
Asimismo, añaden, "tenemos que hacer constar nuestro malestar por haber sido impartidas estas instrucciones, lo que queremos dejar claro ante todos los cazadores y el resto de la Sociedad Palmera".
Últimas noticias
Lo último en blogs