El Diputado del Común, Jerónimo Saavedra, visitó hoy el municipio de Garafía para entrevistarse con el alcalde, Yeray Rodríguez, y su equipo de Gobierno.
Saavedra conoció de primera mano la realidad del municipio y dio a conocer la Institución que actualmente representa.
Asimismo, destacó que en el tiempo que lleva en el cargo, no se ha presentado ni una sola queja de ningún ciudadano de Garafía, a pesar de que la Isla es la tercera en número de quejas después de Tenerife y de Gran Canaria, que ocupa el primer lugar.
Además, indicó que la figura del Diputado del Común está para defender los derechos y libertades del pueblo canario y, por lo tanto, atender a los problemas que se puedan plantear ante esta Institución.
Por último, en la reunión mantenida con el equipo de Gobierno, Saavedra señaló que tiene la intención de seguir visitando a todos los municipios de la Isla y realizar un ciclo de conferencias para dar a conocer las funciones del cargo que actualmente ostenta.
cochino
¿La realidad de Garafia? pues pobre hombre van a hacer que le de un infarto! jajaja y no ha recibido quejas de los ciudadanos de Garafia dice, que bueno! cada vez son más graciosas las noticias relacionadas con Garafia.
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AntonioLuz
Como continùen las visitas de Saavedra a los ayuntamientos se le va a poner el colesterol por las nubes.
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PedroLuis
Leo la noticia y me deja el sabor insípido que suelen dejar a menudo las "declaraciones políticamente correctas", propias de quien ha dicho lo mismo ya en diferentes ocasiones. Quizás demasiadas ocasiones.
Leo el comentario de "Apurando" y desaparece mi indiferencia, porque sus palabras son claras y contundentes. Dichas por él, siempre racional, para nada suenan huecas o gratuitas, son dos puñetazos limpios, cargados de estilo: uno al hígado de la institución y el otro, aún más definitivo, al mentón de su correoso titular. Resultado: KO.
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apurando
Si tras más de 20 años es necesario explicar para qué sirve esta institución, es claro que no sirve para nada.
Si, además, es necesario que una persona de su edad renuncie a su partido de toda su vida para desempeñar ese cargo, entonces es una vergüenza para él y para el partido que le apoyó al cargo tras renunciar al partido.
Nuestra palabra es nuestro único patrimonio, señor… hubo un tiempo en el que le respeté y le voté: Jamás lo volveré a hacer.
¡Váigase!
Este es un país de tramposos.
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