Hernández Gómez confía en poder incluir la reparación de la Laguna en el Convenio de Aguas

El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias, Juan Ramón Hernández, explicó en días pasados en el Parlamento la situación en la que se encuentra en estos momentos la reparación de la Balsa de Barlovento y confió en que el Ejecutivo central mantenga las dotaciones presupuestarias del Convenio entre el Archipiélago y el Estado en materia de Aguas, para poder desarrollar las obras necesarias para devolver la operatividad a esta infraestructura, construida por el Ministerio a finales de los años sesenta.

Durante su intervención, el titular del Área instó al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente a que dicho acuerdo de Obras Hidráulicas disponga de créditos mínimos que permitan mantener las acciones en ejecución y posibilitar nuevas actuaciones como la de Barlovento.

En respuesta a una pregunta parlamentaria formulada por el grupo popular, el responsable de Agricultura explicó que la presentación del Borrador de los Presupuestos Generales del Estado para el ejercicio 2012, recoge una reducción de las dotaciones presupuestarias en más de un 71% respecto de la inicialmente prevista en el Convenio, "lo que implicará no poder llevar a cabo muchas inversiones previstas con cargo a dicho acuerdo, ralentizando y posiblemente paralizando actuaciones que ya se encuentran en fase de ejecución. Sin embargo -dijo- el ministro ha expresado su disposición a analizar antes de fin de año la situación con la idea de incrementar los créditos".

Hernández señaló durante la sesión que una vez comprobadas las causas de la avería de la Laguna, que tuvo lugar en 2011 debido a un nuevo asentamiento del fondo con los máximos niveles del agua de llenado, en la última reunión de la comisión de seguimiento de dicho Convenio celebrada en noviembre de 2011, el Departamento autonómico solicitó que se autorizase la realización de una Asistencia Técnica con una dotación presupuestaria estimada en 500.000 €, con cargo a los remanentes de crédito del capítulo VII de este acuerdo y necesaria para la realización de nuevos estudios de investigación, con las nuevas tecnologías disponibles para un mayor conocimiento de la situación del fondo de la Balsa, que permita garantizar la máxima altura a la que se puede llenar, y la elaboración de un proyecto de reparación, basado en los estudios anteriores, e incluyendo la renovación de la lámina impermeabilizante, y el refuerzo de la conexión hidráulica con la Balsa de Vicario.

"Esta solicitud fue informada favorablemente por parte de la comisión bilateral, pero estamos pendientes, para proceder a la mayor brevedad posible con la tramitación del correspondiente expediente de contratación de dicha asistencia técnica, de la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado y del mantenimiento de la anualidad prevista para el año 2012 en dicho Convenio, suscrito entre ambos ejecutivos, el 9 de diciembre de 2008", comentó el consejero.

Mientras tanto, dijo, el Consejo Insular de Aguas de La Palma está preparando abordar en el próximo ejercicio las pequeñas obras necesarias para mantener operativa la Laguna con un volumen residual de 500.000,00 m3, capacidad máxima que permite actualmente la balsa, hasta que se puedan acometer las nuevas obras.

Balsa de Barlovento

La Balsa de La Laguna de Barlovento se construyó en el periodo 1969-1975 por parte del antiguo Ministerio de Obras Públicas, con una capacidad de 5,5 hectómetros cúbicos y 32 metros de altura de lámina de agua.

En los sucesivos llenados de la balsa se vio que la impermeabilización del proyecto original tenía importantes pérdidas que alcanzaron, en febrero de 1978, un hectómetro cúbico en menos de un mes.

En esa ocasión, el entonces Ministerio de Obras Públicas intentó, desde 1982 a 1986, un ensayo de impermeabilización con arcillas seleccionadas de la zona, con un resultado insatisfactorio. A continuación, se planteó realizar esta operación con geomembrana sintética (lámina de P.V.C). De esta manera, entre 1989 y 1992 se ejecutó un proyecto que permitiría obtener 3,5 hectómetros cúbicos de capacidad y 25 metros de altura de lámina de agua.

Hasta el año 2005 no se consiguió alcanzar el nivel de 21 metros de altura, produciéndose entonces una avería que fue objeto de un proyecto de reparación por parte del Ministerio de Medio Ambiente, quedando el embalse en 2007 de nuevo en servicio.

En abril del 2011, se originó una avería que ha sido evaluada por parte de una comisión de técnicos nombrada para ello y conformada por técnicos del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas y el Consejo Insular de Aguas de La Palma.

El efecto de esta avería ha sido la pérdida de un caudal inicial de 8,5 metros cúbicos por segundo, que ha discurrido por el Barranco de la Gata, en Barlovento, sin sobrepasar el caudal asumible por dicho barranco.