Los padres del CEIP San José se sienten decepcionados por el engaño de la Consejería de Educación

Las familias del CEIP San José de Breña Baja denuncian en un comunciado que se sienten "indefensos y decepcionados" por el  engaño que han sufrido por parte de la administración educativa. "Realizamos en febrero una solicitud de ampliación de la oferta educativa para contar con el segundo ciclo de Primaria en nuestro centro, que cuenta con nuestra confianza y que nos ofrece una buena educación para nuestros hijos e hijas", y aseguran que "aún nos tienen a la espera, en ascuas, creándonos expectativas y dejando correr el tiempo a su favor, buscando aburrirnos".

La propuesta de ampliación se realizó para el próximo curso y, según se indica en el comunicado, no supondría aumento ni de unidades ni de profesorado con respecto al actual. Además, se indica que la comunidad educativa acogió muy bien esta idea y se recogieron más de 1.200 firmas para lograr esta mejora para el centro que se entregaron en la Oficina Insular de Educación.

Los diferentes estamentos políticos, con el alcalde de Breña Baja a la cabeza, le dieron el visto bueno al proyecto. También, se llevó a pleno de la corporación el apoyo a la demanda del centro que fue respaldada por todos los grupos políticos . Por su parte, la Consejería, por medio de Demetrio Suárez Hernández (director general de Centros e Infraestructura Educativa), responsable de la autorización, no puso objeciones a la petición, según los padres y madres, pero que a cambio, para afianzar más la propuesta, exigió al centro un documento de renuncia expresa a solicitar el tercer ciclo de primaria, documento de compromiso que, dicen, "fue firmado por la directora, el coordinador del CER Las Breñas y el alcalde".

"Cumplimos la condición inicial exigida por la Consejería, que la ampliación no suponga aumento de profesorado y gastos con respecto al curso actual", pero advierten que "aún nos tienen en la espera, en ascuas, creándonos expectativas y dejando correr el tiempo a su favor, buscando aburrirnos. Nuestro alcalde, apoyo indispensable en este asunto, ha estado siempre volcado, realizando cuantas gestiones están a su alcance para cumplir la palabra dada por su parte, pero desde la Consejería de Educación le están poniendo las cosas difíciles. A pesar de todo, le pedimos que siga, que hable donde a nosotros no nos dejan hablar".

Las familias de este CEIP ven con preocupación cómo el núcleo de población de San José, "con gran potencial de crecimiento y sede de la administración municipal, se va a quedar sin centro educativo si se cumple el fin pretendido de la Consejería de Educación de acabar con las escuelas unitarias, limitando su oferta educativa y con ello las posibilidades de matrícula y crecimiento".

Para las familias afectadas, la Consejería le tiene miedo al diálogo y también deja de cumplir la normativa de la que debería ser garante, propiciando el transporte del alumnado, en contra de la misma, a centros situados a más de 2 Km del domicilio de los alumnos. "Tienen nuestro centro más cerca y con esta actuación están despilfarrando recursos públicos y contribuyendo a que se puedan crear líneas de transporte artificiales en contra de la ley.
Contravienen también su propia normativa en cuenta a zonas de influencia, tratando de forma injusta, no equitativa, al modelo de escuela unitaria, al que le aplican a rajatabla esta zonas de influencia para reducir alumnos pero no si supone crecimiento y no aplicándola en los centros completos a los que se les permite matricular fuera de su zona de influencia".

Según los afectados, "atenta también contra el derecho de libre elección de centro, de elegir la oferta educativa que mejor consideramos para el desarrollo de nuestros hijos e hijas".

Todo esto, dicen los padres y madres, "parece encaminado a asfixiar el modelo de escuela unitaria, de calidad contrastada, demostrando que no es la calidad educativa la que se busca sino el estricto ahorro económico, puesto que al centro completo de referencia no se le va a dotar de más profesorado y medios para atender al alumnado, todo lo contrario". "No se está buscando la rentabilidad social, solo la rentabilidad económica. Están enterrando nuestra oportunidad de contar con un modelo cercano, familiar y de calidad que habría que potenciar por ser una inversión de futuro".

En opinión de las familias de este centro, "lo más grave es que en febrero se nos dijo que sí y a día de hoy no se ha cumplido la palabra dada. El centro sí la ha cumplido firmando un documento que le obliga a no solicitar más profesorado, manteniendo las mismas unidades. La otra parte no cumple sus compromisos, parece no tener palabra" y se preguntan qué se lo impide si no hay aumento de gasto.  Al contrario, afirman, la otra opción, la de transportar a los niños al centro de cabecera sí que supone aumento de gasto del dinero público.

Los padres y madres consideran que desde la Consejería tienen miedo a que las escuelas unitarias puedan crecer porque "entonces el único argumento que llevan años intentando que cale en la sociedad, del escaso número de alumnos y de su no rentabilidad, se les venga abajo. Tienen miedo, aparte de al diálogo, a que cunda el ejemplo y que nosotros, padres y madres, apostemos por el modelo contrario al que desean imponer, el modelo de la concentración en macrocentros, cada vez menos dotados y con más carencias desgraciadamente para todos".

Los padres y madres se preguntan "dónde quedan las bonitas palabras del consejero de Educación, y su viceconsejera, su compromiso, ante la sociedad palmera y profesorado representante del colectivo de escuelas unitarias de toda la Isla, donde se empeñaban personal e institucionalmente en favorecer la pervivencia de las mismas, por saber de su calidad, adoptando las medidas necesarias para su apoyo, en especial las de autorizaciones para su crecimiento, cuestión clave para su futuro más inmediato. Todo ello abriendo un proceso de diálogo acerca del mapa escolar de escuelas unitarias en la Isla que no hemos visto por ningún lado.

"No es cuestión de pretensiones fuera de la realidad, ni de idealizaciones bucólicas sobre la educación, que es como algunos describirían nuestra petición, no, las familias del CEIP San José, teniendo en cuenta las consideraciones económicas razonables de no añadir costes, creemos que nos asiste el derecho de mantener a nuestros hijos e hijas en nuestro centro porque, aunque parezca mentira, sin ningún coste añadido, logramos lo que la administración educativa lleva intentado muchos años conseguir a través de programas e inversiones muy costosas: ser una comunidad educativa participativa y tener un proyecto educativo que satisface a todos".