Antonio Hernández tomó posesión como párroco de Las Nieves, Velhoco y Mirca

El sacerdote Antonio Hernández tomó posesión ayer como nuevo párroco del Santuario Insular de las Nieves, de Velhoco y Mirca durante un emotivo y caluroso acto que contó con la presencia de numerosas autoridades y fieles que llenaban el templo y la plaza del Real Santuario.

Durante la ceremonia, que se celebró en la puerta lateral del templo y que fue seguida desde el interior de la iglesia en una pantalla gigante, además de darse lectura al acta del nombramiento, y proceder al juramento del cargo, el vicario general de la Diócesis, Domingo Navarro Mederos, entregó las llaves del Santuario a Antonio Hernández que abrió la puerta principal del templo mariano para luego recorrerlo a pie en compañía de otros sacerdotes.

El vicario durante la homilía pidió a Hernández que sea "cercano y humilde con este pueblo al que te han encomendado". "Estas gentes necesitan de todo tu amor y de toda tu entrega. Antonio te invito a que te identifiques con este pueblo. Un buen cura es el que pone su corazón en la comunidad a la que se ha destinado". También el vicario pidió al nuevo párroco de las Nieves, Velhoco y Mirca que se identifique con todos porque "a todos hay que proponer a Cristo, todos tienen que ser objeto de su salvación".

Por su parte, un emocionado Antonio Hernández, agradeció su nombramiento al obispo, recordó sus parroquias anteriores, el Proyecto Hombre, y tuvo palabras de recuerdo para Pedro Manuel Francisco de las Casas por sus cuarenta años de dedicación y trabajo al frente de las tres parroquias. "La vida de fe de estas comunidades ha sido acompañada durante muchos años por el trabajo pastoral de Don Pedro Francisco de las Casas quien ha dedicado su vida y lo mejor de sí mismo a cada una de las parroquias y al cuidado esmerado y exquisito del Real Santuario de Nuestra Señora de las Nieves. Nadie conoce ni puede valorar mejor el trabajo de Don Pedro que los vecinos de estas parroquias y los palmeros en general. Esta dedicación y esfuerzo seguro que estará siempre en la memoria agradecida de todos y que le acompañaremos con cercanía, amistad y oración".

Hernández anunció su intención de impulsar la formación con los laicos y el trabajo con los jóvenes. Y ofreció su apoyo y consuelo a los que "necesitan ayuda, a los pobres, a los enfermos, a los niños y a los alejados. "Siguiendo las palabras de Jesús en el Evangelio de hoy: el que acoge a unos de estos mi humildes hermanos me acoge a mí".

Algunas personas vinieron desde Tenerife expresamente para acompañar al párroco palmero en su toma de posesión, entre ellas estaba el alcalde de La Orotava que le entregó varios obsequios como reconocimiento a la labor realizada en dicho municipio, el último en el que ejerció su labor pastoral.

Intervención íntegra de Antonio Hernández

"Quiero poner en mis labios las palabras de la Virgen cuando descubrió el proyecto que el Señor tenía para ella: Engrandece mi alma el Señor porque quiso mirar la condición humilde de su sierva. Hago mías estas palabras porque él, el Señor, es el que ha hecho posible que yo me encuentre aquí, sintiéndome acogido bajo su manto de madre. Cada uno de ustedes ha querido unirse y acompañarme en esta celebración importante para mí desde esta nueva misión que la iglesia me encomienda. Gracias, muchas gracias a todos. En primer lugar a mi obispo, Don Bernardo, en la persona de Don Domingo. El ha sido el instrumento del señor para que yo comience una nueva etapa pastoral en esta mi isla de La Palma.

Un saludo especial a los sacerdotes compañeros que trabajan en esta parcela de la viña del señor en el arciprestazgo de santa cruz de La Palma y en la Isla. Salud y agradecimiento a los sacerdotes que han venido de fuera, gracias a las comunidades religiosas y religiosos y a las personas consagradas por su oración y presencia. Mis saludos y agradecimiento a las autoridades elegidas para el servicio del pueblo de quien María de las Nieves es su protectora y regidora reconocida. Mi gratitud a todas las personas que han venido de fuera de las parroquias donde he estado, La Orotava y en los diversos pueblos de la Isla de La Palma. También me alegra que compartan esta celebración un pequeño grupo relacionado con el Proyecto Hombre que ha marcado una gran parte de mi vida, con quienes seguiré vinculado desde esta nueva realidad.

De modo muy especial quiero expresar mi agradecimiento y saludo cercano a todas las personas de las comunidad encomendadas: de Las Nieves, Velhoco y Mirca y también a todos los palmeros que residen dentro y fuera de la Isla, por todo lo que significa este Santuario y la Virgen María a través de esta querida y entrañable advocación de Nuestra Señora de las Nieves.

La vida de fe de estas comunidades ha sido acompañada durante muchos años por el trabajo pastoral de Don Pedro Francisco de las Casas, quien ha dedicado su vida y lo mejor de sí mismo a cada una de las parroquias y al cuidado esmerado y exquisito del Real Santuario de Nuestra Señora de las Nieves. Nadie conoce ni puede valorar mejor el trabajo de Don Pedro que los vecinos de estas parroquias y los palmeros en general. Esta dedicación y esfuerzo seguro que estará siempre en la memoria agradecida de todos y que le acompañaremos con cercanía, amistad y oración.

Don Domingo hacia referencia al manto y vuelvo a hacer referencia del mismo porque siempre hemos recordado la imagen de la Virgen de las Nieves con un manto que cubre toda la talla, el manto es todo un símbolo que expresa la maternal acogida de María. Bajo su manto nadie puede considerarse ignorado, excluido y rechazado. Bajo el manto de María todos hemos de sentirnos invitados a renovar la fe en su hijo Jesucristo, nuestro señor y a vivir como hijos de un mismo padre. María con su discreta y humilde mirada nos indica el camino para el encuentro con su hijo y para vivir según su voluntad. Desde este emblemático rincón de la Isla quiero colaborar humildemente para que esta misión de María sea acogida y reconocida por todos, tanto a nivel parroquial como por todas las personas que se acercan a visitar el Santuario.

Hoy quiero expresar mi disponibilidad para ponerme al servicio de las acciones pastorales de la Isla junto con los compañeros sacerdotes y demás agentes de pastoral, laicos y religiosos en este momento clave para la Iglesia Universal, centrando el trabajo en el conocimiento y seguimiento de Jesucristo en la nueva evangelización. La formación con los laicos y el trabajo con los jóvenes es un objetivo que quiero impulsar de modo preferente, estoy seguro que todos colaboraremos en ello.

Por último, quisiera que este lugar y mi persona fueran un espacio de acogida a quienes no cuentan y necesitan ayuda, los pobres, los enfermos, los niños, los alejados, siguiendo las palabras de Jesús en el Evangelio de hoy: el que acoge a uno de estos mi humildes hermanos me acoge a mí. De nuevo gracias, muchas gracias a todos".