Berriel piensa que la fragilidad de las conexiones aéreas con la Península justifican la OSP

El Consejero de Obras Públicas, Transportes y Política Territorial del Gobierno de Canarias, Domingo Berriel, puso esta mañana a la isla de La Palma como ejemplo de la fragilidad de las conexiones aéreas entre Canarias y la Península. La presidenta del Cabildo palmero, Guadalupe González Taño, explicó al consejero que las conexiones aéreas de la isla con Madrid, que eran diez semanales en verano y cuatro en invierno, ahora son dos.

Para el consejero, estas cifras "no son más que otro ejemplo de que el Estado debe adoptar las medidas que sean necesarias para asegurar la frecuencia, capacidad y precio asequible que garanticen la igualdad de los canarios con el resto de ciudadanos del Estado". Además de esa exigencia a la creación de Obligaciones de Servicio Público con la Península, Berriel expresó esta mañana su preocupación por la posible incidencia en las islas de la huelga prevista en Iberia y recordó que las rutas de la compañía con Canarias tienen una alta ocupación, y una condición que puso la compañía para mantener tanto las frecuencias, como el empleo, fue que fuesen rentables.

Berriel explicó que su departamento mantiene el contacto con todas las partes para conocer al detalle la situación y poder analizarla en profundidad durante las conversaciones con Aviación Civil, al no tener la Comunidad Autónoma competencias en el transporte aéreo.

En este sentido, el consejero manifestó su deseo de que finalmente no se produzca la huelga prevista, pero, en el caso de que no se logre anular, sostuvo que el Estado debe tener muy en cuenta que Canarias depende casi en exclusiva del avión para sus conexiones exteriores, a la hora de fijar los servicios mínimos. "Los servicios mínimos deben garantizar la conectividad de las islas, que ya se ve bastante mermada en islas como La Palma, con solo dos conexiones semanales con Madrid", continuó el consejero, quien además señaló que la dirección de la compañía anunció en el momento de su reestructuración, que conservaría las conexiones rentables, lo que a juicio del consejero debería traducirse también en la conservación del empleo en rutas de alta ocupación, como las canarias.