Aarón León publica 'La retaguardia de Franco', una investigación sobre el personal franquista en las Islas Occidentales

El Instituto de Estudios Canarios acaba de publicar la última obra del doctor en Historia por la Universidad de La Laguna Aarón León Álvarez, que lleva por título La retaguardia de Franco. Personal político y podel local en las Canarias Occidentales, 1936-1961.

La elaboración de esta investigación, según explica el autor en la presentación de la obra, ha estado motivada por la búsqueda de explicaciones que nos ayudaran a entender quiénes integraron el personal político canario y, en paralelo, a valorar su importancia en la conformación de los apoyos sociales con los que contó el franquismo. En concreto, se trata de identificar a los miembros de los grupos políticos, sociales y económicos que asumieron la gestión de los Cabildos Insulares y los Ayuntamientos de las Canarias Occidentales (Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro) a partir de julio de 1936.

Igualmente, se estudian las causas del creciente descontento social con respecto al régimen republicano y se explica por qué esos grupos prestaron su apoyo al golpe de Estado. Con ello se trata de conocer cómo se construyeron y se tejieron los apoyos al nuevo régimen y de valorar la importancia de los años previos a 1936 para quienes luego formarían parte del personal político franquista.

A partir de todo esto, se analizan sus perfiles socioeconómicos y sus trayectorias en el ámbito local, su conexión con la gestión política de etapas anteriores y la existencia o no de una posible continuidad en el ejercicio del poder. En efecto, se aúnan ambos intereses de estudio en un análisis de cómo se forjó la Dictadura de abajo hacia arriba, para entender el proceso de conformación de las fuerzas sublevadas y su presencia en las instituciones.

Además, existen otros objetos de estudio que me permiten explicar la construcción de la Dictadura en el ámbito local canario, sobre todo por su relación y dependencia con el poder central. Durante todo el período analizado se observa un choque continuo entre los grupos de poder insulares y los gobernadores civiles, algo que irá vinculado también con los enfrentamientos entre los sectores renovadores y los conservadores por el control de FET y de las JONS en la provincia.

Aparte de ser una investigación sobre el poder local franquista en las Canarias Occidentales, cabe destacar que se suma a aquellas otras que, tal y como ha definido el historiador Óscar Rodríguez Barreira, abordan la situación política y social de un territorio que, como el canario, formaría parte de la perfieria real.

Las Islas como ejemplo de un marco geográfico de estudio alejado de la centralidad del Estado y definida por una serie de características específicas: las peculiaridades geográficas –la condición de islas y la división interna del territorio, así como la lejanía de la capital de España, y cómo todo ello determina su relación con la Península–, económicas –vigencia del sistema de libre cambio desde que en 1852 se aprobara el Régimen de Puertos Francos y que define la especificidad histórica de las Islas– y administrativas – derivadas no sólo de la existencia de los Cabildos Insulares, sino también de un delegado del Gobierno (con las funciones propias del gobernador) en La Palma, La Gomera y El Hierro.

Por tanto, una compleja estructura político-institucional a la que se sumó la intervención de la Comandancia Militar (luego Capitanía General) de Canarias y su protagonismo continuado durante la primera década de la Dictadura. Por tanto, el caso aquí analizado debe entenderse como una aportación al conocimiento histórico de un territorio periférico de España para conocer la construcción de la Dictadura en el ámbito local.

Se publica una primera investigación en profundidad sobre el personal político franquista del Archipiélago, al que hasta la fecha la historiografía canaria se había aproximado de manera muy parcial y general.

Contenido y estructura del libro

La tesis central de esta investigación es que el golpe de Estado y la posterior dictadura de casi cuarenta años consolidaron el poder hegemónico de un sector minoritario de la sociedad en las Canarias Occidentales, en concreto, propietarios agrícolas, comerciantes e industriales asumieron los principales cargos de gestión política e institucional, a excepción del período inicial de intervención militar en las instituciones. A pesar de la posterior incorporación de gestores sin experiencia política previa a julio de 1936, la participación de destacados miembros de los grupos económicos dominantes y pertenecientes a familias de renombre fue la tónica predominante durante todo el período.

Únicamente, a partir de los años cincuenta se detectarán cambios de importancia en la conformación de los Ayuntamientos, cuando realmente se necesite de un incremento del número de hombres de los grupos intermedios, mientras que en los Cabildos continuarían predominando destacados representantes de los poderes insulares.

Esta labor de reconstrucción histórica del poder local franquista de la provincia de Santa Cruz de Tenerife fue posible gracias a la investigación individualizada de cada uno de los gestores que formaban parte de las instituciones aquí estudiadas. De manera que no se trataba únicamente de saber quién era esa persona, sino también en qué entorno familiar, social, económico e incluso cultural se desenvolvía. Esto implicó superar el marco documental de las fichas elaboradas por Falange y la Guardia Civil, base de estudio de los historiadores sobre el personal político franquista y en las que se recogía la información relativa a este.

De esta manera, amplié mi campo de investigación hasta el punto de que muchas de aquellas personas que aparecían definidas con la categoría de «carece de antecedentes», se convertían en herederos de grandes fortunas, relaciones sociales y en cabezas de unas familias con larga trayectoria política y económica en sus entornos más cercanos.

Para la demostración de esa tesis, se ha llevado a cabo un estudio que, por momentos, es casi genealógico, con el que se ha descendido en la investigación hasta la raíz de la base social que formó parte de las instituciones canarias durante el franquismo, algo que en términos cuantitativos se traduce en casi mil trescientos nombres citados a lo largo del texto. Este nivel de detalle en el análisis realizado permitirá comprobar, entre otras cosas, la presencia de lazos familiares de destacadas familias que se entremezclaron y que aseguraron la conservación de las creencias y los intereses económicos que vieron amenazados durante la Segunda República