El astroturismo, un filón que puede generar hasta 30 millones de euros anuales en la Isla

Solo con los turistas que ya vienen a La Palma y que han mostrado su disposición a pagar actividades vinculadas con el cielo se podrían generar 9 millones de euros al año, que podrían llegar hasta los 30 millones convenciendo a aquellos que tienen un interés pero menor en este producto, según ha revelado el catedrático de Economía de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y director del Instituto de Turismo y Desarrollo, Carmelo León González, a raíz de la encuesta-muestreo realizada entre turistas de distintas nacionalidades que han visitado la Isla y cuyos datos presentó en la jornada de comercialización de productos de las estrellas que se celebra en La Palma.

Carmelo León explicó que la clave para conseguirlo es que los turistas que ya vienen a la Isla gasten más orientándolos a este tipo de actividades relacionadas con el astroturismo que ve como una oportunidad para la Isla. Pues recordó que uno de los retos que tiene los destinos es aumentar el gasto turístico, "en Canarias estamos en unos 104 euros por día de los que el 70% se queda fuera, en origen, así que el reto es incrementar el gasto en destino" y que "simplemente con el turismo que tenemos, promocionando las actividades y a través de la activación del sector y del producto de estrellas, tendrá un efecto que repercutirá en un mayor número de turistas aunque eso no está valorado en este estudio". Estos nueve millones representarían el 6,4% del gasto turístico de la Isla, que según los datos del ISTAC correspondientes a 2013 era de 138 millones de euros.

El observatorio astronómico, las rutas guiadas por los miradores astronómicos o las rutas a pie con telescopios portátiles para la observación, son solo algunas de las actividades por las que los turistas estarían dispuestos a pagar si alguien se las ofreciera.

Sin embargo, según Carmelo León,"lo que nos dicen los turistas es que faltan actividades. "Se le plantearon una serie de actividades y los visitantes consultados las veían muy bien y pagarían por ellas si alguien se las ofertara, el problema es que nadie se las proporciona" y como ejemplo puso que el observatorio astronómico no existe y "ahí hay 2 millones de euros al año de ingresos potenciales, por lo que hay que pensar si merece la pena hacer esta actividad; esto requiere una inversión publica, privada, o de ambas, pero si no tenemos ambición, ideas y creatividad no haremos nada". Para este experto, falta liderazgo empresarial y político porque "los números dicen que es viable y que hay un dinero que estamos desaprovechando con los turistas que ya vienen y que puede tener un efecto importante para traer nuevos visitantes".

La conectividad es otro asunto relevante que no se debe olvidar aunque "si aquí tenemos un buen producto de estrellas después vendrán los aviones. Por eso es importante la coordinación y este tipo de jornadas pero también es fundamental que haya alguna actividad que sea turismo de estrellas para ver si es visitada o no porque ahora mismo La Palma se conoce por el paisaje, el relax y el descanso, la gente viene aquí por eso pero si le añades las estrellas puede dar un salto cualitativo porque hay una demanda y los hemos visto con los turistas encuestados y ahora nada se está haciendo".

Las visitas que se están realizando al Roque entiende que son limitadas y que habría que hacer una apuesta más decidida para que se pueda observar un porcentaje alto del año sin que interfiera en la actividad científica "ahí hay un problema de incompatibilidad pero hablando se entiende la gente, y lo que no podemos es cruzarnos de brazos y no aprovechar esta oportunidad".

Una oportunidad que entiende que debe pasar también por contar con una infraestructura de alto nivel, y en esa línea consideró que un observatorio para aficionados sería algo importante y daría una imagen de que "nos lo que creemos porque un paseo para ver las estrellas está bien pero para generar una imagen se necesita una estructura y una red como tienen en Chile, que cuenta con un montón de telescopios". Por ello, tiene claro que si no existiera el astrofísico se podría hacer un turismo astronómico espectacular, y que "hay que negociar con los científicos para poner telescopios civiles que permitan dar un servicio a los turistas porque hay una posibilidad de negocio".

Carmelo Léon describió al nuevo turismo como muy heterogéneo, que busca experiencias muy diversas, viaja con iPad, está conectado a las redes y además es crítico, exigente y demandante de servicios. "En el siglo XXI habrá un turista en continuo cambio y por eso hay que crear ilusión con productos que produzcan satisfacción", indicó.