A George Martin, in memoriam
En el negocio de la música, cualesquiera que sea el género del que estemos hablando, ha habido siempre una figura que ha ocupado un discreto segundo plano: el arreglista.
Incluso en un mundo tan abierto a la libertad interpretativa como el jazz, en el que, desde sus inicios, la improvisación ha sido uno de sus principales rasgos de identidad, ya que, al tratarse de una forma de creación inmediata, la personalidad del artista se transmite de forma instantánea cuando se sale del guión preestablecido y ofrece su propia e individual versión de la partitura (además, no conviene olvidar que, dentro del jazz, la improvisación corresponde con un espacio de expansión ilimitada que los músicos negros demandaban después de padecer una historia colectiva marcada por toda clase de abusos y privaciones), la irrupción de la figura del arreglista se produce, entre 1925 y 1929, coincidiendo con el nacimiento de las primeras grandes orquestas, que necesitan una persona capaz de adaptar o transformar una obra para que pueda ser ejecutada con instrumentos o voces distintas a los originalmente previstos.
Al esplendor del jazz en la década de los treinta contribuirían músicos como Fletcher Henderson, por cuya banda pasaron Louis Armstrong, Don Redman -arreglista y saxofonista que también contribuiría a la concepción del nuevo lenguaje musical- y Coleman Hawkins, un magnífico intérprete a quien le corresponde el honor de ser el primer solista de saxo tenor en la historia del jazz.
Las big bands o grandes orquestas que empezaron a proliferar surgían de multiplicar los pequeños conjuntos del decenio anterior. La trompeta se volvió varias trompetas, al igual que el trombón. Y el clarinete cedió su protagonismo sonoro a la sección de saxos, compuesta, por lo general, de dos tenores, dos contraltos y un barítono. Se hacía necesaria, por tanto, la presencia de un músico experto, capaz de llevar al papel estas nuevas exigencias instrumentales.
Muy pronto las grandes orquestas comenzaron a diferenciarse entre sí. Mientras los directores blancos como Benny Goodman, Gene Krupa, Charlie Barnet o Tommy Dorsey optaron por tocar una música de baile, ligeramente emparentada con el jazz y que recibiría el nombre de swing, músicos negros como Jimmy Lunceford, Chick Webb o William "Count" Basie cultivaban en sus bandas un jazz más puro.
Sin embargo, ninguna de estas formaciones ofrecía una música tan genuina, original y elegante como la banda de Edward "Duke" Ellington.
Encuadradas en el estilo jungle, llamado así por los rugidos de los animales de la selva que imitaban sus solistas, sus composiciones reflejan una cierta estética "impresionista" que les imprimía un carácter misterioso, nebuloso, nocturno.
En gran medida lo que empezaba a ser el sonido "made in Ellington" se debe a la conjunción de su inigualable talento como compositor y a la enorme valía de sus músicos. Dos de ellos, el saxo barítono Harry Carney y el saxo alto y soprano Johnny Hodges, eran los mejores en sus respectivas especialidades. Ambos acompañaron a Duke durante medio siglo.
Es en los años cuarenta cuando la orquesta y el propio caudal creativo de Duke Ellington alcanzan su mayoría de edad. Las obras maestras se suceden sin pausa y el pianista se atreve a escribir una larga suite: Black, Brown and Beige. Obra que refleja el progresivo mestizaje de la música norteamericana.
La primera de las cincuenta suites que habría de componer a lo largo de su carrera no hubiera sido posible sin la estrecha colaboración de Bill Strayhorn, el pianista que durante casi treinta años sería la mano derecha de Ellington. Ambos compartían la composición y los arreglos de los temas; muchos de los cuales surgían en conversaciones telefónicas o en charlas informales. Nunca en el jazz se dio una química tan provechosa entre dos artistas. Una estrecha relación que sólo se rompió con la muerte de Strayhorn, acaecida en 1967.
La década de los treinta inicia la llamada etapa clásica del jazz. Estos años se caracterizaron por un estilo musical fresco, alegre, divertido, que marcaría a toda una época: el swing.
En pleno esplendor del swing, el clarinete alcanzó una cierta notoriedad de la que jamás volvería a disfrutar. Los célebres directores blancos Artie Shaw, Woody Herman y, sobre todo, Benny Goodman, eran reconocidos clarinetistas y se encargaron de explotar las posibilidades musicales de este instrumento. Sus bandas, junto a la de Glenn Miller, pondrían la música de fondo a la Segunda Guerra Mundial.
De todas las orquestas de swing ninguna alcanzó la fama y el éxito de la banda liderada por Benny Goodman y ello, en gran parte, se debió a su habilidad para contratar a los mejores arreglistas de la época. Músicos como Jimmy Mundy, Edgar Sampson, Mary Lou Williams o el propio Fletcher Henderson. Todos ellos, verdaderos maestros en el arte de escribir para una big band.
Después de la II Guerra Mundial, el jazz entró de lleno en la era del bebop. Un cambio de estilo absolutamente revolucionario, consistente en la inclusión de armonías hasta entonces inexploradas, en la flexibilización del esquema rítmico y en la vital importancia otorgada a la improvisación, auténtica columna vertebral de esta nueva música. En cierta forma, el bebop devolvió al jazz a sus raíces. Frente a la música comercial en la que el swing se había convertido durante la guerra, el bebop se erigiría como retorno a la independencia y creatividad de los orígenes africanos. Así, hacia finales de los años cuarenta, todos los músicos de jazz que habían nacido en la década de los veinte tocaban algo parecido al bebop. Un estilo que no requería de grandes orquestas ni, por tanto, de esmerados arreglos musicales.
Sin embargo, justo cuando el bebop empezaba a dar señales de agotamiento, paradójicamente, fue la orquesta de Woody Herman la que tomaría el relevo del nuevo sonido de vanguardia.
Durante la década de los cincuenta se desarrollarían distintas corrientes musicales y la primera de estas líneas de estilo fue el llamado cool jazz o jazz frío. En 1949, el trompetista Miles Davis formó un noneto que pasaría a la historia como The Birth of the Cool. En aquel conjunto destacaban los arreglos de Johnny Carisi, del saxo barítono Gerry Mulligan, del pianista John Lewis y, sobre todo, las innovadoras ideas sobre orquestación aportadas por Gil Evans. A lo largo de una década, el talento de Miles Davis se uniría al fino olfato de este pianista y arreglista canadiense. De esta extraordinaria sociedad artística nacerían obras maestras orquestales como los álbumes Miles ahead, Sketches of Spain, Quiet nights o la fantástica versión de Porgy and Bess.
Con la llegada de los cincuenta, las grandes orquestas o big bands se enfrentaron a su extinción. Algo que sería prácticamente un hecho en la década siguiente, los sesenta, caracterizada por la experimentación y por una libertad creativa sin fronteras.
Con la excepción de las bandas dirigidas por Count Basie y Duke Ellington, la mayoría de estas grandes formaciones fueron incapaces de afrontar la competencia discográfica de otros ritmos y músicas que atraían en masa a la juventud, como el rock and roll o el pop.
En un último intento por atraer al público, algunos directores decidieron cambiar la música de baile por las salas de concierto "serias". El principal promotor de esa idea fue Stan Kenton. En su afán por sobrevivir, la banda de Kenton llegó a ofrecer un sonido un tanto estrafalario. Una mezcla de jazz y de música clásica contemporánea que era imposible de obtener sin la obligatoria intervención de un arreglista.
En la década de los cincuenta y sesenta, gran parte de los músicos de jazz pudieron mantenerse gracias a que pusieron su talento al servicio de cantantes melódicos o crooners, como Bing Crosby o Frank Sinatra, que vendían cifras astronómicas de discos, ofrecían conciertos multitudinarios y en el cine poseían el estatus de auténticas estrellas. Algunos de los mejores arreglistas trabajaron en exclusiva para mayor gloria y lucimiento de estos vocalistas. Como es el caso de Oliver Nelson, de Nelson Riddle o del polifacético trompetista, compositor, director de orquesta y productor, Quincy Jones.
Nacido en 1933, en la ciudad de Chicago, Quincy Jones comenzó a estudiar piano desde muy niño y, a los diez años, ya dirigía su propio cuarteto vocal en una iglesia. Con catorce empezó a recibir lecciones de trompeta y, en 1951, con dieciocho años cumplidos, obtiene una beca para cursar estudios en la prestigiosa Berklee School of Music de Boston. Ese mismo año, el célebre vibrafonista Lionel Hampton lo contrata como trompetista y arreglista de su banda. Poco después ésta inicia una gira por Europa, donde el joven Jones participaría en jam sessions y grabaciones a espaldas de su director.
A su regreso de su primera gira por Europa, Quincy Jones se instala en Nueva York, deja la orquesta de Hampton y se convierte en un compositor y arreglista muy solicitado. Durante la década de los sesenta, Quincy Jones concentró todos sus esfuerzos creativos en escribir bandas sonoras para películas (como El prestamista, La huida o En el calor de la noche, por la que obtendría un Oscar) y en componer temas para estrellas del firmamento musical como Ray Charles, Sarah Vaughan, Dinah Washington, Peggy Lee, Count Basie y Frank Sinatra.
Desde los años setenta hasta la actualidad, la carrera de Quincy Jones ha sido una sucesión de proyectos exitosos. Por ejemplo: a él se debe, sin duda, el hecho de que el más joven miembro de los Jackson Five, Michael Jackson, se convirtiese en un extraordinario fenómeno social, a partir de la publicación de sus discos en solitario, de los que fue su productor. En los últimos años, fiel a su curiosidad indómita, Quincy Jones ha desarrollado la mayor parte de su actividad artística fuera del ámbito del jazz e incluso ha llegado a grabar junto a reputados raperos como Ice-T, Melle Mel, Big Daddy Kane o Kool Moe Dee.
A principio de los años cincuenta, en las salas y clubs nocturnos de Río de Janeiro, se fue gestando un cóctel de jazz y samba que surgía de una práctica musical muy intimista; casi como si se tratara de música de cámara. Aquel experimento, que derivaba directamente del cool jazz o jazz frío californiano, se caracterizaba por su marcado perfeccionismo formal. En este nuevo estilo los distintos elementos musicales se conciben como un todo: melodía, armonía, ritmo y contrapunto. Mientras, el canto fluye como en una conversación, estableciéndose una estrecha relación entre texto y música. Nos estamos refiriendo a un movimiento que marcaría un antes y un después dentro de la música contemporánea: la bossa nova.
Mientras que la mayor parte de las modas musicales se ven relegadas al olvido tras un año de esplendor, la bossa nova prosperó y conservaría intacto su gran atractivo comercial hasta bien entrados los años sesenta. Este éxito obligaría a los artistas de mayor renombre de Brasil a trasladarse a Estados Unidos: como Joao Gilberto, Luiz Bonfá o Antonio Carlos Jobim. Éste último encontró en el alemán Claus Ogerman el interlocutor perfecto para reelaborar la bossa nova desde un prisma instrumental y orquestal. Fruto de esta colaboración son varios álbumes de entre los que destaca el primero de ellos, Wave, cuyo tema principal es una delicada preciosidad que da título al disco.
En la década de los setenta, el jazz recurrió a la fusión para aguantar el tirón comercial de los grandes monstruos del rock y del pop, en una batalla que tenía perdida de antemano, ya que la fórmula de mezclar el jazz con el rock no tardó en dar síntomas de un rápido e inevitable agotamiento.
Si el jazz-rock había recuperado al jazz para el gran público, en los años setenta el jazz retornaría a las pistas de baile, casi tres décadas después del auge de las bandas de swing, de la mano de otro híbrido musical: el jazz-funk.
Este género tenía su origen en la música con la que arrasaban en las discotecas las estrellas negras del soul. O sea: James Brown, The Temptations, Marvin Gaye, Earth Wind and Fire o Curtis Mayfield. Preocupados por ofrecer una música intermedia entre el rock de corte tradicional y el soul, una serie de intérpretes de jazz que, por otra parte se sentían comprometidos con los problemas de la población de color, decidieron fundir ambas corrientes en el nuevo cóctel, el jazz-funk, que gozaría de una popularidad inmediata.
Conocidos en los años cincuenta como los Night Hawks o Halcones de la Noche, en la década de los setenta, The Crusaders se convertirían en una de las formaciones más sólidas dentro del jazz-funk, cuya elocuente calidad musical da cuenta de unos arreglos magníficamente escritos.
Con la entrada en los años ochenta, el jazz llevaba casi un siglo de larga andadura. Había evolucionado desde la ya remota Nueva Orleans hasta convertirse en una música multiétnica, imposible de calificar y clasificar.
Los músicos de jazz optaron por volver sobre los pasos ya dados y, olvidando por un momento los ecos del rock y del funk, regresaron a las principales corrientes del jazz: el swing de los años treinta, el bebop de los cuarenta y el free jazz de los sesenta.
Frente a esta orientación principal, representada por los hermanos Wynton y Bradford Marsalis, otros músicos empezaron a hacerse eco del rap y del hip hop, mezclando la música de la calle con los viejos estilos más genuinamente jazzísticos. Todo esto se tradujo en un progresivo abandono de la riqueza y sofisticación instrumental, lo que, unido a la desaparición de las grandes orquestas de jazz, ha producido que el arreglista haya quedado relegado a ocupar un lugar cada vez menos relevante en la, por otro lado, decadente industria discográfica.
Sin embargo, de vez en cuando, uno se tropieza con agradables sorpresas, como el británico Mark Ronson, un músico que empezó como pinchadiscos, devoto del hip hop norteamericano, y se ha convertido en un reputado y reconocido productor musical. Aunque su universo creativo está fuera del jazz, no cabe duda de que la influencia de este género está presente en los temas que ha co-escrito y ha arreglado para la malograda Amy Winehouse, como su fabuloso Back to black, con el que cerramos este pequeño tributo a ese discreto druida de sonidos: el arreglista.
Juanf
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La masacre
Por doquiera, en confusión, sangre y muerte, robo y fraude, corrupción, deslealtad, agitación, perjurio (Sabiduría 14:25)…El Libro de la Sabiduría atribuido a Salomón, predica el verdadero sentido de la vida y hace del que lo cumple un hombre justo, por el contrario señala que aquel que se aparta de la doctrina es pecador e impío y se encamina a la perdición.
El versículo del Antiguo Testamento que he citado, describe perfectamente a Venezuela, apartarse de la “sabiduría” incluye cometer perjurio General Rangel Gómez ¿Mentía usted cuando decía que no habían desaparecidos en Tumeremo? ¿Fingió para ocultar los asesinatos o qué?
Chávez nos dejó un país sumido en el dolor, Maduro ha perfeccionado su legado, las mafias de la droga, las bandas criminales, los colectivos, los pranes de Iris, y las Fuerza Armadas de Padrino, arrojan un resultado de más de 200.000 venezolanos asesinados de manera impune, sangre y muerte cubren el territorio venezolano.
Estamos en manos de un régimen corrupto que ha traicionado a su pueblo, donde nadie asume su responsabilidad, donde se cumple con los Castro y no con los venezolanos, son traidores, “pecadores e impíos” encaminados a la perdición”.
Perdemos nuestros seres queridos, en manos de la delincuencia, por accidentes, enfermedades sin tratamiento médico, a causa de condenas injustas, la tortura, o los secuestros, la violencia urbana y muy pronto por el hambre.
La muerte nos golpea a diario ante la mirada indiferente del que está sentado en Miraflores, Venezuela martirizada… masacrada… el último episodio en el que fueron asesinados 26 mineros ocurrió en Tumeremo, una población del Estado Bolívar, donde los familiares de las victimas tuvieron que enfrentar al gobernador del estado, quien no solo desmintió públicamente la masacre sino que amenazó al diputado opositor Américo De Grazia y al líder de la Causa R, Andrés Velásquez, con denunciarlos a la Fiscalía, insinuando con el mayor cinismo que las declaraciones eran falsas y que los mismos se beneficiaban con la minería ilegal.
Los dirigentes primeros en solidarizarse y convertirse en voceros de los familiares de las víctimas, arriesgan su seguridad personal, reciben amenazas de terminar como los mineros, asesinados con un tiro en la cabeza y rebanados con motosierra.
La sospechosa actitud del gobernador, que compromete al componente militar, el inexplicable silencio de Maduro durante 5 largos días, el veto de la fiscalía a que los parlamentarios responsables de la investigación de la matanza, presenciaran la autopsia, más la denuncia de que el traslado de los cadáveres se efectuó en un camión “escoltado por un centenar de motorizados y por un vehículo con el logotipo del Cicpc, en cuyo interior viajaban tres funcionarios de ese cuerpo policial”, indican que el gobierno tiene interés en ocultar le verdad, al extremo que voces provenientes de la Asamblea Nacional, denuncian la complicidad entre las autoridades y las mafias que controlan la explotación del oro, coltán y diamante en Bolívar y con los asesinos de los mineros de Tumeremo.
El régimen desesperado por ocultar la verdad y evitar que se haga justicia he llegado al extremo de perseguir a los directores de medios de comunicación del estado, por denunciar hechos delictivos, como ocurre actualmente con el diario Correo del Caroní.
La directora de COFAVIC, reconocida ONG sobre los derechos humanos en Venezuela, la abogada Liliana Ortega, denunció la gravedad de “la situación carcelaria, el uso desproporcionado de la fuerza pública, la brutalidad policial y la violencia, que afecta los derechos humanos”, recordando que “en Venezuela hay 27.000 homicidios y 1.044 presuntas ejecuciones extrajudiciales anuales”.
La jurista señala que mientras existe un 99% de impunidad, el régimen se ocupa es del “hostigamiento a quienes denuncian corrupción, prácticas ilegales y la violación de los derechos humanos”, concluyendo de manera lapidaria que: “Las bandas organizadas ligadas a la minería ilegal, ejercen el control social de la zona en gran medida con la aquiescencia y la tolerancia plena de las autoridades”.
¿Vuelve el polvo al polvo? ¿Vuela el alma al cielo? ¿Todo es vil materia, podredumbre y cieno? ¡No sé; pero hay algo que explicar no puedo, que al par nos infunde repugnancia y duelo, al dejar tan tristes, tan solos los muertos! Nos gritaba el poeta sevillano Gustavo Adolfo Becquer, en sus versos.
Los familiares solo piden recuperar los cuerpos, cerrar sus ojos “Que aún tenía abiertos”, tapar sus caras “Con un blanco lienzo”, “unos sollozando, otros en silencio”, “de la casa, en hombros”, llevarlos al templo y en una capilla colocar el féretro. Se entiende quieren enterarlos, hacer el duelo.
Un acto íntimo, privado, doloroso que respetamos profundamente. Inversamente opuesto a la indignación que sentimos frente a la impunidad reinante.
Los hechos demostrados, las pruebas, la lucha de los familiares y la constancia de los diputados han logrado enfrentar la degradación institucional, Maduro tuvo que reconocer los hechos, que de paso desmienten al Gobernador. La fiscal terminó entregando 14 cadáveres a los familiares y el director del Cicpc anunció que relevarán a funcionarios de sus cargos, sin señalar culpables ni responsables.
27 muertos más, se unen a las víctimas de verdugos disfrazados de militares y de magistrados. Pienso en el productor agropecuario Franklin Brito, muerto luchando por sus tierras.
Recuerdo a Bassil Da Costa (opositor) y a Juan Montoya (chavista), asesinados por herida de arma de fuego en circunstancias atribuidas a funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN), a Roberto Redman quien horas antes había cargado el cuerpo sin vida de Da Costa.
Revivo las imágenes de la joven de 22 años transportada en una moto Génesis Carmona, la cara ensangrentada de la estudiante Geraldine Moreno a consecuencia de un disparo a quemarropa, efectuado por funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana.
Me atormenta la carita del niño Kluiverth Roa… quien pedía clemencia el último instante de su vida, al uniformado que le disparó, la joven embarazada Adriana Urquiola, intérprete de lenguaje de señas, el dolor los esposos López Castillo a quienes le masacraron su hijo mayor Antonio… una madre que no llora, para que la sostenga la indignación.
Son tantos… son miles… los hogares enlutados debido a la masacre que ocurre en Venezuela. Leí en un artículo y lamento no recordar el nombre de su autor, un texto que pedía que dejáramos hablar nuestros muertos, padres que no llegaron a serlo, novios que no pudieron casarse, hijos que no crecieron, estudiantes que no se graduaron… debido a la indolencia, la ineficiencia y la complicidad del gobierno chavista.
Como ese gobernador del estado Bolívar que vociferaba el primer día, que no había pasado nada y que a él no lo tomaban “por pendejo”.
El régimen tendrá que rendir cuentas, mi indignación es grande, dejo el lugar a la palabra bíblica: “Pero los cobardes, los incrédulos, los abominables, los asesinos, los impuros, los hechiceros, los idólatras y todos los embusteros tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre: que es la muerte segunda”. Apocalipsis 21:8.
Nelson Castellano-Hernández
Ex Cónsul de Venezuela en París
Presidente de Venezuela-Futura, Francia
https://www.facebook.com/groups/181289191975263/
nelsoncastellano@hotmail.com
http://www.noticierodigital.com/2016/03/la-masacre/#more-313167
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Juanf
Cosmonauta no olvide que todos van por lo mismo, ganar dinero al pasar un escalón mas, no importa que sean de dos ciudades cercanas o lejanas, ellos van en busca del botín que conllevan los encuentros, gran negocio de pocos aun cuando son muchos los jugadores que se benefician de manera escandalosa, no solamente en futbol, también se puede apreciar en esa país de las barras y las estrellas que usted vive, cifras de espanto y brinco, pero la televisión paga de forma exagerada, negocios de grandes, grandes negocios.
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Juanf
Buen amigo PopCorn recuerde que usted conoce muy bien la bondad de Pampatar, su playa con barquitos pesqueros y niños jugando en la playa, el que se haya fajado con esos malandros que acosaban a los que por necesidad imperiosa de adquirir insumos, que les permita vivir un poco mas esa tragedia que viven los venezolanos de edad avanzada obligados a largas colas cuando sus pies ya no le aguantan, es un morir lento que los que mal gobiernan quieren para los ciudadanos del que fuera buen país y hoy a sido convertido en excremento comunista.
No quiero felicitarle por tan noble acción, no porque es necesario seguir viviendo, nada bueno es engrosar a los mas de doscientos mil muertos
( ocho estadios olímpicos llenos),
así buen amigo manténgase atento y no abuse del destino que en Venezuela pareciera es lo que Satanás decida junto a Maduro en Miraflores.
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Juanf
La ex diputada María Corina Machado participó como oradora en la sesión especial de la Asamblea Nacional de Venezuela en conmemoración del Día Internacional de la Mujer, pero su discurso no pudo ser transmitido por ningún medio de comunicación nacional ya que una vez más la neotiranía castrochavista boicoteo la posibilidad
María Corina Machado quien fue destituida durante 2014 de manera arbitraria por Diosdado Cabello en esa época presidente del legislativo, comenzó su alocución en el Hemiciclo y de inmediato se inició una cadena nacional de Nicolás Maduro. También el canal de Youtube de la AN se encontraba sin conexión para ese momento.
Pero hoy con las tecnologías que burlan las pretensiones de los déspotas, es imposible privar al ciudadano de la comunicación, la información y el derecho a escoger en libertad lo que se desea conocer, es así que aquí ofrecemos a nuestros cibernautas el mencionado discurso sin censura ni cortes…
María Corina Machado exigió la liberación de los presos políticos de Leopoldo López y Antonio Ledezma y de todos los otros. Agregó: “¡Hoy toda Venezuela está unida en la decisión de un cambio ya! No hay más tiempo, por eso ya no es un derecho, tenemos la obligación histórica de hacer que este régimen salga ya del poder”.
La coordinadora de Vente Venezuela ha sido muy clara cuando en muchas oportunidades ha expresado que la renuncia del Presidente Nicolás Maduro es la vía adecuada para la transición política en Venezuela. Es por eso que antes de finalizar su alocución dijo que “desde la Asamblea Nacional, en nombre de las valientes mujeres venezolanas, exigimos hacernos escuchar, avanzamos en nuestro propósito. ¡Maduro vas a renunciar!”.
Cortesía de la Oficina de Prensa de María Corina Machado
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cosmonauta
TAMPOCO SON DE MI AGRADO
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Las hipotéticas finales entre 2 equipos Españoles tampoco me simpatizan mucho que digamos ni en la champions, ni en la Europa League puesto que uno de ellos necesariamente sale derrotado después de mucho esfuerzo.
Esta claro que la copa y los laureles se quedan en España, empero siempre me apena el equipo perdedor por los rostros tristes y la frustración de los pobres aficionados, así como también el de los futbolistas que suelen salir llorando, y el coach que aparenta serenidad pero lleva la procesión muy adentro.
Saludos.
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cosmonauta
SORTEO CHAMPIONS LEAGUE
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Acabo de presenciar el sorteo por la cadena norteamericana Fox.
No me gusta cuando 2 equipos Españoles se tienen que enfrentar entre si salvo que sea en la final.
Que mala suerte para el atlético de Madrid. PUTA MADRE.
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PopCorn
Valiente, lo qe se dice valiente mi estimado JuanF, me siento y me pongo ante los abusadores de oficio. Como hace unos pocos días atrás, donde había una cantidad de personas mayores en una cola para comprar harina, un poco mayores que yo, que ya lo soy bastante, de paso, pues unos zagaletones muy malnacidos y peor presentados ellos quisieron hacer de las suyas con los mayores. A la fuerza quisieron ponerse delante de ellos en la cola, pues la harina se acaba muy pronto, cuando llega.
Yo que iba pasando llegué a escuchar las expresiones que los despojos estos le expresaban a los viejitos, y la verdad que me puse como un indio… y ahì empezó la función. Me entré a carajazo limpio con dos de ellos, y cuando otros dos quisieron entrar al ruedo, no me quedó mas remedio que apelar al amansa guapos, y asunto arreglado.
Aparte de un par de razguños nada que lamentar, por mi parte. Lo que sí es verdad que los vítores de los viejitos y muchos presentes en el sitio me hicieron sentir muy bien, no lo dude usted. Por lo demás todo bien. Aunque luego que me fui me decía a mí mismo… oye Pop, déjate de esas vainas, que ya no es lo mismo que antes, no te ganaste un "tirote" de chiripita… y yo mismo me contestaba… qué "tirote" ni que coño pendejo, no ves que esos cabrones se estaban dando gusto con los viejitos… y luego me contestaba… bueno, la verdad que sí, los jodimos bien jodidos.
Y me complace saber que es usted amigo de Nelson Castellano, ejemplo de periodismo cabal.
Saludos, hoy escuchando algo de Jazz y Blues.
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Juanf
Nuestro valiente PopCorn dias atras nos dejo oír canciones venezolanas, estas son únicas en su estilo y voz.
Hoy les comento sobre un sueño, no mio sino de mi amigo Nelson Castellano-Hernández.
Un mal sueño
Soñé que vivía en país empobrecido, arrasado por la necesidad, en mi pesadilla la gente hacia colas tratando de encontrar las cosas más indispensables, desde comida hasta jabón para limpiarse. La gente moría por falta de medicamentos, aun dentro de los hospitales.
Existía un hedor a muerte que se extendía por la ciudad, a causa de los 200.0000 asesinatos impunes, en las calles se acumulaban montañas de basura con moscas. La gente ya no escuchaba las noticias, no esperaban nada, no confiaban en nadie, se desplazaban rumiando su rabia y su desencanto.
El pueblo tenía miedo hasta del dolor de cabeza, sabía que no encontraría ni un calmante para aliviarlo, ni hablar de enfermedades incurables. En mi sueño la gente aseguraba, que si no te mataba la enfermedad lo haría el dolor.
El país estaba en manos del hampa, unos en las alturas del poder traficando droga o raspando las últimas comisiones y las divisas que revendían en el mercado negro. En los cuarteles se traficaba con armas, droga, gasolina y alimentos, con las fronteras cerradas para preservar el monopolio del contrabando.
Las calles y los barrios eran controlados por la delincuencia común, pranes y colectivos, habían sido armados por el régimen para defender la revolución, pero hoy en día actuaban de manera independiente. Muchos de los grupos estaban formados por guardias nacionales y policías.
Circular era un riesgo de vida o muerte, pero era necesario hacer colas… asumir el peligro para poder comer.
El cinismo de la autoridades era escandaloso, la gente estaba cansada, ya no oía, sabían que no había futuro pero no reaccionaban, con un andar lento y trastabillando avanzaban en silencio… uno diría que se repetía un pequeño holocausto. Como si Dios se hubiese olvidado de su pueblo y el resto del mundo tan preocupado en la geopolítica, no tenía tiempo para la población de un país olvidado.
Habíamos pasado de ser un país pujante, con altos ingresos petroleros, con magnificas universidades, teatros, museos, orquestas… hasta convertirnos en una sombra. La gente se iba buscando nuevos horizontes que le negaba su tierra.
Los culpables de la ruina reían para sus adentros, habían aniquilado toda capacidad de reacción, se disponían a disfrutar de fortunas multimillonarias adquiridas en apenas 16 años. Repetían sin cesar el guion preparado en la Cuba castrista.
Todo el que aspiraba tener la propiedad de su casa era un capitalista, el que deseaba estudiar y progresar un oligarca, gusano o escuálido, era muy importante reducirlo en su condición humana, para que los bajos instintos sembrados por el régimen en la sociedad hicieran el resto.
La guerra fratricida, el odio la venganza había sido la herencia del régimen, la ciudadanía emigraba y para el gobierno pasaban a ser tránsfugas, asalariados del imperio. Pero ellos ocultaban que eran los lacayos de Castro.
En la aterradora pesadilla había visto, como el primer jefe del proceso gritaba como loco por televisión: “t’as botao”, se definía demagógicamente como marxista, maoísta, revolucionario, bolivariano, palestino, guerrillero, soldado, islamista radical, le pedía a Cristo por su salud, pero era santero y babalao, decía ser hermano de chinos, musulmanes y rusos sin jamás sentir la contradicción. Se jactaba que en las mañanas se levantaba, tomaba un cafecito, fumaba un puro, regalo de Raúl, se ponía el uniforme y salía a expropiar.
No tardó en arruinar todo el aparato productivo, el mercado y alejar indefinidamente las inversiones, hasta convertirnos en un país de víctimas indefensas y despojadas. Donde el cogollo instalado en el Poder Ejecutivo, en la Fiscalía, la Defensoría, en el Tribunal Supremo de Justicia donde hasta magistrados con prontuario existían, y en el Consejo Nacional Electoral, tenía amarrado el control del poder.
El sistema era un nido de corrupción, que no respetaba la ley y donde los enchufados se beneficiaban de los que quedaba, entregando el despojo a la masa oprimida.
El territorio nacional era como una pradera seca, dispuesta a prenderse a la primera chispa, el régimen soberbio se sentía poderoso, no percibía la tensión social ni el conflicto.
En un punto la pesadilla me atormentaba, sudaba en la cama agitado, veía al país a oscuras y sin agua, la gente estaba harta. Los escándalos de corrupción reventaban todos los días, PDVSA y los miles de millones de dólares desaparecidos, las comisiones de las mafias de alimentos y de medicinas, las empresas de maletín, el oro sacado escondido, la masacre de mineros, el lavado de dinero, la gota que rebasó el vaso fue el día que un soldado mató a un adolescente que manifestaba por su derecho a estudiar, ese trágico día los padres acompañaban a sus hijos, el progenitor ciego de dolor le arrebató el fusil y de un solo tiro dejó al soldado largo a largo.
Los demás recuerdos del sueño se sucedieron a una velocidad vertiginosa, la ciudad se convirtió en un caos que se propagó por todo el país… como fuego en tiempo de sequía. La ira contenida explotó como olla de presión incontrolada, que convirtió al pueblo en una masa iracunda que tomaba la justicia por sus manos.
El jefe de la armada ordenó a los soldados salir a la calle y disparar contra la ciudadanía, entonces sucedió lo inesperado, miles de uniformados voltearon el fusil y dispararon contra los opresores.
Los narco soles olieron el peligro y comenzaron una huida desesperada, las pistas de los aeropuertos no se daban a basto con tanto ir y venir de aviones privados, sacando joyas, dinero, maleta y familiares, solos los primeros lo lograron, una turba tomó las pistas, muchos aviones fueron incendiados y explotados con los narcos dentro.
Muchas casas de oficialistas ardieron, la “Catira” fue la primera en caer, pensó pasar desapercibida circulando por el centro de la ciudad, pero su pinta de extranjera la denunció. Los primeros combatientes se escondieron en un bunker, dicen que se suicidaron.
El odiado periodista fue colgado por los pies junto a su mujer, frente a un conocido hotel donde figuraban esculturas de dudosa calidad artística.
Un ministro antiguo encapuchado lo encontraron dentro de una tubería y al que servía de contacto con los islamistas extremistas lo sacaron de una ratonera donde se había escondido, la masa sedienta de justicia los ejecutó.
La gente corría… la sangre corría… me desperté orando por mi país, pedí paz, democracia y respeto a la leyes. Lo primero que vino a mi mente fue el horror de la locura humana y me preguntaba ¿Cómo alcanzar una solución política, constitucional y pacífica?
Pensé que en situaciones de crisis extremas, no hacer nada y esperar que el régimen caiga por sí mismo, no es una opción. El caos no es la salida… la urgencia es inmediata.
Necesitamos asumir el reto histórico y cumplir con el mandato popular de cambio, los demócratas debemos proponer rápidamente la salida correcta y aprobar la ejecución del juicio político que nos permita salir del sátrapa y constituir un gobierno de unidad nacional. Solo así podremos construir el porvenir.
Nelson Castellano-Hernández
Ex Cónsul de Venezuela en París
Presidente de Venezuela-Futura, Francia
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nelsoncastellano@hotmail.com
http://www.noticierodigital.com/2016/03/un-mal-sueno/#more-311931
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cosmonauta
SALUDOS AMIGO JOSE
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Bueno y acertado si señor. Yo que me considero un experto no tengo nada que objetar.
Ayer pasé caminando con mucha prisa por el edificio Dakota donde Mark Chapman asesinó a John Lennon.. Siempre hay gente a todas horas ,siempre están las velas encendidas, y siempre le escriben poemas que dejan en el lugar..Pienso que este rincón de esta inmensa ciudad se ha convertido en un santuario a su memoria. Empero OJO desconozco por completo lo que piensan los vecinos al respecto pues hasta donde yo se nadie se ha preocupado en indagar.
Saludos.
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PopCorn
Muy bastante mucho demasiado interesante su artículo, y extremadamente evocador. Y me ha hecho meditar en unos jóvenes que, en la época del desenfreno y del desparpajo total, donde la juventud sólo pretendía divertirse moviendo las caderas al son de los baquetazos de Deep Purple, los riffs hipnotizantes de Jimmy Hendrix, y otros tantos como The Face, Frank Zappa, etcétera, etcétera, etcétera… pues sencillamente les fueron segadas sus pretensiones de raíz, por la hoz comunista -maldita hoz comunista- dicho sea de paso.
Y me refiero a los jóvenes cubanos, aquéllos que cuando se dejaban el cabello un poco por debajo de la oreja, o usaban el pantalón algo más ceñido que el resto, o simplemente querían ser un pelín irreverentes, como es natural en la juventud, simplemente eran llevados a los campos de reeducación y formación del "hombre nuevo", donde salvajemente les fueron arrancadas de raíz sus pretensiones "anti revolucionarias".
Me gustaría estar en Cuba el 25 de éste mes, donde darán un concierto los Rolling Stones. Más que nada por ver las caras de los pretorianos, que seguramente asistirán, pues aún quedan adoradores del cadáver insepulto. Cuánto no daría yo por ver esas caras!
A los Rolling ya he tenido oportunidad de verlos varias veces. A algunos guardias pretorianos he podido leerles, en éste y otros medios. Pero verlos de cerquita… eso no tendrá precio.
Saludos.
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