ASPA advierte de que en Canarias, menos agricultura y ganadería es más rabo de gato y menos incendios. Es la “preocupante realidad que observamos” y que ha trasladado Miguel Martín, presidente de la Asociación Palmera de Agricultores y Ganaderos, al que acompañaba el gerente de la entidad, Antonio Luis Pérez, a Augusto Hernández, director General de Agricultura del Gobierno de Canarias, en una reunión celebrada en la Delegación de la Consejería en La Palma.
ASPA le trasladó al director general que La Palma debe seguir apostando por la agricultura y la ganadería desde la diversificación de sectores que han mostrado su sostenibilidad como uno de los frenos al avance de la maleza y los incendios, cada vez más virulentos. Para lograr este objetivo, solicitan la mayor implicación de las administraciones dotando a la isla de infraestructuras básicas para el almacenamiento y la distribución del agua de riego o vías de acceso a zonas de cultivo, así como la simplificación de los trámites administrativos para iniciar la actividad siempre contando con las potencialidades de agricultores y ganaderos profesionales pero también los que desarrollan la actividad a tiempo parcial y como complemento de rentas.
En este sentido, señalan que “queda mucho por hacer y la iniciativa privada requiere de la administración pública para mejorar los niveles de autoabastecimiento, la exportación, el empleo y con ello, el PIB insular”.
Las enormes dificultades que encuentran los agricultores para el control de plagas como el picudo en la platanera, así como la proliferación de plagas en otros cultivos, centraron parte de la reunión con demandas para la autorización excepcional de productos o la formación en prácticas agrícolas efectivas que aminoren las pérdidas económicas que estas representan para los productores.
También propusieron al director general la puesta en marcha definitiva del seguro colectivo para un cultivo en expansión como el del aguacate y la coordinación entre administraciones para conseguir que las redes de riego contra incendios, puedan ser utilizadas para el riego de apoyo en invierno a cultivos como el viñedo, tradicionalmente de secano pero fuertemente afectados por la sequía en municipios como Mazo, Fuencaliente, El Paso y la comarca noroeste.
Por último, en la situación actual, demandaron de la Consejería el máximo esfuerzo para obtener el máximo provecho de las ayudas PDR y POSEI o del próximo plan de recuperación económica como consecuencia del COVID-19.
