Salvamento Marítimo socorre a un cayuco a su llegada al puerto de La Restinga - Antonio Sempere - Europa Press. Archivo.
La Red Española de Inmigración y Ayuda al Refugiado ha presentado un recurso especial ante el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) por vulneración de derechos fundamentales, en relación a los derechos de los menores migrantes contra la decisión del Consejo de Gobierno de Canarias de suspender la acogida y dejarla en manos del Estado.
La organización apunta, a través de su secretario general Rafael Escudero, que esta decisión generó “un bloqueo que no busca protegerlos sino usarlos en una suerte de guerra híbrida contra el Estado obviando el ordenamiento jurídico español que establece, como el canario, que las competencias en materia de infancia son exclusivas y automáticas por parte de las comunidades autónomas”.
La Red, que está a favor de procesos y planes de reubicación no solo en Canarias sino también en Ceuta, Melilla, Islas Baleares y otros puntos de presión migratoria por costas del resto del territorio del Estado, señala en un comunicado que la decisión del Gobierno canario supone “dejar en potencia a cientos de menores sin pasar a las manos de quienes tienen las competencias de educación, infancia, servicios sociales, sanidad y otras materias imprescindibles para su interés superior”.
En esa línea detalla que la elección de “qué menor si y qué menor no será acogido por Canarias es discriminatorio al no tener desarrollo normativo que permita conocer qué criterios y elementos lo van a motivar y que hace que existan menores migrantes de primera, los acogidos, y otros de segunda, los que se expulsa y no podrán formar parte de los procesos de integración básicos” –los que el Estatuto de Autonomía Canario y la Constitución Española así como los tratados internacionales les dan derechos automáticos–.
Para la Red, “el presidente de Canarias –Fernando Clavijo– y su consejera –Candelaria Delgado– están transitando de la irregularidad a la prevaricación con enorme velocidad, algo que no vamos a permitir”.
Así apunta que “Canarias tiene un enorme reto con la acogida de menores y las demás comunidades y el propio Estado deben darle respuesta, pero ningún poder del Estado, y menos una comunidad, puede actuar unilateralmente usando a niños como parte de una partida política para torcer el brazo del contrario”.
En su opinión, “los menores y su interés superior se deben garantizar sin acudir al filibusterismo administrativo”.
La Red ha pedido al TSJC que suspenda dicho acuerdo y que, indistintamente, se adopten las medidas en colaboración con la Fiscalía de Menores de Canarias para que los niños pasen a tutela inmediatamente y no se vulnere o presione a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, como así ha sucedido anteriormente.
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malostiempos
No sé cómo calificar lo que escribe esta gente. En principio me parece que resta, no que suma, sin permitir lo que el gobierno de Canarias ha decidido hacer soberanamente buscando una solución, o un paso hacia la solución de este problemón que tiene tintes de todo tipo. Puede ser, como no, un paso equivocado, pero de ahí a que sea una suerte de guerra hibrida, como dicen; o un peloteo político, hay un enorme trecho y una hipótesis que hay que demostrar por aquello de las presunciones. También pudieran permitir que el gobierno lleve a cabo su plan, o colaborar con él aportando soluciones. Como todas las cosas, puede ser una decisión gubernamental fuera de la Ley; equivocada o errónea, pero lo que hace esta asociación no me parece para nada acertado. En primer lugar, el tema es espinosísimo, tiene muchísimas aristas difíciles de pulir abarcando toda la cuestión migratoria, pero donde las gentes y asociaciones nos polarizamos, como es el caso, no siendo objetivos para dar una respuesta a este problema (drama humano, si queremos) que nos sobreviene. Creo que, si digo que nos desborda, no estoy creando alarma social.
Este recurso a la legalidad, parte del presupuesto, y lo dice, de una supuesta prevaricación y nombra a responsables; y utiliza el término “niños”, no la generalidad de “menores” que es lo que procede, y también confunde la condición de migrante con la de refugiado, que es la que no procede, a la vez que no reconoce explícitamente que a ningún migrante aquí se le niega la atención básica que necesita (en vulgaridad: “cama y comida”). Toda esta queja pobremente argumentada es por la futura exigencia gubernamental de identificación del migrante; una cuestión también básica para empezar a atender a esta persona que llega después de un complicado y peligroso viaje al encuentro de nuestras islas. ….. Este escrito de antemano ya condena a los políticos. A mí me parece una crítica de salón y poco atinada, como que un poco critica por criticar, por decir algo, aun dejando muchos flecos por detrás. Es un problema de medio mundo, pero que aquí incide con mayor intensidad por la condición de insularidad, lo que no se refleja en esta exposición, adoleciendo de una mínima comprensión hacia el por qué se produce todo este fenómeno, del que estoy seguro que admite otros muchos puntos de vista, aparte de la supuesta vulneración de derechos humanos que esta gente ya cree que se está produciendo.
Llegar a Canarias es llegar a territorio nacional, es saltarse dos fronteras, por lo que la responsabilidad de gestionar esta recepción es de todo el Estado, y no se critica que no haya un mecanismo de país; uniforme o universal para afrontarlo; y una forma y lugar donde atenderlo; solo se critica y se juzga la acción emprendida por el gobierno de Canarias, atribuyéndole ya y con terminología despectiva lo de guerra hibrida. Me parece muy injustificado pese a sus citas legales, que es el único apoyo que tienen, nunca un intentar solucionar con amplitud todo lo que está pasando. Tampoco critica con nombre propio la acción del presidente del Gobierno hace unos días, que nos va a hacer creer que a partir de su visita y con esos acuerdos con países emisores de estos migrantes, va a desaparecer de facto todo este problema.
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Fidel Castro
… los menores y las menoras …
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