Placas solares en el techo de Baltavida para reducir el consumo de energía en estas instalaciones. Archivo.
El Ayuntamiento de Breña Alta ha puesto en marcha un sistema de placas solares en Baltavida para calentar el agua y reducir el consumo de energía en este complejo deportivo. Las placas se han instalado con la financiación del II Plan E y permitirán reducir la emisión de gases con efecto invernadero y optimizar mejor la energía que se utiliza en un complejo que recibe diariamente la visita de 500 personas.
En total, se han instalado 186 m2 de placas solares térmicas que absorben la energía del sol transformándola en calor. Este calor se emplea para climatizar las piscinas o para calentar el agua de las duchas. Un sistema automático selecciona la mejor opción en cada momento para conseguir el máximo rendimiento.
Esta instalación se ha concluido y puesto en marcha hace unos días y se prevé que en los próximos meses se obtengan datos de la rentabilidad obtenida y de este modo también ayude a consolidar un proyecto tan importante para la sociedad insular.
Baltavida en estos momento permite mejorar la calidad de vida a personas con discapacidad del Centro Ocupacional Garehagua de Villa de Mazo, Centro Ocupacional de la Villa de Breña Alta, aulas en clave A y B del IES José María Pérez Pulido de lo Llanos de Aridane, El Dorador de Mirca, Residencia de Triana de Los Llanos de Aridane y diferentes respiros familiares a través de la Plataforma Integral de personas con discapacidad de La Palma, etc…
También son usuarios de este complejo, colectivos de mayores de los Ayuntamientos de El Paso, Puntallana y S/C de La Palma , diferentes centros escolares de prácticamente toda la isla, asociaciones deportivas de toda la isla, seguridad y protección civil y usuarios individuales. A fecha de hoy hay más de mil abonados de toda la isla utilizan estás instalaciones que llevan abiertas desde octubre del 2002 y que cuentan con una plantilla de 20 personas.
Otra iniciativa que se está estudiando para llevarla a efecto en el próximo año consiste en realizar un estudio de las estrategias a seguir para disminuir el consumo de energía a la vez que se mejora el servicio que presta la instalación. Esto se consigue mejorando la reanulación automática, empleando las técnicas más modernas y mediante un seguimiento de la instalación que permitirá detectar las deficiencias de funcionamiento y optimizarlas. Las variaciones de temperatura de unas zonas a otras y de unas horas a otras producen falta de confort y mayor consumo de energía.
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