El cura Rubén Gallego se queda en Barlovento

El cura Rubén Gallego se queda en Barlovento, si bien el Obispo tenía previsto su traslado a tierras castellanas, de donde procede.

El apoyo mostrado por los vecinos no solo de Barlovento sino también de Garafía, defendiendo su continuidad en el municipio norteño, ha hecho finalmente que el clérigo pueda seguir en la Isla Bonita realizando su labor pastoral.

Los vecinos, incluso, llegaron a concentrarse delante de la iglesia de Nuestra Señora del Rosario, a raíz de la visita del Obispo en julio con motivo de la confirmación de jóvenes barloventeros, para pedirle que no se hiciera efectivo el traslado de este cura de 40 años que ha conquistado el corazón de los vecinos, a los que ha aportado alegría y ganas de acudir a la Iglesia, algo que en los tiempos que corren no es habitual.

Otros párrocos de la isla también han mediado para evitar la marcha del clérigo que, defienden los vecinos, además de desempeñar su tarea pastoral, contribuye a dinamizar la vida de la comunidad local, especialmente de la gente joven y los mayores.

La noticia, que ha confirmado el propio cura a este periódico, la dio conocer en una de sus misas recientes en Barlovento, algo que ha llenado de satisfacción a sus feligreses, que empiezan a mostrar su satisfacción en las redes sociales. Al final su lucha, que generó una movilización vecinal y social sin precedentes en este municipio, ha tenido un buen final y Rubén, el cura mediático al que le gusta salir, participar en fiestas o hacer deporte, se queda.