Reunión con Ana de León Expósito.
El alcalde de Barlovento, Jacob Qadri, ha mantenido una reunión con la directora insular de la Administración General del Estado, AGE, en La Palma, Ana de León, en la que le ha manifestado su preocupación tras los robos que se han sucedido durante las últimas semanas. En concreto, en el Ayuntamiento, así como en casas particulares y en una empresa del municipio.
Qadri explica que esta reunión se ha celebrado con carácter urgente porque “era necesario poner en conocimiento de la directora estos hechos”.
Además, ha señalado que ambos comparten su preocupación por los hurtos que se han sufrido en Barlovento, “por lo que hemos acordado celebrar la semana que viene una Junta de Seguridad Municipal en la que estén presentes todas las fuerzas de seguridad de La Palma: Guardia Civil, Policía Local, Guardia Civil de Tráfico, así como miembros de la Delegación del Gobierno porque debemos atajar esta situación cuanto antes”.
Desde el Ayuntamiento han mostrado su satisfacción después de que ya se haya procedido a la detención de algunas de las personas que han participado en estos robos, y señalan que “compartimos la necesidad dotar de más medios a la comarca noreste de la isla para garantizar la seguridad y la tranquilidad de todos los barloventeros. No podemos olvidar que nuestro municipio cuenta con un alto número de personas mayores que no pueden vivir en un clima de inseguridad, ya que son personas muy sensibles con este tema”, señalan desde el consistorio.
Por último, el alcalde ha querido agradecer a la directora insular de la Administración General del Estado la voluntad de resolver esta cuestión cuanto antes porque “solo trabajando todas las administraciones juntas conseguiremos velar por la seguridad de nuestros vecinos”.
Archivado en:
Más información
Últimas noticias
Lo último en blogs
open
Si Jacob si lo sabe usted y todo el pueblo gente sin carnet,sin ITV,sin seguro y lo que hacen es mirar para otro lado de vergüenza
Leer más
open
Sr Jacob. La solución la tiene usted.
Alos residentes toda la vida en el municipio solo impuestos. Residentes en cuevas y viviendas ocupadas puestos de trabajo . Los votos son los votos
Leer más
bajamelajaula
El turista viene a disfrutar ,de nuestra isla,senderos y gastronomía,como no te derivas al efecto llamada de venezolanos,colombianos y demás seres innombrables que han venido a conseguir una paguita,comida por la cara y menos trabajar vivir del cuento,Ahora cuando ven que no hay trabajo a robar que es lo más fácil,aquí se empadrona a cualquier bicho viviente,el asunto es a ver si me pueden votar,ahora a quejarse a la marea,y a poner turnos de 24 horas a los policías,y no horario de oficina.
Leer más
En un enclave turístico pienso que la delincuencia está siempre presente porque una cosa llama a la otra. Antes la isla era tranquila, pero desde que la pusieron en el mapa para atraer al turismo se acabó el invento, todo se fue abajo. Por donde pasa el turismo no vuelve a crecer jamás la hierba, solo sigue creciendo el rabogato y los gérmenes patógenos.
Antes venía algún que otro turista de calidad a la isla porque La Palma era tranquila, segura, paradisíaca, etc.
Luego esos turistas empezaron a comprar tierras e inmuebles palmeros a bajo precio para quedarse a residir aquí de forma permanente. Con el tiempo algunos de esos residentes acondicionaron pajeros, fabricaron chalets, viviendas, para alquilárselos a otros turistas de calidad y así ese turismo fue aumentando poco a poco. Se pasó del alquiler de pisos vacíos al alquiler de pisos amueblados.
Más tarde algunos caciques y algunos ricos vieron que ahí podía haber negocio y se dedicaron, con la ayuda de algunos políticos, a construir hoteles, casas, a enfocar la isla al turismo, a promocionar La Palma como un destino turístico. Gran parte del pastel se va a Europa y aquí llegan las migajas.
Cuando la isla se convirtió en una atracción turística, muchos turistas de calidad se fueron a otros destinos más amigables, más baratos y menos masificados. El turista de calidad huye de los lugares turísticos porque en un sitio enfocado al turismo no se explota el sector turístico, se termina explotando directamente al turista.
Como los turistas que tienen dinero cada día se acercan menos por la zona, entonces no queda otra que atraer al turismo de masas, al turismo de cantidad, para que sigan llenos los hoteles. Aparece la figura del turista de fin de semana que viene a la isla con el paquete completo por menos de 50 €, el turista de bocadillo de chorizo, el que se tira por los balcones, el que viene a buscar pelea y romper cosas, el que viene a emborracharse y consumir drogas.
Entonces, con el turismo de cantidad vienen los inmigrantes de todas partes del mundo a buscar trabajo. Los extranjeros residentes despiden a los empleados palmeros y contratan a inmigrantes de sus mismos países de origen, si acaso dejan a algún palmero para tenerlo explotado trabajando en negro en el jardín, o con un contrato de trabajo precario, más que nada para usarlo como profesor gratuito del idioma español.
El turismo de masas demanda drogas, alcohol, prostitución y entonces llegan las mafias y los peores delincuentes del planeta a ponerse las botas en la isla. Todo se llena de delincuentes nacionales e internacionales.
Como la población mileurista residente nativa de a pie no llega a fin de mes porque la cesta de la compra es cada día más cara a causa de la inflación galopante irreversible generada por el turismo, como el alquiler de las viviendas es cada día más caro, como muchos palmeros terminan en la lista del paro, entonces termina apareciendo la figura del robagallinas, o sea, gente que roba para no morirse de hambre ya que no tiene medios económicos ni para adquirir una patera. Algunos de estos mileuristas come sardinas enlatadas seguirán vistiéndose con ropa cara para aparentar en su pueblo que son miembros de la clase media.
Mucha gente que ahora mismo está trabajando con un contrato temporal precario en el sector del turismo y aplaudiendo con las orejas cuando recibe el sueldo miserable a fin de mes, esa gente que defiende el turismo a capa y espada a cambio de una migaja, terminará pronto en el paro, ahora con el coronavirus más todavía y entonces, cada día que amanece, el número de robagallinas crece.
Con el tiempo igual que en Venezuela, todas las casas con barrotes en las puertas y las ventanas.
¡A disfrutar del turismo, de lo votado y de lo abstenido!
Leer más