La Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias, a través de la Dirección General de Agricultura, ha presentado hoy, miércoles 21 de abril, un estudio diagnóstico sobre la viticultura en Canarias que tiene como objetivo valorar la estructura productiva del sector de la viticultura en las islas para mejorar su rentabilidad y sostenibilidad.
Este informe, que aplica análisis DAFO por islas, estudia los factores que afectan a la producción de uva para vinificación en cada zona, permitiendo así el impulso de políticas específicas de apoyo que compensen las debilidades y amenazas detectadas. En la sesión de hoy del Consejo de la Viña y el Vino de Canarias, órgano consultivo del Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria (ICCA), el director general de Agricultura, Augusto Hernández, expuso a los consejos reguladores, cabildos y organizaciones profesionales agrarias la relevancia de un documento que determina aspectos como los costes de producción y precio de la uva; la evolución de las producciones por islas; el tamaño medio de las parcelas; o la incidencia de la pandemia en el sector, entre otros.
El estudio concluye que en Canarias coexisten dos tipos de viticultura, una más profesionalizada y otra más artesanal o tradicional, y que las áreas vitícolas son muy diferentes en las técnicas de cultivo. En relación a la estructura de las explotaciones de la viña destaca que se trata de extensiones de cultivo de pequeñas dimensiones, con diferencias entre islas que se pormenorizan en el informe. También, se infiere que, hasta el momento, gran parte de la producción de uva para vino en las islas se ha mantenido gracias a los apoyos públicos y, cada euro invertido en el sector se multiplica como consecuencia del valor añadido del vino, generando riqueza y empleo.
Por otra parte, el estudio señala que la situación del mercado de la uva para vino de calidad durante la pandemia no ha afectado a los precios de la uva, aumentando la distribución del comercio al por menor y por internet. El Covid-19 ha supuesto un aumento en la digitalización de algunas tareas y en las ventas a domicilio del vino canario.
La consejera de Agricultura, Ganadería y Pesca, Alicia Vanoostende, ha explicado que “este trabajo multidisciplinar permitirá conocer más en profundidad la problemática y las fortalezas actuales del sector para aplicar medidas específicas que repercutan en su mejora y desarrollo; las conclusiones de este diagnóstico se tendrán en cuenta para su inclusión en el Plan de la Viña de este año”.
baifito
Para hacer un estudio de diagnóstico de la viña no hacía falta tanta parafernalia (hasta drones has usado para analizar el estado de los viñedos). Hay zonas de La Palma (pero también en otras islas) donde prácticamente todo era viña hace unos años y actualmente no quedan ni las paredes. Y la perspectiva no es nada halagüeña. El Consejo regulador de La Palma tiene los días contados, junto con muchas de las cooperativas, empezando por Llanovid, que ha resistido a base de préstamos impagables y ayudas públicas a fondo perdido. Quedarán las bodegas particulares, siempre que sus dueños tengan otros medios económicos, si no ni esas…
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Pinillero
La producción de uva para vino se ha mantenido gracias al apoyo público. A quien coño le pagan por decir esta tontería. Por lo menos aquí en fuencaliente, la producción de uva para vino, es una auténtica osadía. Tenemos unos dirigentes tanto en el cabildo como en el consejo regulador, que se embolsan más de 1.600 euros al mes, y me quedo corto, que llevan desde el mes de junio de 2020 hablando de aguas para las viñas, de subvenciones para la Red de riego, de ayuda al sector, de embalses, de todo menos realidad. Eso sí, vaya usted por el consejo regulador, y las viñas de malvasía de llanos negros, sus caldos, no los verá en teneguia. Les informan donde y a quien comprar tierras, a 6 euros, metro, y al final, los buenos malvasías saldrán de fuencaliente, pero la etiqueta será de bodegas del Norte. Bravo, consejo, lo siguiente será que también ustedes cambien de domicilio.
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