El Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma ya es propietario de El Electrón, la central hidroeléctrica más antigua de Canarias

El Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma ya es propietario de la primera central hidroeléctrica de Canarias, conocida como El Electrón, y por la que la capital palmera se convirtió en la primera ciudad de Canarias en ofrecer servicio de alumbrado público con electricidad en 1893.

Tras la firma ante notario por parte de Saúl Barrio, administrador y director de Generación Endesa en Canarias, y el alcalde de Santa Cruz de La Palma, Juan José Neris, la empresa dona al municipio este inmueble construido en el Barranco del Río, que estuvo en funcionamiento desde 1893 hasta 1954.

Una rúbrica en la que también estuvo presente el primer teniente de alcalde, Juan José Cabrera.

Esta firma se lleva a cabo después de que el Pleno de la Corporación municipal aceptase por unanimidad el pasado 16 de septiembre de 2021, aceptar la donación efectuada por Unión Eléctrica de Canarias Generación S.A.U, y por tanto, facultando al máximo representante del Ayuntamiento a la firma tanto de la escritura de propiedad de la finca, así como los trámites administrativos y legales sean necesarios para hacer efectiva la donación.

El alcalde, Juan José Neris, considera que con esta donación, “la ciudad es un poco más dueña de su historia y custodia de episodios de vital importancia para el municipio, como fue el hecho de poder ofrecer a su población en 1893 un servicio de alumbrado público con energía eléctrica, sustituyendo a las lámparas de petróleo y sus derivados”.

Este hecho la convirtió en la primera ciudad de toda Canarias en  “adelantarse a su época. “Ahora, junto al actual equipo de Gobierno, estudiará todas las posibilidades de uso cultural, educativo y turístico para el conocimiento y disfrute de la población y de quienes visitan la isla de La Palma”, apunta Neris.

En este sentido, el alcalde recuerda que desde hace más de una década se iniciaron los contactos entre el Consistorio y Endesa, un proceso largo, complejo y que ha requerido de la participación de numerosas personas, entre ellas, de Ursina González de Ara Parrilla, anterior Secretaria del Ayuntamiento, como asesora administrativa y legal en dicho procedimiento, así como de Mauro Fernández,  exdelegado de Unelco en La Palma.

El director de Generación Endesa en Canarias, Saúl Barrio, ha manifestado que “para Endesa es un honor hacer esta donación y que un bien como la central hidroeléctrica El Electrón, que tanto simbolismo tiene para Isla, pase a manos del Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma y, por consiguiente, sea  patrimonio de todos los palmeros. Además, estamos muy satisfechos con la visión cultural que piensa dársele convirtiendo las instalaciones y sus alrededores en un museo homenaje a la producción de electricidad usando el salto del agua. Un punto turístico más para la Isla y un referente a la Energía”.

La concejala de Cultura, Melissa Hernández, ha destacado el trabajo previo realizado hasta la fecha para que hoy la rúbrica de la cesión sea una realidad.

En este sentido, señala que los contactos con Endesa “se intensificaron a partir de diciembre de 2019, con la organización de una jornada cultural denominada ‘El Electrón’, en la que se implicaron numerosas entidades y técnicos con el objeto de poner en valor un hecho histórico que cambió la historia del municipio”, a quienes agradece también su dedicación.

A partir de esta fecha, “el equipo de Gobierno aceleró el contacto y las relaciones administrativas con Endesa para que, finalmente, el Ayuntamiento pueda ser el propietario de este espacio”.

Neris firma el documento de donación de El Electrón por parte de Endesa.

Apuntes, ubicación e historia de la central hidroeléctrica El Electrón 

Actualmente, el edificio donde se concentraba el trabajo humano de El Electrón se encuentra en desuso y enclavado en un paraje natural de gran valor como es el Parque Natural de Las Nieves, declarado en 1987. Se trata de la primera central eléctrica de Canarias que empezó a funcionar cinco años después de que se electrificara la ciudad de Nueva York.

Las instalaciones del Electrón supusieron una revolución tecnológica en Canarias a finales del siglo XIX y situaron a Santa Cruz de La Palma como ciudad de vanguardia, puesto que un salto de agua y unas turbinas permitieron llevar el alumbrado público a las calles de la capital palmera.

El origen de esta central hidroeléctrica se encuentra en la iniciativa de un grupo de comerciantes y profesionales liberales de la capital palmera, interesados en sustituir el alumbrado público de la ciudad -suministrado por aquel entonces por lámparas de petróleo y derivados- por lámparas eléctricas.

Para ello, en 1892 se constituyó una sociedad anónima integrada por comerciantes, propietarios y profesiones liberales cuya primera junta directiva conformaron Pedro Hernández Fierro (director), Félix Casanova y Soler (Tesorero), Fernando Arozena Henríquez (contador), Federico López Abreu, Blas Hernández Carmona, Domingo Hernández, Fierro, Silvestre Carillo Massieu, en calidad de vocales, y José Arozena Henríquez (secretario).

Con el apoyo del Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma, que autorizó el uso de la fuerz del agua del abasto público y que luego contrató el suministro, y de la Sociedad Hidráulica la Dehesa de La Encarnación, responsable de las explotaciones hídricas, los miembros de El Electrón estipularon las obras de ingeniería.

El 31 de diciembre de 1893, a las 12 de la noche, la luz eléctrica llegó a la calle O`Daly (calle Real) de Santa Cruz de La Palma.  Fue la primera ciudad de Canarias y la sexta del mundo, después de París, Nueva York, Londres, Barcelona y Madrid, que pudo apagar los faroles de vela. Este acontecimiento supuso un importante cambio en la política energética de la Isla.