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Tazacorte

El gobierno auditará las cuentas desde 2007 hasta junio de 2011 por las irregularidades detectadas

  • La alcaldesa dice que antes de 2009 no existía contabilidad ni facturas
  • "La falta de recursos obliga a hacer malabarismos por cubrir las necesidades"

Fachada del Ayuntamiento de Tazacorte.

El Pleno del Ayuntamiento de Tazacorte acordó en un pleno reciente solicitar una auditoría de los ejercicios contables de 2007 a 2010 y la primera mitad de 2011, como punto de partida de la nueva gestión municipal aplicada por el
grupo de gobierno conformado por Partido Socialista y Partido Popular.

La decisión, que no supondrá coste alguno para la Administración local al ser ejecutada directamente por la Audiencia de Cuentas de Canarias, como ya se hizo en el año 2006 con un resultado de todos conocido, se justifica, según aclara la alcaldesa, Carmen Acosta, por la "situación de desamparo que soporta nuestra administración, en donde la ausencia total de recursos financieros obliga a la realización de todo tipo de malabarismos para poder cubrir la necesidades diarias del consistorio y de la población más necesitada, incluso con las compras de emergencia social".

A esta situación se ha llegado, afirma la alcaldesa, por la "nefasta e irresponsable gestión realizada por UB-CC en sus 18 años de mandato", hasta el punto de que "la deuda municipal posiblemente sea mayor que el presupuesto que tiene este ayuntamiento para todo un año". "Lo triste, añade, es que "no sabemos con exactitud hasta donde llega esa deuda porque con anterioridad al año 2009 la contabilidad no existía y menos las facturas".

Carmen Acosta considera que "esto nos obliga a solicitar la ayuda de la Audiencia de Cuentas para que analice con profundidad los que se hizo desde 2007, desde los pagos a los contratos y a cualquier movimiento administrativo
registrado o no en el ayuntamiento. Es nuestro compromiso con la sociedad de Tazacorte, la máxima transparencia pública, después de tantos años en los que ni siquiera se hizo una depuración contable".

El nuevo equipo, continúa Carmen Acosta, no puede partir de cero ante estas circunstancias, por lo que "es necesario conocer la realidad para poder saber a lo que nos enfrentamos y el nivel de servicios que podemos llevar a cabo".

Para conocimiento público de parte de esa realidad, el grupo de gobierno ha remitido la argumentación expuesta por el concejal de Economía y Hacienda, Feliciano
Rodríguez, en el Pleno celebrado el pasado martes. En
ella se explican, asegura la alcaldesa, algunos de los "desastres" contables detectados hasta ahora.

Exposición concejal de Hacienda durante la aprobación de la liquidación del presupuesto de de 2010:

"El grupo de gobierno presentó una liquidación con remanente de Tesorería negativo, que "incumple el plan de saneamiento económico financiero que fue aprobado por el ayuntamiento, gracias al cual se le concedió un préstamo de 900.000 euros para financiar números rojos.

No se tuvieron en cuenta los informes de Intervención que
advertían del necesario recorte de gastos y la reducción de
contratos para ajustarse a las recomendaciones del Fondo de Financiación Municipal.

Se informa de la presencia de derechos pendientes de cobro que ya han prescrito por no iniciarse los trámites para cobrarles. Se calcula la pérdida irremediable de más de 400.000 euros. Era un dinero que podía haber entrado en las arcas municipales.

Desde el año 2000 no se han cobrado más de 900.000 euros y sólo en los dos últimos años se suman de 300.000 euros sin cobrar, pese a tener un convenio suscrito con una empresa (Grecasa) para cobrar tasas e impuestos por vía ejecutiva.

Esta situación ha provocado que en los últimos dos ejercicios, al no llegar a los índices de recaudación exigidos por el Fondo Canario de Financiación Municipal, se nos penalizara con la pérdida del 10% de este Fondo. Esa cantidad asciende a otros 180.000 euros perdidos.

El gobierno anterior "despilfarró" el dinero municipal, gastando más de lo debido sin recaudar lo necesario. Eso se califica como una pésima gestión municipal y una grave
irresponsabilidad.

Los informes de Intervención Municipal advertían de las
consecuencias de la masiva contratación de personal. Pese a eso, se permitieron gastos insostenibles para nóminas. Sólo en el pasado mes de mayo (mes electoral) se gastaron 268.300 euros (44,6 millones de las antiguas pesetas) para contratar a personal, sin contar los funcionarios, el personal laboral fijo, los convenios y eventual de Servicios Sociales.

Para ejecutar esa acción, el anterior alcalde desestimó por
decreto un reparo de ilegalidad de Intervención haciendo un
levantamiento de ese reparo y justificando lo injustificable. · ¿Y ahora qué?, se preguntó el concejal de Hacienda. Ahora esto supone que no hay dinero ni para las ayudas de emergencia.

Al respecto, este grupo de Gobierno afirma que en esta nueva etapa se van a hacer las cosas mejor, aunque no será nada fácil sin recursos económicos. Pero de forma contundente, decimos que "no existe responsabilidad de este nuevo grupo de Gobierno en la aprobación de la liquidación que nos hemos encontrado. Ninguna responsabilidad".

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