A buen entendedor, pocas palabras bastan

En el verano del año pasado se alargó la primavera, el ambiente se impregnó de un agradable olor a flores y de promesas de que la situación en Canarias iría a mejor. El regocijo fue tal que hubo hasta quien dijo “adóbame esos candiles”.

Tan encandilado acabó el militante Sancho con el final de la historia que D. Quijote acaba de contar que no pudo por menos de suscribir en el acto el sueño hecho verdad con un dicho contundente, breve y certero: “ Y barras derechas”, es decir sin engaño, porque “corta vida, corta cuenta” y “lo que no debe ser, no debe ser”. Pero la realidad se torna gris, ya nada queda de aquel espíritu. Por desgracia no hay que ser optimista antropológico, vienen malos tiempos. Corrobora estos asertos el dicho “al cuerdo engañan una vez, al loco dos, y al necio tres”. Pero el militante Sancho no es loco ni necio.

Tampoco el militante Sancho es un adulador que le guste “bailar el agua delante” porque el agua se baila por alguna razón, porque bailar sin son o es gran fuerza o gran afición”, dice el refranero popular, que del agua asegura que “cría ranas y pudre la madera”, preguntando con intención malévola “Con el cuerpo, ¿qué no hiciera?.

Y ya que estamos impregnados de dichos, refranes y sentencias del ingenioso hidalgo de La Mancha no estaría de más decir lo siguiente:

1.- Cosa pasadas es cosa juzgada: Simpatizar con una ideología, e incluso militar en ella no implica ceguera absoluta porque “con el amigo hasta la puerta del infierno, pero no hasta dentro”. Muchos pensamos y no lo decimos porque es políticamente incorrecto que no nos gusta que nuestras hijas o nietas lleguen solas y borrachas a casa; ni por supuesto enfermas; y que no envilece al hombre, sino que lo agranda pedir perdón por los errores cometidos, pero “la verdad es verde, y quien la dice, se pierde” porque famoso es un tal Perogrullo que a la mano cerrada llamaba puño. En cualquier caso, “A lo hecho pecho”, dice un refrán paralelo de igual significado, es decir, “a lo hecho no hay remedio”, y a lo por hacer, consejo”, pues la experiencia debe servir para no caer en los mismos errores.

2.- A buen servicio mal galardón: El dicho hace referencia a la conducta de quien paga con ingratitud los favores recibidos. Este comportamiento tiene su contrario en una máxima popular, según la cual “el agradecido no olvida el bien recibido”. Todavía se desconoce objetivamente hablando las razones por las que se cesó a la anterior Consejera de Sanidad, aunque en los mentideros políticos se sabe perfectamente las verdaderas y poderosas razones de tal cese. No está de más recordar que la lealtad entre compañeros dentro de una organización política debería ser fundamental, y los reajustes por estrategias o intereses políticos deberían producirse hacia arriba y no hacia abajo. Si no hay corrupción o dudosa moral ni tampoco gestión negligente demostrable, a otro perro con ese hueso, que yo roído lo tengo, respondió otro militante ventero. ¡Como si yo no supiese cuántas son cinco y adónde me aprieta el zapato! No piense vuestra merced darme papilla porque por Dios que no soy nada blanco, es decir bobo o tonto.

*Abogado y Doctor en Derecho Administrativo.