Mitzy Capriles confía en que las cosas en Venezuela puedan cambiar

Mitzy Capriles, la esposa del alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, uno de los principales líderes de la oposición venezolana que se encuentra en arresto domiciliario desde hace un año y un mes, visitó este viernes la Isla, invitada por el PP, para dar a conocer la difícil situación que atraviesa su país, la tierra de muchos palmeros, con problemas de falta de alimentos, de medicamentos, de inseguridad, y también para denunciar la existencia de presos políticos como lo es su propio marido.

Mitzy agradeció el apoyo y el cariño de los canarios en unos momentos complicados pues manifestó que  "Venezuela pasa por una crisis humanitaria terrible, pasa por momentos política, social y espiritualmente que son los más duros que hemos vivido. Cuando me preguntan qué vengo a buscar, digo que a refrendar la solidaridad de todos los canarios que comprenden el horror que estamos viviendo en nuestro país. Nos dan fuerza y valentía moral para recobrar para Venezuela la democracia perdida".

Preguntada por cómo se puede revertir la situación en Venezuela, dijo que "el 6 de diciembre vimos una luz enorme y gigantesca en el túnel, era impensable ganar la Asamblea Nacional y bajo el paraguas de la Mesa de la Unidad Democrática, con 27 instituciones y partidos, supimos estar unidos".

"Tengan la seguridad en el mundo entero -dijo- de que en Venezuela hay líderes suficientemente preparados para avanzar en el cambio democrático que es la esperanza nuestra. Tenemos la esperanza de que Nicolás Maduro entienda que durante 17 años el modelo económico, social y político fracasó completamente, ya no hay vuelta atrás. Lo ideal es que lo llegara a entender y que el cambio se haga bajo la figura más ajustada a la Constitución Nacional que contempla la salida de un presidente de la República cuando no marca los pasos para que los venezolanos tengan resueltas por los menos sus necesidades elementales más sentidas. Vamos a lograrlo y espero que no haya que esperar a que las cosas vayan a mayores".

Con respeto a su marido, Antonio Ledezma, recordó que lleva un año y un mes preso y "no sabemos por qué. Se le acusa de conspiración; en Venezuela el Gobierno llama conspirar a lo que estoy haciendo yo ahora mismo aquí. Al final habrán represalias, no nos importa y si es necesario ir al fin del mundo iremos para ganar esta lucha".