El Ayuntamiento agradece el compromiso colectivo que hizo "inolvidable" la LXX Bajada de la Virgen

Santa Cruz de La Palma vivió con intensidad y emoción el esperado regreso de las Fiestas Lustrales, una celebración que, tras una década, volvió a unir a ciudadanía, cuerpos de seguridad, voluntariado e instituciones en un mes lleno de tradición, cultura y sentimiento compartido.

El Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma expresa en un comunicado su agradecimiento a todas las personas y entidades que han hecho posible el desarrollo de una nueva edición de la Bajada de la Virgen, una celebración que, después de diez años, ha demostrado seguir en la memoria colectiva y en el corazón de toda la isla.

En primer lugar, reconoce la labor incansable de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, así como la entrega de los voluntarios y voluntarias, que ofrecieron su tiempo y esfuerzo con generosidad para que la fiesta transcurriese con orden, seguridad y esplendor. “Su implicación ha sido clave para mantener el carácter único de este acontecimiento”. También destaca el papel de los ciudadanos y ciudadanas palmeros, “verdaderos protagonistas, que con entusiasmo y participación activa han hecho posible que la Bajada de la Virgen de las Nieves siga intacta en esencia y belleza”.

El alcalde, Asier Antona, expresa que “esta Bajada ha sido el reflejo más fiel del alma de nuestro pueblo. Hemos vivido días de reencuentros, de tradición, de orgullo y emoción compartida. Gracias a todas las personas que han hecho posible que esta edición sea recordada como una de las más especiales. La colaboración entre instituciones, colectivos, fuerzas de seguridad y ciudadanía ha sido ejemplar. Santa Cruz de La Palma ha demostrado, una vez más, que cuando caminamos unidos, no hay desafío que no podamos superar”.

Asimismo, el alcalde ha querido destacar y agradecer de forma especial el compromiso, la dedicación y el esfuerzo de todos los concejales del Ayuntamiento, que han trabajado intensamente durante meses para garantizar el éxito de cada acto y contribuir, desde sus respectivas áreas, al desarrollo impecable de esta edición tan simbólica para la ciudad y la isla.

El consistorio muestra también su gratitud por el respaldo ofrecido por parte de todas las instituciones públicas, entidades privadas y colectivos culturales que han contribuido a la organización de cada uno de los actos, así como a los responsables de los mismos. “Sin su implicación, coordinación y trabajo constante, no habría sido posible alcanzar el brillante resultado de esta celebración tan esperada y significativa”.

“La Bajada de la Virgen no solo ha sido una celebración religiosa y cultural, ha sido también una muestra del compromiso, la identidad y la fuerza de un pueblo que mira por sus raíces. Santa Cruz de La Palma se despide de la LXX Bajada de la Virgen hasta el año 2030 con orgullo de haber estado a la altura de la historia y con la mirada puesta en el próximo reencuentro con su patrona, la Virgen de las Nieves”.