El Centro de Iniciativas Turísticas Tedote ha elaborado un proyecto de divulgación cultural de valor etnográfico, “La huella histórica y social del gofio, que propone un viaje en el tiempo con visitas educativas para acercar a los escolares la historia de este producto propio de la gastronomía insular.
El programa se ha trasladado a la comunidad educativa, con especial interés en el ciclo de Primaria de los colegios palmeros, a fin de que puedan incorporar a sus programas la visita al Museo de Interpretación del Gofio, en el barrio garafiano de Las Tricias.
El presidente del Centro de Iniciativas Turísticas Tedote, Óscar León, destacó el interés de la entidad, que agrupa a más de 200 empresas palmeras, por “establecer programas y proyectos que permitan una implicación directa de la patronal turística con la sociedad, especialmente con la comunidad educativa, con la que ya han colaborado en años anteriores en la ejecución de proyectos de concienciación de entre los que destaca, Turismo Somos Todos”.
En relación con esa iniciativa, recordó que “terminada ya su tercera edición esperamos nos sea concedida nuevamente ya que, a través del mismo, se ha trasmitido a cientos de estudiantes y a varios colectivos profesionales y sociales, la importancia de la actitud receptiva a los miles de turistas que cada año escogen la Isla como destino vacacional”.
El gerente del CIT Tedote, Jorge Miranda, explicó que “se trataría de poner en valor el proceso de elaboración del gofio de manera artesanal, desde la siembra hasta la mesa. Fomentando el aprendizaje sobre la importancia del gofio para el pueblo canario desde los primeros pobladores, pasando por nuestros abuelos y llegando a la cultura gastronómica actual, y destacando, al mismo tiempo, sus valores nutritivos”.
El equipo técnico que ha diseñado el proyecto, destaca que el Museo del Migo ofrece una visita guiada amena, adaptada a los diferentes niveles educativos y edades de los visitantes. El conjunto arquitectónico del museo alberga la estructura y maquinaria original del molino de Las Tricias, en funcionamiento hasta el año 1954, cuenta además con una era y un amplio espacio con recursos didácticos, gráficos, audiovisuales y sensoriales.
Paneles expositivos con infografías en tres idiomas, herramientas de trabajo y útiles originales de la época hechos por manos artesanas, elementos etnográficos relacionados con la elaboración y el consumo del gofio, además de un molino de mano para la demostración en vivo del proceso de molienda y una maqueta del molino de Las Tricias, completan la oferta de la instalación.
