Barlovento solicita la reversión de los terrenos del Centro de Interpretación del Mundo Rural para devolverlo a los vecinos si no se define su uso

El Ayuntamiento de Barlovento ha acordado solicitar al Cabildo Insular la reversión de los terrenos cedidos en 1998 para la construcción del Centro de Interpretación del Mundo Rural de La Laguna de Barlovento, un proyecto inacabado y que se encuentra en estado de abandono desde hace años, porque considera prioritario desarrollar la zona para generar economía y puestos de trabajo y también porque el acuerdo de cesión que hizo en su día en el procomún vecinal quedó anulado hace tiempo por los dos condicionantes que se establecieron para el mismo.

El alcalde, Jacob Qadri, explicó a El Apurón que el acuerdo de cesión que se realizó en aquella época era muy básico, donde se pusieron dos condiciones : si el objetivo por el cual se cedían los terrenos no se llevaba a cabo o se modificaba, los terrenos revertían al ayuntamiento, o si al pasar cinco años no ejecutaba el proyecto también revertían al consistorio. De modo que, indicó Qadri, el acuerdo de cesión estaba ya anulado.

Además ha indicado que el documento de cesión de terrenos que existe actualmente no es válido para que se puedan desarrollar nuevos proyectos sobre esa zona, “y por eso lo más lógico es que los terrenos reviertan al ayuntamiento y ahora, que fue lo que acordamos, si hay voluntad e interés por parte del Cabildo, sentarnos a redactar un nuevo documento donde tengan cabida legal y jurídica las nuevas propuestas de actuación que están apareciendo para esa zona”.

Según manifestó el alcalde, se está trabajando en darle otro sentido a este proyecto; “el Cabildo ha encargado diferentes trabajos y todos apuntan a un nuevo concepto para el desarrollo de todas las infraestructuras hechas”. Es más, el regidor local aseguró que hay varios inversores interesados para dotar de carga alojativa a la zona, algo similar a un hotel, y por eso entiende que hay que actuar porque “nosotros queremos que se desarrolle esta zona porque es un punto de interés”.

“Cualquier cosa que se haga ahí tiene que ser de la mano del Cabildo y del ayuntamiento”, dijo, si bien lamentó que el Cabildo no puso dinero este año en los presupuestos para esta zona, de modo que tiene que haber interés y si no se devuelve a los vecinos para que vuelvan a cultivar como hacían antes. Estamos hablando, recordó, de más de 200.000 metros cuadrados, muy repartidos entre la gente del pueblo y hay que darle uso. “Estamos a la espera de que el Cabildo muestre interés por el desarrollo de esas instalaciones porque hasta ahora no ha sido mucho”, se lamentó Qadri.

El alcalde insistió en este sentido en que cualquier instrumento para desarrollar esta zona con el marco legal actual tiene que desarrollarlo el Cabildo, “no podemos hacerlo nosotros”. “Para el desarrollo de ese espacio tenemos que ir de la mano, si realmente el Cabildo quiere apostar por esa zona, si no, pues ya los terrenos son nuestros, eran terrenos procomunales, se los devolvemos a los auténticos dueños, que son los vecinos de Barlovento para que los cultiven”. En opinión del regidor local, lo que no se puede mantener es la situación actual, “hay que empezar a definir a través de un proyecto lo que se se va a hacer en dicha lugar porque hace falta, y el ayuntamiento no tiene medios para arreglar lo que está hecho: edificaciones, urbanización, arreglo de vías, saneamiento, luz, electricidad o agua”.

Este asunto ya ha sido abordado por el Ayuntamiento y el Cabildo en varias reuniones y según ha explicado Qadri “lo que acordamos es sentarnos y elaborar un nuevo documento que defina lo que se va a hacer allí y que habilite a cualquier inversor a poder hacer actuaciones que generen economía y puestos de trabajo, que es para los que se había pensado”.

Una infraestructura fallida dirigida a divulgar la historia agrícola y ganadera de la isla

El Centro de Interpretación del Mundo Rural de Barlovento estaba llamado a ser una infraestructura turística de primer nivel que permitiera divulgar la historia agrícola y ganadera de la isla entre los visitantes, pero se invirtieron más de tres millones de euros en su construcción y nunca se terminó ni funcionó. El paso del tiempo ha hecho el resto, ya que las edificaciones construidas, muchas de ellas con presencia de maderas nobles y materiales importantes, en las que supuestamente se iba a mostrar la cultura del vino, del queso o la miel, se han ido deteriorando por el abandono de casi una década y han sido objeto de actos vandálicos.