El director médico del Hospital de Dolores dio instrucciones de vacunar a la consejera aunque no estaba en el listado de Sanidad

El consejero de Ceuta que se vacunó dimite, aunque dice que actuó “correctamente” (El Confidencial, 26/1)
Chapó ¡¡¡. Es lo que le viene a este caso también.
Un amigo abogado: “La consejera está allí unas horas; la consejera aparca su coche allí para irse a hacer otras cosas por fuera: la consejera tiene otros despachos y también puede ir por el Cabildo y trabajar e interactuar desde allí (nada lo impide); la consejera sí que no interactúa con los pacientes, ni con sus familiares; la consejera no es personal del centro. Su subordinado organiza un apaño para vacunarla con alegatos harto discutibles, porque ella no es personal, y no va a aparecer en ningún listado de personal del centro, y menos aún, no realiza tareas de ninguna especialización; la consejera puede teletrabajar como el Cabildo organizó desde meses atrás, y todavía viene haciendo.
Por el contrario, a la consejera nunca se le recomendó o aconsejó que no acudiera al centro por su salud y la de los que allí trabajan, así que su exposición, riesgo de contagio y riesgo de contagiar fue no tenido en cuenta, sin exigirle que lo tuviera en estimar, dado que no es personal de la casa, y lo que pudiera llegar a ocurrir fuese un problema serio Ahora con la vacuna (a la que tiene legítimo derecho de ciudadanía, cuando le llegase el turno establecido por las autoridades sanitarias) se pretende seguir manteniendo este “status quo”, que bien pensado, no tiene ningún sentido y por tanto, ninguna finalidad o mérito. Su subordinado entonces toma la decisión de ordenar una vacunación para ella haciendo la interpretación de la Norma que le(s) conviene, y siempre de forma unipersonal, sin consultar con nadie y sin solicitar autorización o permiso, a las autoridades responsables, dado que la vacuna no es propiedad del centro, ni de él mismo, sino de esos otros a los que podía acceder y consultar fácilmente, y con los medios y telemáticas que hay hoy y que están en uso aceptado y continuo. El señor impone todo esto saltándose una norma sanitaria de alto rango. Simple y llano resulta ser una “maquinación para alterar el valor de las cosas”, porque resulta ser un trato de favor más que descarado. El protocolo precisamente es para no vulnerarlo, es norma para organizar el común y surtir unos efectos esperables y deseables. Se rompe la norma, y a partir de aquí se puede seguir rompiendo a voluntad de esta persona, si así lo quisiera, a sabiendas de que lo uno es una decisión aislada, y lo otro es una norma, y si algo debiera concurrir en un desencuentro seria, por una urgencia vital, una necesidad perentoria e imperiosa, la evitación de comisión de un delito o algo así, no una decisión que por unilateral deviene en caprichosa, cuestionable, interesada, etc., etc., que parte de los testes o de la pituitaria; no dé la razón y cumplimiento de la Norma. . Así las cosas, resultan peores que el simple maquinar, así sobreviene el prevaricar, y para consumar el dislate decisorio prepara unos informes exculpatorios e inclusivos acerca de su superior, cuando ha resultado ser que nunca se le ha reconocido como personal del centro, nunca; porque no lo es. Esta superior, acepta toda esta dadiva muy bien maquinada, con lo que ya participa de un cohecho pasivo, y el cual también podía haberse negado a aceptar, por impropio, y por ética personal, al igual que si han hecho otros concejales, alcaldes, y consejeros que todos conocemos, aunque en mucha menor cantidad que esos otros casos de corrupción por búsqueda de un beneficio y en el terreno de lo público. ¿Qué vino a decir y a tener en cuenta el total del equipo médico del Hospital? ¿Qué dijo el Servicio Canario de la Salud? ¿Qué dijo la Consejería de Sanidad? ¿Qué dijo el presidente Hdez Zapata, máximo responsable o responsable máximo del Hospital de Dolores? (los otros cargos son por delegación de la misma presidencia). Nunca se les consultó, para nada; y así poder hacer el apaño de favor, y para ahora tener que estar haciendo la defensa a ultranza de los hechos, aunque me parece que el tono del mentís ya va bajando de intensidad y toma un perfil más bajo en lo que es la relación de la consejera con el hospital de Dolores. Hace tres días, sin embargo, decían muchas mentiras”.
Para mi corto entender, todas las piezas encajan mucho mejor en esta teoría, que en la que ellos construyen, y que es esto mismo lo que se está ocultando con tanto mentís oficial.” Trato de favor, no lo olviden, …Y dimitir no es algo tan horrendo, que no se pueda pensar en ello. La vida sigue, pero nosotros no somos ni tan tontos, ni ellos tan listos, aunque se lo han creído, !!! NOOOOPPP ¡¡¡.