Acuerdan restaurar las viviendas municipales y comprar nuevas para los vecinos con necesidad

El Ayuntamiento de Los Llanos destinará el canón rústico a la restauración de las veinte viviendas municipales y avanzará en los pliegos para la compra y adjudicación de otras nuevas para atender la demanda de las familias necesitadas del municipio.

Este acuerdo se adoptó en el último Pleno municipal porque CC presentó una moción para que con el canón rústico se compraran viviendas. Sin embargo, el Grupo de Gobierno recriminó a los nacionalistas que se estaban contradiciendo puesto que en la memoria de la Alcaldía de los presupuestos plantearon que con dicho canon se restauraran las viviendas que tiene el consistorio y que están la mayoría de ellas en situación de abandono.

Desde el Gobierno Local se mostraron a favor de comprar viviendas para poner a disposición de los vecinos pero siempre que la prioridad fuera restaurar las que tiene el consistorio porque el primer teniente de alcalde, Mariano Hernández Zapata, ha explicado que "no tiene sentido comprar nuevas sin arreglar las que tenemos. El acuerdo final al que llegamos es que se trabaje paralelamente en la restauración de las viviendas municipales y se avance en los pliegos para la compra y adjudicación de otras nuevas".

Cuatro de las viviendas municipales están situadas junto al campo de fútbol municipal Aceró, eran las antiguas casas de maestros; en una de ellas vivía una persona hasta hace unos meses, pero se llegó a un acuerdo y los inquilinos ya se han ido. En este sentido, como en el pleno de presupuestos se acordó trabajar para mejorar las viviendas, la oficina técnica ya tiene el proyecto para restaurar esas cuatro casas. "Estamos hablando -explicó Hernández Zapata- de un proyecto por vivienda de unos 30.000 euros, para dejarlas con cocina, baño, amuebladas, con zonas comunes y en perfectas condiciones para ser habitadas".

Las otras viviendas están ubicadas en la Enrique Mederos, enfrente del Colegio Nazaret. Aquí todavía hay dos o tres habitadas, pero el objetivo es que estas personas las abandonen, porque su condiciones han mejorado, para arreglarlas y adjudicarlas a personas que lo necesiten.