Oramas vota en contra de Sánchez y pide disculpas a CC porque "no guardé las formas"

Ana Oramas tal y como había anunciado votó No a la investidura de Pedro Sánchez en contra de la abstención acordada por su partido y explicó su decisión muy emocionada en el debate antes de la votación. “Voy a empezar a decir que voy a votar no porque por encima de mis intereses personales y políticos, por encima de los dos de mi partido, están los de Canarias y los de mi país”.

“Pero dicho eso -dijo- quiero pedir disculpas a mi organización política, he sido una mujer 25 años militante y tenía que haber buscado la forma de que mi partido previamente hubiera sabido cúal era mi votación en conciencia y mi decisión individual, haberlo hecho en los órganos de partido y no en las formas que lo hice”.

En su intervención durante el debate de hoy previo a la votación, Oramas pidió disculpas “a los compañeros de mi organización política porque han sido objeto de ataques infames en las últimas horas, igual que mi compañero del Grupo Mixto, Tomás Guitarte, de Teruel Existe, mi compañero Pedro Quevedo y compañeros del Partido Socialista”.

“Los que hoy-dijo- me dicen que soy una valiente, una Juana de Arco, son los que hace una semana me llamaban de todo, y nos tenemos que crecer porque ni soy una facha ni esta gente del PSOE, ni los que votan de Podemos están con los terroristas; ¿qué está pasando? No podemos contribuir a esto”, manifestó, y pidió “dignidad”. “Estamos aquí porque nos eligieron a los ciudadanos: a los de Bildu, a los de Ezquerra, a los de JxCat, a mí, a los del PP y a los del PSOE; no contribuyamos entre todos a que nos llamen “esos radicales” que cuando dicen lo que le gusta eres Dios, y cuando no eres el Diablo”.

“Yo soy -añadió- una diputada sencilla, que pido disculpas a mi organización y mis compañeros de partido porque no guardé las formas; no se merecen mis compañeros de partido ni los diputados del PSOE ni nadie lo que está pasando en las últimas horas y lo que pido entre todos es que seamos capaces de recuperar la tolerancia, el respeto a lo que pensamos cada uno: ni somos tránsfugas, ni somos vendepatrias, ni somos terroristas ni somos traidores, somos sencillamente gente que en base a sus principios y su conciencia toma una decisión hoy”. Tras su intervención, silencio, nadie aplaudió sus palabras en un dabate bronco previo a la votación en la que Sánchez fue elegido presidente por dos votos de diferencia: 167 síes, 165 noes y 18 abstenciones.